Alex
Dormía placiente en mi cama acababa de llegar de la casa de Yessica (una de las omegas donde paso el celo) y caí rendido luego de darme corta ducha no sé si llegó a pasar algo de tiempo solo sé que un grito desgarrador me hizo saltar de la cama corrí a la habitación se Liam me lo encontré sentado en medio de su cama, con sus manos en su cara limpiando sus lágrimas, sus sollozos eran audibles obviamente acababa de tener una pesadilla y al parecer una muy aterradora me acerque despacio hacia el puse mi mano con delicadeza en su cabeza el pobre chico dio un respingón me pego con sus manos y se alejó un poco de mi al levantar su cara y mirarme a los ojos se dio cuenta de quién era se relajó un poco inclinándose hacia mí, sus ojos y la punta de su nariz estaban rojas e hinchados se veía que había llorado inclusive entre sueños volví a poner mi mano en su cabeza acariciando su cabello me sorprendí cuando salto sobre mi rodeándome con sus brazos y escondiendo su rostro en mi cuello seguí acarician su cabello mientras lo marcaba suavemente con mi aroma logrando que se calmara y se quedara dormido lo volví a recostar en la cama me disponía irme cuando mi suéter fue jalado, me gire y encontré una imagen que me resulto tierna y algo excitante Liam me agarraba con sus pequeños puños el suéter mientras me veía con sus ojos llorosos.
-no te... va-vayas... no me dejes so...lo por favor_ su voz me resultó hipnotizante y no fui capaz de negarme a su petición.
-quieres que duerma aquí contigo?_ le pregunte en voz baja, él dudo un momento pero asintió, se movió dándome espacio para acostarme a su lado empecé a darle suaves mimos para lograr dormirlo se le veía débil y tan frágil y a mi cabeza llego si estos tres días que estuve de viaje y él se quedó aquí solo había sufrido esas pesadillas, mis ojos pesaban después de un rato y no dude en dormirme una vez q cerciore que él dormía tranquilamente a mi lado.
Liam
Desperté sintiendo un peso encima mío abrí mis ojos pero la luz que entraba por la ventana me hizo cerrarlos otra vez cuando me acostumbre pude ver que el peso sobre mí era Alex que dormía rodeándome con sus brazos y apoyando su cabeza en mi pecho, mi cara se calentó de pura vergüenza no solo por el durmiendo aquí si no por lo sucedido anoche ya llevo varios años con estas pesadillas pero es la primera vez q alguien se preocupa por mi así como él lo hizo, lo sentí moverse y volví a acomodarme fingiendo dormir sentí su peso moverse y una cálida mano se posó en mi mejilla dándome una caricia leve, se retiró sin hacer mucho ruido en cuanto sentí la puerta cerrarse abrí mis ojos otra vez, ya no podía dormir de todos modos me levante y fui en dirección al baño en el camino revise me móvil y me fije que eran las 8:30am me mire en el espejo y tenía un aspecto horrible, ignore eso me asee y bañe me puse ropa cómoda y fui a la cocina por suerte la cafetera era similar a la que había donde vivía así q no me dio problemas para usarla le hice algo sencillo huevo revuelto con tocino, tostadas y café, me acerque a su habitación y toque varias veces la puerta, no recibí respuesta me sentí decepcionado se fue y no me dejó ni una nota.
-seré tonto porque habría el de dejarme una nota no soy nadie_ me dije a mi mismo pase a mi cuarto busque mi móvil y no lo encontraba por ninguna parte caí en cuenta q lo había dejado en el baño cuando fui a este, al entre di un resbalón cerré mis ojos esperando el golpe pero solo sentí como era agarrado por un par de brazos que me libraron de una caída dolorosa me gire y mis mejillas... mi cara entera se puso roja podía sentir el calor en ella, estaba viendo a Alex semi-desnudo y recién bañado aun tenía su pelo mojado de donde pequeñas gotas caían sobre mi hombro y algunas en el pecho de Alex, con su ayuda me enderece y lo único que prohibía que viera su cuerpo desnudo (por completo) eran un par de bóxer desvíe la mirada rápidamente y sentí como mi corazón palpitaba enloquecido en mi pecho.
-Liam te encuentras bien que pasa, te sucede algo?_ este tipo ignorando por completo sus fachas se acercó a mí y yo lo único que quería era desaparecer- Liam responde.
-Mi móvil… eh venido por mi móvil_ no me atreví a levantar la mirada del suelo aun cuando le señalaba en lugar donde estaba ese maldito aparato, vi sus pies moverse y en un momento volver a ponerse delante de mi levante mi mirada y me fije en que me extendía su mando dándome mi móvil le agradecí y salí lo más rápido que puede de ahí, me lance a la cama tapándome con las sabanas me negaba a salir de mi cuarto hasta que él se fuera. Pasaron unos minutos y mi puerta fue golpeada varias veces
-Liam puedo entrar?_ no respondió_ Liam sé que estás ahí puedo entrar?_ lo seguí ignorando en mi mente rezaba porque se fuera y ya, pero no el abrió la puerta y se sentó en mi cama.
