Capitulo 4

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Siete meses y medio más tarde...

Han transcurrido siete largos meses desde que conocí a Joey. Mi prima no deja de preguntarme por lo de aquel día, y yo guardando en mi mente y corazón aquel secreto, mi anhelo hoy cumple los siete meses y medio de vida, dentro de mí. Como se lo prometí a Joey, nadie sabe que él es realmente el padre del hijo que dichosa espero.

Encerrada en mi alcoba, tomé la foto, y la coloqué en mi pecho. Acaricié a mi bebe pensando en él, y miré el paisaje por la ventana.

Mi prima entró sorpresivamente y yo escondí rápidamente la foto debajo de la almohada. Ella se sentó a mi lado.

_ Te noto tan triste Stephanie. – tomó mis manos -

_ Debe ser el embarazo Celina. – miré nuevamente por la ventana -

_ No, no creo que sea eso ¿Por qué no me cuentas de una vez por todas quien es el responsable de que estés embarazada?

_... Aunque te lo contará, no me lo creerías nunca Celina

_ ¿Pero por qué prima?

_ Porque es y fue un bello sueño del que mi corazón ha guardado y guardará para siempre

_ Pero Stephanie...

No respondí a su pregunta y preferí salir del cuarto...

Mi prima no se quedó tranquila con lo que yo le dije y sacó de mi almohada la respuesta a todo.

Miró impresionada aquella foto en donde yo salgo junto al famoso cantante, líder de la banda Europe, que visitó recientemente el país.

Celina en lo primero que pensó fue lo que aclaró su pregunta, y terminó de confirmarlo al ver el "Especial Autógrafo" que Joey me había hecho con mucho cariño y sin más fue al patio para obligarme a que yo le dijera toda la verdad.

Impensable de lo que Celina me diría, ella me mostró en su mano la foto de Joey conmigo y yo quedé anonadada.

_ ¡¿Ese tipo es tú oculto secreto Stephanie?! ¡¿Tú bello sueño?!

_ No sé de qué hablas Celina...

Reproché nerviosa y miré mi foto en su mano. Pensé de inmediato en que habría traicionado a Joey, y sintiendo un mareo, comencé a sentirme mal.

Celina me cargó en su hombro, me condujo a mi cama, y yo le quité bruscamente mi foto y le reproché enfadada por aquello.

_ ¡¿Por qué andas revisando mis cosas Celina?! ¡¿Con qué derecho lo haces?!

_ Entonces es verdad. Tuviste algo con ese tipo famoso

Yo le respondí un sí con la cabeza y mis ojos se llenaron de lágrimas frente a mi traición.

_ ¿Pero cómo lo conociste prima?

_ Fue algo que yo deseaba, y simplemente tuve la oportunidad.

_ ¿Él sabe que estás embarazada?

_ No, y nunca lo sabrá...

Las lágrimas corrieron por mis tristes ojos.

_ Pero él tiene derecho a saberlo ¡¿Cómo pudiste involucrarte con un hombre como ese, prima?!

Mi prima estaba desconcertada y un poco enfadada.

_ Porque lo amo Celina. Estoy profundamente enamorada de él, y por eso me dejé tener este hijo suyo...

Celina me abrasó y me consoló, y yo dejé que mi corazón se desahogará.

_ Pero esto nadie más debe saberlo Celina. Nadie puede saber nunca que Joey es el padre de mi bebe.

Los días pasaban y cada día que transcurría, mi corazón y mente recordaban a Joey y el bello acto que hicimos esa noche.

Marcaba un día más en su calendario y volvió a pensar en ella y recordó una vez más aquel día y la noche en que estuvieron juntos en la cabaña.

<< ¿Qué será de ti mi bella Stephanie? >> << ¿Estarás esperando ese hijo, nuestro hijo que tanto anhelabas de mí? >>

Apoyado sobre su coche, observó el cielo y el recuerdo de esa noche fue más perduró en él.

Su amigo John lo notó muy distraído apoyado sobre el auto y se le acercó y sin querer, interrumpió su pensamiento.

Joey lo miró desatento y John le preguntó qué era lo que le ocurría.

La noche cayó en Santiago, y yo sentada en mi cama, escribía en mi diario de vida la pequeña y tierna historia que ambos habíamos vivido esos dos días y mi eterno amor por él, por Joey.

Con frecuencia miraba hacia las estrellas y soñaba con que Joey regresara para verme en mi avanzado estado.

Al cabo de ese sueño, acaricié a mi bebe y le hablé de él, de su padre.

Desde que Joey se fue no olvidaba aquel momento en que ambos nos abrasamos, y él me susurró sentirse confundido. He pensado que, tal vez, él estaba comenzando a sentir algo por mí.

Al cabo de tal pensamiento, recordé lo de la cabaña, cuando hicimos el amor. Me sentí tan amada por él en aquellos dulces momentos; sentí que ambos nos amábamos y que por tal amor yo ahora estaba esperando este bebe.

Habían transcurrido dos largos días, Joey no dejaba de pensar en aquella duda, si yo estaría o no estaría esperando un hijo suyo, y por lo mismo marcaba en su calendario cada día que pasaba desde que estuvimos juntos aquella noche.

Sentado en el living tomaba una cerveza y pensaba en ese mutuo recuerdo. Su largo cabello se dejó caer sobre su serio rostro, y tomó una decisión.

&quot;EL SUEÑO QUE TERMINÓ POR UNIRNOS&quot; { Joey Tempest }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora