Capítulo 4- Déjate llevar.

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Karol.

Quería irme, estaba incómoda, asustada.
Al oír sus pasos bajando por la escalera, mi piel comenzó a erizarse...se sintió horrible que un hombre me use para masturbarse, más cuando estoy presente y escucho absolutamente todo.
Aunque, es Ruggero Pasquarelli, el más hermoso de todos, aún así siento asco por mí misma.

—Ya regresé pequeña. -dijo sentándose delante de mí.

El me observó y rápidamente percato que estaba incómoda.

—¿Que sucede? -tomo mi mano por encima de la mesa y miró directamente mis ojos.

—Me siento usada, asquerosa, no se. -suspiré y baje la mirada.

Se dió cuenta a que se refería.
Se acercó a mí y me estrecho fuerte contra su pecho, acariciándome la espalda.

—Oye, perdón si te hice sentir mal...o lo que tú digas. Mi amigo estaba emocionado, era la única forma de calmarlo. Se me escapó tu nombre, fue un error, aunque si pensaba en ti. Perdón -me miró a los ojos

Yo lo mire, suspiré y sonríe levemente.

—No lo vuelvas a hacer mientras yo esté presente, ¿Va? -dije seria.

Él asintió y me dió un beso, en la frente.

—¿Vamos a mirar una peli? Yo no tengo hambre, pero puedo encargar comida así comes lo que quieras. -toco mi nariz y rió

Yo reí e hice lo mismo con la de el.

—Tampoco tengo hambre, pero si sueño.

Él hizo un puchero tierno.

—O sea, que si miramos una película ¿Te dormirás? -pregunto acariciando mi brazo.

—Podemos ir a la cama y crear nuestra película.

El abrió grande los ojos; yo también.
¿Eso dije yo? ¿Donde está la Karol "inocente"?

—Prefiero ir a crear nuestra película. -dijo mordiéndose el labio.

Yo sonreí algo tímida y mi piel se erizo al sentir sus labios en mi cuello.

—Solo déjate llevar... -susurro creando un camino de besos en mi cuello.

Enrede mis brazos en su cuello, cerrando mis ojos.
Jale leve de los rulos de su nuca al sentir un pequeño mordisco.

Rápidamente me tomo de los muslos alzándome, caminando hacia las escaleras mientras mordía y besaba mi cuello.

Al llegar a la habitación, mi corazón comenzó a latir rapidísimo, ese momento tan esperado para mi, esta por pasar...

Me recostó suave sobre la cama, sonrió mirándome a los ojos y se acercó a mis labios.

—Princesa, estás muy tensa. Tranquila, no te haré daño y seré cuidadoso. -dijo en un susurro acercándose a mi oído- Te haré el amor lento y disfrutarás como nunca. -susurro con su voz ronca.

Mi piel se erizo y mi cuerpo se tensó aún más, tengo los nervios a flor de piel y él me está alterando peor.

Me fue levantando poco a poco la remera, mientras daba besos suaves en mi cuello, y alguna que otra mordida.

Me sonroje al verlo mirando mis pechos, con una sonrisa en sus labios.

—Apaga la luz -susurré, me daba vergüenza.

Él se levantó, apagó la luz y volvió a ponerse a horcajadas sobre mi.

—Relájate pequeña, sos perfecta tal y como eres. -dio un beso entre mis pechos.

Reencuentro  》RuggarolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora