Bad Girl.

capítulo 5.

Eran mis padres. 

Nash siguío la dirección de mi mirada y abrió sus grandes ojos azules. Ellos nos miraron en estado de shok, ninguno decía nada, tampoco había mucho que decir. No tenía una buena relación con ellos. 

"Señorita ¿dónde estabas para llegar a estas horas a casa?" se quejó mi padre. 

"Estaba con Nash, Dean y Jade por ahí" dije intentando escusarme. La verdad se nos había hecho bastante tarde, eran las 7 de la mañana y acababa de llagar a casa de una fiesta. Es verdad que estuve con ellos, lo pasabamos bien y ninguno cayó en mirar que hora era. 

"¿Te crees que eso es una escusa? Estas no son horas de llegar  a casa, desde que estas con el chico ese te estas volviendo una fresca" dijo mi padre con rabia.

"Paul..." dijo mi madre intentado calmarlo.

"¿Me acabas de llamar puta?" entrecerré los ojos mientras le miraba. "Gracias papá pensé que me apreciabas más que eso"

"Ya sabes lo que le pasó a tu hermano por estar por ahí a altas horas de la noche" chilló él.

"No es mi culpa que él muriera ¿sabes? estoy harta de que siempre me lo heches en cara, de que me culpes de ello cuando yo no hice nada, yo tambien le quería, era mi hermano mayor, mi ejemplo a seguir, a mi también me dolió su muerte, pero intento superarlo, solo que llegas tú y no me dejas hacerlo ¿porqué? Por que no dejas de culparme por ello." chillé mientras las lágrimas se deslizaban por mis mejillas. "Superalo de una vez, por ti, por mamá y también por mi." le miré con rabia.

Él me miró a los ojos asimilando todo lo que le había dicho "Si ese novio tuyo no hubiera existido tu hermano seguiría vivo, yo a lo mejor no me doy cuenta del daño que te causo pero tu no te das cuenta de que te has convertido en su prostituta personal, cualquier día apareces con un hijo o yo que se" 

Le miré con tristeza, mi padre me estaba culpando de algo que yo no hice y encima me llamaba puta. Se acabó. "No te preocupes, no tienes por que aguantarme mas en casa, no me vas a volver a ver, ni tampoco a culpar por lo de Jake." Y con eso, salí de casa e hice lo que dije, nunca volví.

No les había visto desde hace un año, tampoco quería hacerlo. Mi madre puso su mano en su boca mirandome mientras que mi padre apartó la mirada, agarró a mi madre y los dos salieron como si no me conocieran de allí. Miré mi vaso, pensando en todo lo que había pasado esa noche, a mi padre mirandome con desprecio y soltando cada palabra con una dósis de veneno en ella. 

"___..." Nash se sentó a mi lado en el sillón del restaurante y pasó su brazo por mi hombro abrazandome de medio lado. "No pienses ¿vale? me tienes a mi, nada de eso fue tu culpa, si él quería alejarte fue por que no supo darse cuenta de lo que hacía" acarició mi mejilla haciendome que le mirara. "Ahora despeja tu mente y cenemos, que estamos en Jack's" dió un empujón leve a mi costado y volvió a su sitio. 

Intenté no volver a pensarlo mientras cenábamos, no fue muy difícil ya que Nash hacía todo lo posible por hacerme reir. Cuando terminamos fuimos a casa ya que al día siguiente había clase. No se porque pero la última imagen que pasó por mi cabeza antes de caer rendida fue Justin besando mi mejilla.

Después de estampar el despertador contra el suelo para que dejara de sonar me levanté y corrí al baño para entrar antes que Nash. Parece que no, pero tarda mas que yo en arrglar su pelo. Lavé mi cara pa despejarme e hice lo que pude con mi pelo. Fui a mi habitacion y abrí el armario. Después de unos cuantos cambios de ropa me decidí por algo cómodo, unos pantalones de chádal grises cagados con una cremallera grande en cada pierna, unas vans negras, una camiseta pegada blanca de tirantes que dejaba un poco al descubierto mi vientre y un gorro negro con la palabra 'bad' en letras grandes y blancas. Disimulé con maquillaje las imperfecciones de mi cara y puse mis ojos negros para resaltar el color. Cogí una sudadera negra por si hacía algo de fresco fuera y bajé a preparar el desayuno mientras Nash se duchaba.

Acabamos de llegar al instituto. Al bajar del coche diré el cigarro aplastándolo y levanté mi cabeza, mis ojos se cruzaron con los de Justin. Él al verme dedicó una pequeña sonrisa a lo que yo respondí con una igual. A primera hora nos tocaba matemáticas o lo que es lo mismo, tener una hora de sueño. Me senté al lado de Nash dejando la mochila en la mesa y apoyando la cabeza en ella. Sentí que me  quitaron el gorro pero no habrí los ojos sabiendo quien era.

"Nash, estate quito si no quieres llevarte una hostia a primera hora de la mañana" me quejé.

"Primero, no soy Nash y segundo, tienes muy mala leche babe" rió al terminar la frase.