P.O.V. Xavier
Amigo qué demonios. Sacala de ahí, hombre. Mi lobo dijo.
-Joder-. Murmuré corriendo hacia Diana. No dudé en entrar al río. Sentí que el agua fría me picaba la piel, pero lo ignoré mientras nadaba hacia donde Diana se encontraba.
Por alguna extraña razón, no podía oler la sangre, pero eso no era importante en este momento.
Cuando estaba a solo unos metros de llegar, inmediatamente se despertó. Y a través del agua clara pude ver sus manos deslizándose hacia sus rodillas casi como si estuviera lista para sacar algo de sus botas.
Su cuchillo.
Todavía recuerdo el momento en que había visto caer el cuchillo de plata de sus botas.
-¿Diana?- Llamé y ella hizo una pausa, para luego mirarme parpadeando muchas veces. -Mierda, Diana, ¿qué pasó?-. Cuando dí un paso adelante para ayudarla a levantarse, me apartó.
Sorprendido era una subestimación.
Me había empujado débilmente, pero perdí el equilibrio, tropecé y caí hacia atrás haciendo un gran chapoteo. O bien yo era débil o ella era fuerte.
Lo siento. dijo pareciendo distraída, pero antes de que pudiera decir algo más, se levantó del agua y avanzó por el bosque.
-Mierda- Murmuré -¡Diana! ¡Espera!- Grité mientras trataba de levantarme del agua. Se detuvo y se dió la vuelta. Me quedé inmóvil al mirarla. Su rostro estaba vacío de cualquier emoción y sus ojos que usualmente brillaban cuando estaba cerca parecían más oscuros.
Negó con la cabeza antes de volverse y desaparecer en el bosque.
Mis ojos vislumbraron sus pantalones.
Sin mancha.
Amigo, no. Simplemente no. Escuché a mi lobo murmurar con las patas en la cara.
¿Encontraste a Diana? De repente preguntó Tessa a través del enlace mental.
Miré fijamente el lugar por donde se había ido Diana. Si...
Bueno, dile que James quiere hablar con ella. Mark se unió repentinamente, ¡Oh y él dijo que Diana podía hacer malvaviscos de chocolate!
En serio Mark, no tenemos ningún ingrediente. Tessa recordó.
Aha perra, compré unas barras de chocolate-
Los corté.
Eran demasiado infantiles para su propio bien.
Finalmente salí del agua y me dejé caer en la hierba por un rato.
¿Qué pasaba con la sangre? Podría ella ...
¡No! Mi lobo gruñó.
P.O.V. Diana
Estaba sentada en la orilla de un acantilado. Tal vez la gente normal pensaría que es aterrador, pero en realidad era simplemente relajante.
La brisa me golpeaba ligeramente, el sonido de los grillos era lo único que escuchaba, y la sensación de la hierba fría y húmeda me hacia cosquillas en la piel.
Encontré este lugar cuando dejé a Xavier y caminé por el bosque.
Cerré los ojos e inhalé, el sueño que había tenido volvió a mí.
-Tu mejor amigo ha muerto, lo viste con tus propios ojos. Y no podrás cambiarlo sin importar cuántos sacrificios hagas-.
Me burlé y sacudí la cabeza, esperando sacar de mi mente esos recuerdos desafortunados
-Les prometí a tus padres que te cuidaré, ¿verdad? Y te prometí que haría todo lo posible para protegerte-.
Pero rompí mi promesa.
Si pudiera retroceder en el tiempo, cubriría la boca de la pequeña Diana con mi mano antes de que pudiera gritar el nombre de Danny.
Aquello no hubiera pasado si simplemente hubiera...
Suspiré de nuevo y me tapé la cara con las manos. No servía de nada pensar en lo que podría haber hecho en el pasado, de nada serviría el arrepentimiento.
Esa noche... nunca me había sentido tan perdida antes.
-¡Diana!- Escuché a alguien llamar, una voz que de alguna manera creaba mariposas en mi estómago.
Levanté la cabeza y miré hacia atrás.
¿Xavier?
No me molesté en huir de él, después de todo, estaba sentada en la orilla de un acantilado. Su rostro mostraba preocupación al ver donde estaba sentada.
Estaba preocupado por mi caída desde el acantilado.
Me río silenciosamente... mientras me preocupaba por enamorarme de él.
Cursi... pensó mi conciencia.
Palmeé el lugar a mi lado, y él obedientemente se sentó a mi lado.
No salió ningún sonido de los dos mientras seguimos sentados allí simplemente admirando la vista.
Apoyé la cabeza en su hombro utilizándolo como una almohada. A él no pareció importarle, sin embargo, la esquina de sus labios se contrajo.
-¿Diana?- dijo mi nombre suavemente mientras sus ojos aún descansaban en la vista. Hmm era lo único que podía decir, o algo así. -Sé que hice esta pregunta antes, pero... ¿crees en las almas gemelas?-.
Sí.
Negué con la cabeza en un no.
-Bueno, ¿sabes cómo encontrar a tu alma gemela?-.
Eso no lo sabía.
Porque bueno... realmente no quería uno, mucho menos molestarme en saberlo. O tal vez lo sabia, pero lo olvidé al pensar que no era tan importante de recordar.
Tomó mi silencio como un no y por las esquinas de mis ojos, pude ver sus ojos iluminados.
De repente, unos dedos envolvieron mi mano, sobresaltada lo miro, todavía apoyando mi cabeza en su hombro. Entrelazó nuestros dedos y sentí chispas estallando al contacto de nuestra piel.
¿Por qué no podía alejarme? Pensé.
Levantó mi mano y besó mis nudillos. Inclinó la cabeza y sonrió. -Tal vez te haga creer en las almas gemelas-.
Disculpen las faltas ortográficas, una vez finalizada lo editaré.
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The Hunter's Mate *Spanish* [Pausada]
WerewolfPAUSADA HASTA NUEVO AVISO *_* Ella es una cazadora. La más fuerte de todos los más fuertes. Te puede matar con sus propias manos. Es bien conocida y al mismo tiempo desconocida. Con solo diecisiete años puede asustar a un grupo de hombres adultos. S...