I N F I E L ❥ 전 정 국

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Mis ojos se llenaban de lágrimas lentamente mientras sentía los espasmos por el llanto de mi esposa.

¿Tendríamos un bebé?

¿De verdad tendríamos un bebé?

¿Nuestro bebé?

Mil pensamientos pasaban por mi cabeza, atónito ante aquellas pruebas que demostraban un hecho seguro.

Joon Hyun estaba embarazada.

Ella lloraba con dolor, un dolor desgarrador. Sin embargo, una posibilidad pasó por mi mente.

Si ella me fue infiel, ¿quién me asegura que esté embarazada de mí?

Un dolor en mi pecho se instaló acompañado de una repentina furia. Pero en su estado y preocupado por ella, traté de calmar mis nervios y hacer lo mejor para ella incluyendo este futuro niño que llevaba en su vientre.

—- Vamos...—- Le dije aún consternado tomándola de la cintura para levantar su cuerpo del suelo.

No rechistó, no hizo nada, solo veía su mirada pérdida.

—- Cuidado.—- Le advertí cuando estuvo de pie entre los cristales rotos.

No pensé mucho en mi siguiente acción, solo hice lo que tenía que hacer.

La alcé entre mis brazos como una princesa, se aferró a mi cuello y a mi pecho como si no hubiese un mañana, podía sentir el temblor de su cuerpo.

No sabía quién estaba más destrozado.

Si ella o yo.

Caminé con cuidado entre los vidrios y al llegar a salvo a la habitación la recosté sobre la cama con mucho cuidado.

Verla se esa manera, tan rota, tan vulnerable... Solo incrementaban mis ganas de protegerla de todo.

—- Te traeré un té con leche, como te gusta ¿si? —- dije mientras le limpiaba el rostro con mis manos dispersando sus lágrimas antiguas y arropándola bien.

La miré buscando alguna respuesta de su parte pero aún sus ojos se llenaban de gruesas lágrimas. Suspiré derrotado al saber que no iba a hablarme en este momento.

Dejé un beso en su frente y cuando me paré de la cama tomó mi brazo.

—- Jungkook...—- Susurró queriendo decirme algo, lo cual yo sabía pero que imaginaba que aún no me diría.

Sabía muy bien que teníamos una conversación muy pendiente.

De todo, el embarazo, de nuestro matrimonio y de mi problema.

—- Tranquila.—- dije acariciando cálidamente su mano con las yemas de mis dedos —- hablaremos cuando estés más tranquila y cuando termine de limpiar el baño ¿vale? —- Le hablé con una sonrisa comprensible pero que a mi por dentro me quemaba.

Por mucho que deseaba reclamarle y gritarle, decirle lo mal que me sentía por dentro por dudar de la procedencia de su embarazo, lo destrozado que me tenía la idea de pensar que ella sería la madre de un niño que no es mío... Me mataba.

Pero Joon Hyun... En estos momentos ella me importa más.

Podía ser una mierda de persona pero mientras yo fuese consciente, la protegería a ella y a su hijo.

Me miró con los ojos aguados y asintió dándome una sonrisa triste. Liberó mi brazo y sin más fui a buscar su asqueroso té que tanto ama.