Quiero que seas feliz (JIHAN)

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Jeonghan estaba boca abajo en su cama, agotado, de mal humor y arrepentido. Luego de ese día de haber trabajado en equipo con Joshua yendo a comprar y cocinando, se fue a casa, conteniéndose de compartir mucho con él, por miedo a esa extraña atracción por el castaño.

Pensaba darse un tiempo para al fin dar un paso, dando un tiempo a Jisoo para que no tuviera tan reciente su ruptura y poder saciar esas ganas de probar de nuevo sus labios.

Fue unos días en la semana para visitar a Seungkwan, estando en modo amigos con el americano. Las excusas para visitar al menor se acabaron así que estuvo varios días sin poder ir.

¿Por qué mierda hizo eso? Si siempre Jeonghan suele ser de los que ataca en cuanto tiene la oportunidad.

Ahora había vuelto de al fin haber visitado de nuevo ese departamento, donde había esperando algo impaciente a que volviera Joshua del trabajo, pero se demoraba mucho.

Cuando al fin se dignó a preguntarle a Seokmin sobre su amigo, este se mostró sonriente, dándole la idea de que era una buena noticia.

"Al fin termino el papeleo y está viviendo en su nuevo departamento" Dijo con una sonrisa, pero eso rompió algo dentro de Jeonghan. 

Estaba frustrado, ¿Por qué mierda espero? Ahora no sabía que hacer y no quería preguntarles sobre donde vivía ahora, o si no sospecharían y lo molestarían mucho como venganza a como solía ser con ellos.

Aparte de querer saber cómo sería acostarse con alguien como Joshua, también le gustaría saber cómo lucia sin tener la cara llena de golpes y heridas. Pero ya no podía saberlo.

Si esa noche no se hubiera apoyado en donde lo golpearon, ¿Habrían ido más lejos? Quizás haya saciado su interés por este hombre y ahora no estaría tan obsesionado.

Jeonghan no solía ser así cuando encontraba a alguien que le llamaba la atención, empezando por el hecho de que solían ser muy atractivos y le interesaba una mierda sus vidas mientras tuvieran un encuentro interesante en la noche.

Con fastidio, se levantó de su cama para prepararse la cena antes de dormir. Rezaría a todos los dioses que conocía para poder encontrarse de nuevo con Joshua, para al menos quitarse esas sensaciones de encima.

...

Había pasado ya casi un mes y al menos ya no tenía tan mal humor como en un inicio, pero aún seguía preguntándose a cada rato que tal le estaría yendo a Joshua y si le hizo caso en su consejo de "vivir la vida", pero cuando pensaba en eso, se molestaba un poco.

Se enojaba consigo mismo al tener ese tipo de pensamientos, pues no se reconocía.

Gracias a Seokmin lograba saber que Joshua estaba acomodándose bien en el nuevo lugar, recuperándose de sus golpes y que está viviendo tranquilo, disfrutando de su soltería.