-Liam gracias por el desayuno estaba delicioso ya me voy como ya te dije puedes usar libremente todo lo que hay aquí, no le abras a nadie okey?_ se paró de la cama y sentí la puerta de mi cuarto y luego la principal cerrarse, me sentía genial mi corazón volvía a palpitar como loco por la felicidad había recibido un elogio por mi comida mi esfuerzo había valido la pena, mi móvil sonó y al revisarlo era Ángela.
Alex-Tierno… tierno niño, el pequeño Liam tan inocente, tierno… tierno niño, hacía años que nadie (que no fuera mi familia y Ángela) se preocupara por mí por hacerme un desayuno, su pequeña carita completamente roja cuando entro al baño y yo había terminado de bañarme, tierno y dulce niño… me dan… ganas de… ensuciarlo, mancillar su inocencia, de romperlo, se parece tanto a Ángela esa traicionera que sabiendo de mi amor lo utilizo a su antojo para librarse de tener que cuidar a alguien que no fuera esa cosa que crece en ella y su sucio alfa, si ella me utiliza ¿porque no puedo yo utilizarlo a él?_ mi mente no dejaba de pensar en eso pero también se presentaban esos pequeños recuerdos de cuando me mude, del día antes de irme y de hoy por la madrugada al igual que esta mañana y lo único que puedo pensar es en su cara sonrosada y llorosa estando debajo de mi mientras lo hago mío una y otras vez ya sea encontrar o por su voluntad. Mis fantasías son destruidas por toques en la puerta de mi oficina la sustituta temporal de Ángela entra a mi despacho después de recibir su permiso, Bea, su larga cabellera rojiza le llega a su cintura ancha pero no mucho dando paso a un par de muslos que todo hombre quiere alrededor, grandes pechos que casi podían salirse de su fina blusa de manga corta, se inclinó en mi escritorio enseñándome su pecho sin ningún reparo.
-Aquí tiene le ha llegado las solicitudes de dos empresas que desean unirse a usted_ me dije esto con una voz demasiado melosa para mi gusto, esta chica son de las que se creen que pueden manejarme algo que me molesto de sobre manera…
-Muchas gracias… _ sonreí forzosamente, ella se dio media vuelta y se fue en dirección a la puerta moviendo exageradamente sus caderas, me fije en algo importante… tiene el culo muy pequeño._ Bea_ la llame, dio media vuelta y se acercó a mí con su cara de triunfo_ cariño tu… estas despedida_ su sonrisa ´´coqueta´´ se borró indignada se fue dando un portazo de mi oficina esa me hizo reír.
Vagando en mis pensamientos llego la hora del almuerzo, mi hora favorita Salí de mi oficina y como era de esperarse todos se habían ido a su descanso, adoraba está ahora es la única en que puedo estar tranquilo caminar sin ser señalado, me decidí por dar un pequeño recorrido por el edifico sería lo mejor.Liam
-Pronto serán las 12:00, me pregunto si será una buena idea llevarle este almuerzo a él_ me debatía internamente_ el me ayudó mucho anoche, en vez de gritarme o botarme de la casa, inclusive cuando levante mi mano contra él (aunque no fue adrede) me tuvo paciencia, esto será solo un agradecimiento_ me dije mentalmente mientras subía a un taxi, di la dirección de a donde me dirigía y me perdí recordando lo bien que dormí anoche, me sentí protegido, era tan tibio estar entre sus brazos y cuando me dejo hundir mi cara en su cuello, aproveche al máximo para disfrutar de su calor, su aroma y sus suaves carisias era casi como estar en el cielo.
El chofer me indico que habíamos llegado un poco avergonzado por no haberme dado cuenta me baje y casi corrí a la entrada del edificio, la señora de resección me reconoció dándome un asentimiento de cabeza me indico que podía subir, el maldito elevador no subía tan rápido como quería y yo estaba cada vez más nervioso llegue al último piso, y me sorprendió ver todos los puestos desocupados pero no me importo la puerta que daba as su oficina estaba abierta y no dude en entrar… sin tocar la puerta.

ESTÁS LEYENDO
En su Sombra
RomanceSiempre vivió bajo la sombra de su hermana nunca fue "visto" él era un remplazo un sustituto Él pensó que nadie nunca lo llegaría a ver y estaba bien con eso hasta que apareció ese alfa que lo estaba volviendo loco a cada momento, quería ser visto...