El corazón no olvida. |Aristemo

15. Pretend It's Ok?

Yolo se encontraba en la casa de Grecia tomando un licuado de plátano, eran las 9:30 de la mañana había salido del departamento una hora atrás con el pretexto de salir a correr, sabía que Aristóteles no iba a querer acompañarla y así podría ir con la castaña.

Las visitas habían aumentado, pues no tenía con quien más hablar y que supiera que ya había recuperado la memoria.

—Tranquila, Yolo —la miró.

—Es que me pone muy nerviosa el estar con ellos —escondió su cara entre sus manos

—Comprendo, pero no ganas nada, sólo que ellos sospechen

—Me da miedo, no sé que buscan y que quieren de nosotros, lo peor es que no me gusta que Ari se vaya con Temo, pero no puedo hacer nada al respecto, necesito que Ari recuerde todo, ya

—Todo a su tiempo —la tomó de la mano y le dio un apretón— y tú debes estar tranquila, para que cuando eso pase puedan pensar con la cabeza fría que es lo que harán.

Rey asintió y le dio el último sorbo al vaso con agua, tomó sus cosas y salió de la casa de Grecia junta a esta, pues ya se iría a trabajar. 

Cada día sentía que su cabeza se llenaba de nuevos problemas, entre esos, la boda. Iba escuchando algunos consejos de Grecia y para despedirse se dieron un abrazo.

—¿Yolo? —escuchó a Paloma detrás de ella

—Ho-hola —saludó bastante sorprendida.

—¿Qué haces aquí? —le dio un beso en los labios— Te llevo a casa y desayunamos

—Eh... De hecho Íbamos a ir a desayunar juntas, ¿verdad? —miró a Grecia

—Sí, sí, pero si gustas lo dejamos para otro día donde los CE...LOTES no tengan maíz —dijo provocando la risa de la chica.

—Vale, está bien

Se despidieron y Yolo subió al auto de Paloma donde se encontraba Temo en el asiento del copiloto, le dijo un simple "Hola" mientras esperaban de que Paloma subiría, ya que se quedo comprando en una tienda

—¿Todo bien, Yolo? Te veo muy seria —la volteó a ver

—Sí, es sólo que... ¿Quieres a Aristóteles?

—Como no tienes idea, ¿por?

—¿Le harías daño?

—Nunca y si se lo hiciera nunca me lo perdonaría, ¿a qué viene todo esto?

—Aristóteles es feliz contigo, te quiere, lo conozco desde hace años y sólo una vez lo vi así de enamorado y esa relación terminó bien, pero a pesar de eso sufrió por meses. No me gustaría que le causes una desilusión o lo dañes, si eso es lo que quieres aléjate, por favor, no lo merece

Paloma entró al auto y así impidiendo seguir la plática. Manejó hasta el departamento de Yolo donde desayunaron, Temo no podía sacar de su cabeza lo que la novia de su amiga le había dicho, se quiso convencer de que sólo estaba preocupada por Ari, pero hubo algo que no se podía sacar el "sólo una vez lo vi así". ¿Acaso la rubia ya había recordado algo?

—¡Hey, Temo! —gritó Ari pasando sus manos frente a su cara

—Mande

—Te pedí el azúcar

—Perdón, mi amor —sonrió y le pasó la azucarera 

—¿Qué tienes? —cuestionó Paloma

—Cosas de trabajo, me tienen muy estresado, pero no importa

—No siempre puedes pretender que todo está bien, en su momento tendrás que afrontar todo —expresó Yolo muy seria

—¿Qué? —preguntó Aristóteles.

—Que si piensa que intentando restarle importancia a esas cosas de trabajo lo solucionara está mal, en su momento tendrá que resolverlas y es mejor que lo haga ya

"¿En serio crees que todo es casualidad?" preguntó una voz interna a Cuauhtémoc mientras Yolotl lo miraba.

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¡Amigos ya estamos más cerca del finaaaaaaaaaaaaal! Estoy muy emocionada

¡Nos leemos en el próximo capítulo, bye!