Capítulo 4.

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Al día siguiente, Jimin estuvo tan ocupado que no tuvo tiempo de pensar en el estúpido de su ex.

Pero sí para pensar en Yoongi, tal vez porque lo seguía con su rostro serio tratando de evitar cualquier mal rato con YeonBin.

—gracias. —Yoongi asintió, miró a Hoseok que seguía hablando con los peces de una pecera. —nos vemos luego, hyung.

—claro, mochi, ¿en la cena? —asintió, Yoongi besó si frente antes de ir tras su mejor amigo que había empezado a hacer caras raras frente al cristal.

—Jimin, de verdad lo siento. —Suran estaba preciosa, tenía el cabello amarrado en una coleta que le llega hasta media espalda, el maquillaje era suave y sus ojos brillaban con nuevas lágrimas. —no quiero hacerte pasar por esto y...

—Noona, de verdad...

—¡Jimin! —ambos giraron ante el grito de Taehyung, tenía las mejillas rojas y los brazos extendidos. —te estaba buscando, paso un accidente.

—¿la escultura de hielo? —Suran llevó sus manos a su pecho pero el menor de los tres negó. —¿un vuelo atrasado?

—YeonBin me acorralo. —ambos tomaron un brazo de Taehyung que estaba empezando a temblar. —él... Él quiere hablar contigo y yo le dije que no puedes, que estás ocupado y dijo que iba a hablar contigo y yo... Yo le dije que tu novio lo golpeara si se acerca y...

—TaeTae...—empezó Suran.

—¡entre en pánico! —Jimin limpió una lágrima de la mejilla del menor. —yo le mentí y le dije que... De verdad lo siento, Jimin, no se me ocurrió alguien más y yo dije que... Que...

—tranquilo, Tae, tranquilo, está bien, ¿qué le dijiste? —Suran abrió los ojos antes de que Taehyung dijera el nombre, tomó el brazo de Jimin justo cuando el más alto dejó caer sus hombros.

—que Yoongi-ssi era tu novio.








—Hola, Suran. —tenía sus ojos cansados, se había dormido tan pronto volvió de la platica con Hoseok acerca del ex prometido de Jimin.— no es que no te quiera porque si no, no hubiera venido a esta semana pero ¿Qué haces aquí?

—hey, Yoonnie, había estado tan ocupada estos días que no pude venir a platicar contigo ¿puedo pasar? —la miro con los ojos entrecerrados pero la dejo pasar,  se sentó cuando ella le dio la señal y vio como se tronaba los dedos. —¿cómo estás?

—bien. —ella asintió ante su seca respuesta y empezó a dar vueltas por la habitación. —¿por qué estás nerviosa, Suran?

—tenía un plan, lo elabore por tres meses y ahora... Ahora todo está tan revuelto que no sé cómo decirte lo que tengo que. —Yoongi volvió a pararse y la sostuvo de sus hombros, le sonrió calidamente y la vio sonreír un poco. —necesito que hagas algo por mí.

—¿qué es?

—finge ser el novio de Jimin esta semana.






—¿Jimin? —el organizador levantó su cabeza tan pronto la puerta que comunicaba su habitación con la de Yoongi se abría. —hey, te estaba esperando.

—hey, hyung, pasa. —Yoongi tenía las mejillas rosas cuando cerró la puerta. —no tienes que hacerlo, sé que le debes un millar de favores a a Suran, pero no tienes que, voy a enfrentarlo y-...

—quiero hacerlo. —Jimin cerró la carpeta,abrió su boca pero la volvió a cerrar. —no necesito explicaciones, quiero serlo, quiero ser tu novio de mentira.

Sin el de mentira, claro. Le recordó su conciencia pero no dijo nada, se quedó expectante a que diría Jimin que sólo asintió.

—en realidad vengo para que hagamos una historia creíble, hay que dejar algunas cosas en claro.

—sí, gracias hyung.

¡Jimin y Yoongi son novios! [ym]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora