Cuarta carta

21 1 2
                                    

Querido Amigo,
Ya voy casi al final del libro que estaba leyendo, y mientras más me dirijo al final creo en que Florentino Ariza no estaba realmente enamorado de Fermina Daza, sino obsecionado con ella, porque ¿Qué persona en su sano juicio puede tener un altar con el mechón de cabello de su supuesta amada?
Sé que el libro fue publicado en distinto tiempo, para ser exactos en 1986, y que seguro habrían tenido distintas ideologías de lo que es amor a comparación de las novelas rosas de hoy en día. Tal vez en ese tiempo la gente creía que estar obsecionado con una mujer era amor. Realmente No sé.
Pero lo que defiendo firmemente es que Florentino Ariza no estaba enamorado de ella sino estuvo enamorado de la idea del amor. De la idea de estar enamorado.  De la idea de sentir lo que un enamorado de verdad puede sentir.
Quizás tengas otra postura pero tengo esperanzas en que concuerdes conmigo.
Nunca creí que una persona podía soportar tanto sufrimiento por idealizar algo que nunca iba a pasar. Aunque, claro, conocí a una persona en la antigua escuela que sí lo hacía. Su nombre era John, fue uno de mis mejores amigos antes de conocerte, y algo que no te he mencionado hasta el momento es que iba a ser a él a quien escriba primero, porque simplemente John fue uno de mis primeros mejores amigos, además él era como tú, escuchaba. Pero creo que nunca logró ser escuchado.
Me animaría a decirte que Jhon es alguien con características de Florentino Ariza, sí, un ser que puede sufrir por una mujer cincuenta y tres años, siete meses y once días con sus noches. En ese entonces su Fermina Daza era Elizabeth, la chica antipática que casualmente me pillabas cuando la observaba pero no porque me gustase.
No comprendo como John se enamoró de ella, a veces creía que era por sus perfectos senos, los cuales a varios chicos llamaba la atención, o por la curva que hacían sus glúteos. Sin embargo, conociendo a John sé que realmente él nunca se hubiese fijado en ella por su físico. Él era un chico de gustos simples, no era el típico que buscaba a una chica solo para presumirla y luego acostarse con ella, no, él no se comportaba así. Él se enamoraba de alguien por su forma de interpretar el mundo, por su manera de pensar, es mas, era lo que siempre se fijaba en una persona y más si era mujer. No era el joven puberto que buscaba a la chica de senos grandes para copular. Él sí se enamoraba.
Cabe resaltar que los sentimientos que él sentía por ella eran inefables y muy reales.
Pero esa etapa en el enamoramiento es la mejor cuando idealizamos a la persona. El amor es lindo hasta que te percatas de la basura de tu supuesta persona favorita en el mundo.

—Esa chica le destrozó el corazón a Jhon.

Cuando dije eso por primera vez creí que no me iba a doler y que todo iba a ser como en las películas. Pero realmente sentí un gran dolor, sentía lo que él sentí. Me sentí desmoronado literalmente, nunca creí poderme sentir catastróficamente mal, imagínate como se estuvo sintiendo él. (Ojalá eso nunca te pase)
Jhon intentó de todo, le ponía ella prioridad, casi no salía por hablar con ella, y ella lo sabía, le ayudaba con sus problemas. Y la perra nunca le dijo  un gracias, lo que ella hizo fue usar a mi mejor amigo y debiste de verlo como él estaba ciego por la tontería que ella le hacia creer. Ella Sabía que mientras más hablaba con él, Jhon se ilusionaría más. Ella nunca le puso un vasta.
Yo intenté presionar el botón de vasta muchas veces pero como dije él ya estaba muy ilusionado.
Tal vez estés pensando que es un problema muy típico en adolescentes pubertos que no saben qué es el amor y solo lo definen como lo pintan en las películas, con tonos rosas mas no grises. Adolescentes que no llegan aún a madurar y por esa razón sus hormonas se pueden alterar fácilmente logrando así la característica de todo adolescente, los cambios de humor.
Y sí, tal vez tengas razón pero creo que no estás teniendo empatía. Solo imagina, una chica super guapa y que tú crees que es tu alma gemela. Lográs entablar una conversación y te percatas de que comparten varios gustos, lo que hace que te empieces a ilusionarte, drogarte de amor.
Luego esta chica "perfecta" se te acerca más a ti y eso casua que tú compartas muchas cosas con ella. Y después, sin ningún aviso ella se empieza a distanciar y te das cuenta que ella empieza a conseguir el éxito, éxito que no hubiese sido posible sin tu ayuda.
Eso fue lo que Jhon sintió.
Sé que eso no sólo puede pasar en el mundo de un adolescente puberto sino también en el mundo de los adultos.
No puedo describir como él se sintió pero déjame decirte que esos días él no pudo hablar con nadie ni siquiera conmigo. Intenté de todo, le invitaba a salir pero se rehusaba, le presentaba más personas pero él las omitia. Habla con él de temas distintos del amor pero de alguna manera el podía vincularlo con su problema anímico .
Por suerte, un día llegó todo feliz a la escuela.

—La vida es muy corta para estar muriendo por alguien que no vale la pena. Es más, la vida sería aburrida si las personas piensan mucho en sus problemas y no ven el otro lado de la moneda.

Esas simples palabras fueron suficientes para discernir lo que le había pasado a Jhon, había aprendido a dejar ir los malos pensamientos. Tal vez nunca lo sabremos como lo hizo pero tengo una hipotesis. Por lo que me acuerdo su madre trabajaba como
Consejera escolar. Y como podrás imferir tal vez fue ella quien lo ayudó a volver a ser feliz.
Continuó pensando qué tan chocante en una escala del 1 al 1000 había sido esa tempestad que había sufrido Jhon.
Y me pregunto si yo hubiese soportado eso.

Querido AmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora