Capitulo 11

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Diablos... - Naruto murmuró para si mismo mientras se estiraba en la cama y pronto sintió un gemido molesto y adormilado de su acompañante. 

Natasha se frotó un poco su unico ojo abierto, cuando su vista se enfocó le dió una suave sonrisa al chico que tenía como misión enamorar o ganarse su confianza. Honestamente para Natasha, a estas alturas la misión estaba completa pero junto con ello hay un pequeño problema, y ese problema es que tal vez, por accidente claro está, se enamoró de el chico que ahora estaba usando como una almohada.

Buenos dias - Naruto dijo en voz baja, para no exaltar a su amante recién despierta.

Pasó una semana desde que Natasha lo recogió en las calles de Queen's y en toda la semana solo tuvo ojos para ella, no pensó en nadie, ni en Tony, Pepper ni Peter, la sola presencia de esta mujer le hace olvidar todos sus problemas.

Buenos dias - Nat sonrió y besó el mentón del rubio.

Su relación era bastante rara, ambos estaban de acuerdo que su relación avanzó demasiado rápido, incluso saltandose algunos pasos pero estuvieron bien con ello, si quisieran una relación convencional y aburrida, ni siquiera seguirían hablando después de aquella noche loca en Las Vegas. 

Ambos estaban concientes de que se comportaban de manera anormal cuando estaban juntos. Naruto quien siempre quiere tener todo bajo control, tener a la chica en la palma de su mano y Natasha, quien disfruta ver a los hombres arrastrarse por ella y claro, tener el dominio total de la relación.

Olvidaban eso cuando estaban juntos, solo se dejaban llevar por el deseo y la pasión, haciendo lo que quieran y cuando quieran. Era algo no muy sano pero ambos estaban dispuestos a intentarlo, dando como resultado que se enamoraron locamente uno del otro.

Toda la semana fueron de ciudad en ciudad, divirtiendose los dos juntos y conociendose. Claro que la lujuria les jugaba una mala pasada, Natasha tampoco hacía nada para detenerlo, parecía querer seducirlo cada vez que tenía la oportunidad y Naruto no era quien para negarse a los deseos de ella.

¿Que pasó con la noche de pelicula? - Preguntó Naruto sacando una pequeña risa de la mujer.

Fue tu culpa - Natasha dijo con voz inocente mientras enterraba su rostro en el pecho de Naruto.

Jaja, ¿mia? - Naruto rió un poco recordando la noche de locura.

Debido a la semana agitada que tuvieron, pasando de ciudad en ciudad, llendo a discotecas, centros comerciales, restaurantes y mas. La noche anterior acordaron tomarse la noche con calma, los dos en su lujoso Penthouse con algo de comida china, una botella de Jack Daniel's y Netflix, la noche perfecta.

Pero a un lado estaban todas las cosas, la comida sin tocar y la botella sin abrir, la tv ni siquiera estaba encendida. Pero no fue culpa de Naruto, esta vez...

Natasha la noche anterior estaba mas fogosa de lo normal y ninguno pudo siquiera esperar a que la comida llegue. Nunca olvidará el nerviosismo en la cara del repartidor al verlos tan desalineados, fueron pesimos en ocultar que los había interrumpido justo antes del orgasmo, practicamente le entregaron el dinero y lo hecharon a patadas.

Fue tu culpa, te lanzaste sobre mi anoche - Naruto bromeó - Ahora tengo hambre... - Naruto se movió para alcanzar la caja de comida china pero fue interrumpido.

¡Te juro que si tocas eso jamás volverás a besarme! - Exclamó Nat asqueada y Naruto soltó una carcajada.

Solo bromeaba - Dijo Naruto para la molestia de Natasha quien soltó un bufido y se subió sobre él.

¿Quieres que me moleste contigo? - Preguntó Natasha sentandose sobre Naruto dandole una vista exclusiva de su cuerpo desnudo.

Cada vez que la veía era como si fuera la primera vez, aún quedaba impactado al ver la perfección absoluta. Piel de porcelana, abdomen trabajado, pechos firmes y grandes, cualquier modelo mataría por tener un cuerpo tan perfecto y sin necesidad de operaciones. 

Shinobi VengadorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora