te puedo decir, bebe- lo veo con espanto, a lo que dice -no, está bien mi amor- vuelve a juntar nuestros labios.
-ya o se me ara tarde- digo aún con sus labios sobres los míos, siento sus sonrisa y la mía se hace más grande, durante el camino no mencionamos palabra, al llegar a donde teníamos que bajar y caminamos a la escuela, sostenía, mi mano sobre la suya, así como siempre caminábamos nos acostumbramos a hacer lo, al estar cerca de la entrada, las miras asía él se hicieron presentes, sentí una gran satisfacción al saber que ahora ya no tenían esperanzas, ese chico es mío, y de nadie más, pensé de manera posesiva, nos detuvimos y lo mire atenta, el sonreirá, quite un mechón de su cabeza y después los revolví
-¿vendré por ti?, ¿a qué hora dales ?,- sonreí esto sería más emocionante
-a las nueve, - le dije y sonrió aún más le dolerán las mejillas - tendremos que decirle a mi madre- dije poniendo una manos sobre su pecho y la otra sobré su abdomen, este se tensó por mi tacto y amplíe mi sonrisa - y tú te arreglarás sólo--está bien puedo con ello - dijo asintiendo, di una rápida mirada y la mayoría nos observa, sobre todo las chicas, que esperando que lo deje solo para que se vuelvan agentes de la SIA o algo así con él, - porque mira tanto - veo en su dirección, y es Juan, siempre a quiero salir con migo pero me he negado muchas veces las misma que me lo ha propuestos no separa sus ojos de los de Sam y si algo tengo muy seguro es que él es un tanto celoso, sólo cuando es necesario lo demuestra
-no le agás caso - me mira y niega - siempre ha querido una oportunidad pero no lo ha conseguido- le digo y asiente - ahora que pienso para ti fue rápido, debería de-
-no, lo dicho y hecho ya está así que no ay vuelta atrás -
-tengo que irme, ¿te veo en la noche ?- asiente -cuando yo entré por esa puerta- digo acortando la distancia - te vas sin hacerle caso a nadie - sí y así como el yo también soy celosa y creo que más el
-lo que usted pida- sonreí y golpeo ligero su brazo
-así, lo que yo pida - dije de modo pícaro y sonriente, podría acostumbrarme a esto - quiero - pase mis dedos sobre su brazo acendiendo un poco y sonrió -quiero un beso- dije al fin y este sonrió
-pensé que no lo dirías - se acerca y pone sus labios sobre los míos, en definitiva, saben muy bien sus labio, no fue un beso largó, fue corto pero lleno de energía, sonrió al alejarme de el - vendré por ti y hablaremos con tu madre - asiento me doy la vuelta y entro a la escuela,siento las mirada en lo espalda pero no digo nada sólo avanzo, hasta llegar a mi salón no quiero que me molesten sobre todo porque a este tiempo un cuarto de la escuela debe de saber, el maestro habla y habla, mis clases pasaban y con ellas la hora de la salida, es la última y ya me aburrido no he salido esta vez, bien preferido que me molesten a escucharlo, tomó mis cosas y salgo, llegor a mi lugar y donde esta Erick, y Melisa.
-hola - le digo y me mira esperando
-hola, señorita tengo novio-dice Erick son una sonrisa burlona
-ya desvía yo que no duraría - dije y asintió, aún con su sonrisa
- ¿así que con Sam ?,¿desde cuándo?,¿por qué no me avías dicho?-
-desde hoy, si con Sam y te iba a decir - ellos asiente, y me miran atentos, a lo que yo río
-¿cuándo te lo ha dicho- me pregunta Melisa
-hoy, por la mañana y le he contestado esta tarde que me trajo - le digo con la voz un poco cantarina, el interrogatorio continuo hasta salir, al salir no hizo falta buscarlo ya estaba hay con sus brazos cruzados y su chaqueta de cuero al verme ambos sonreímos, es lindo verlo hay saber que está aquí, es un gran punto a su favor.
-santo dios- dice Melisa, y Erick -necesitamos insulina de tanta miel que hay al rededor - los miro divertida con la mirada, me acerco a él, lo miro
-y como te fue?- pregunta y me encojo de hombros, veo su sonrisa que se borra, y veo en su dirección, está bien a Juan que sigue hay de mestice con sus amigo
-hola señor novio - dice Melisa, a lo que él contesta con una sonrisa - que se siente, conquistar a la indomable - sonríe y niega, como su mano con la mía entrelazando las miradas de nuevo pero no me incomodarme es normal, Sam es guapo, sexi y solo mío.
-vamos es hora de irnos - les digo caminando, durante el camino, no nos dejaron solos así que durante este tiempo le dije adiós a sus labios, llegamos a la equina y mi hermana no estaba
-nosotros aquí los dejamos - dice con burla asía él, sabían que teníamos que hablar con mi mama no me gustaba estar a escondidas, asentimos y se van suspiro al ya no tener que oír los, es un alivio que pueda estar un momento con él,
-hasta que se fueron - dice colocando sus manos en mi cadera, asiento y recibo de buena gana su beso, sólo uno ya que tenemos que llegar, mi madre está de espaldas
-ya llegamos mama - le ago. saber y sigue de espaldas-mama - intentó llamar su atención pero sólo consigo un ajá dime, sin voltear
-señora quiero hablar con usted- dice al fin él,mi madre como la chica del exorcista, gira su cuello y nos ve ambos, nos sentamos frente a ella, su mano de Sam la deja en mi pierna -bueno - dice y me mira -buenas noches -
-buenas noches - dice ella poniendo atención en su mano, está nervioso, es tierno,
-señora he venido, decirle, a pedirle que sí me daba permiso de salir con su hija - su voz salió despacio y con ligeros tartamudeos, al final se aclaró la voz su mano apretó un poco mi pierna, ella levanta ambas cejas y me mira.
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ORQUIDEA
RomanceHoy he decidido empezar a contar la historia de nuestras vidas, la de mi madre una señora de gran entusiasmo que a pesar de todo sigue adelante, la de mi hermana que, como decirlo es muy parecida a mi mamá, es noble y no necesita de nadie para segui...