¡NO PUEDE SER QUE DESPUÉS DE TODO, ESTO ACABE ASÍ! Yo que daba por ti tierra, aire y fuego...
[2 años antes]
-Marcos no sé que ponerme - le dijo Lucía por Skype.
-Tranquila nena, tú estás guapa con todo.
Tras una larga conversación sobre el vestuario de Lucía, por fin se vistió, apagó el ordenador y salió corriendo a su encuentro con Marcos, llevaban casi un año juntos y hoy habían quedado con Pablo, un "amigo" que llevaban sin ver desde que tenían 16 años y ya estaban a punto de cumplir 18.
Cuando Marcos y Lucía llegaron a Gran Vía, allí estaba Pablo, con una camisa del Hollister, en pitillos, vans azules y una sonrisa capaz de darle la vuelta a tu mundo.
Lucía corrió a abrazarle y Marcos la siguió aunque su paso era más lento.
-¡Cuánto tiempo pareja! - Se notaba la felicidad de Pablo a kilómetros.
Le dió un abrazo a Lucía y un apretón de manos a Marcos. Tenían muchas cosas que contarse y empezó a chispear, así que decidieron ir al Starbucks a tomarse un Frapuccino mientras seguían hablando de todo lo que les había pasado durante estos años.
Encontraron una mesa con vistas a la calle, se veían pequeñas gotas de lluvia resbalando por el cristal, se oía a la gente de hablar, pero había algo que hacía más ruido que el jaleo de la gente, las miradas de esos dos... Se miraban y entre ellos paraban el tiempo, se dieron cuenta pero ninguno quería admitirlo así que continuaron con la conversación grupal de lo que iban a estudiar dentro de unos años.
-Perdonar un momento - el teléfono de Lucía cortó la conversación. Se levantó y salió a contestar.
Cuando volvió Pablo insistía en que tenía que irse, que se le había echo tarde y que ya se verían pronto.
ESTÁS LEYENDO
Dulce amor amargo.
Teen FictionLucía está enamorada de Marcos, pero Marcos siente algo que no ha sentido nunca. Siente algo por su mejor amigo. No sabe como confesarle la verdad, pero ¿que es el amor sino un grito al vacío?