2. ¿Matrimonio?

88 13 0
                                    


─ ¿Estás bien? ─Su cara muestra preocupación pero yo solo quiero una explicación de ese papel.

─ ¡Es una acta de matrimonio! ─Dije mostrándole la hoja, él solo me sonrió y me abrazó

─ Lo sé, es nuestra acta de matrimonio mi amor. ¿No es acaso maravilloso?

─ ¿Qué dices? ─Abrí mis ojos tanto como pude y comencé a leer la hoja una vez más mientras le preguntaba: ─ ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Por qué?

Él se levantó indignado. Me lanzó una mirada asesina cruzando sus manos por su pecho. ─ Jong Dae, ¿Qué es lo que te pasa?

Me quedé abobado viendo su blanquecino pecho y luego mire entre sus piernas, él se dio cuenta de que lo estaba mirando con hambre y de inmediato me quitó la sabana que me cubría para pasárselo por sobre sus hombros tapándose todo el cuerpo.

─ Hey,Hey, Hey... ¿qué es lo que significa esto? ─Señalé a la hoja que sostenía mientras trataba de cubrirme mi desnudez.

─ Mi vida, ¿qué sucede? ¿Por qué estás actuando así, bebé?

Me levanté y alcancé mi bóxer que estaba cerca de mí. Me los puse y de nuevo lo volví a ver con el ceño fruncido─ ¿Bebé? ¡Pero si ni te conozco!

─ Soy tu esposo, ¿no te acuerdas? ─Lo vi desconcertante, ¿qué estaba diciendo?, así que era mi esposo, espera ¿qué? Eso no podía ser cierto. Me miró por uno momentos más y luego sonrió ─ ¿Estás jugando? Sí, ¡Estás jugando! ¡Estás jugando! Es claro, me dijiste que te gustaban las bromas y que me podías jugar una.

Yo seguía sin creer lo que estaba diciendo, ¿yo casado? ¡JAMÁS! Me sacó de mis pensamientos cuando se acercó sin dejar de sonreírme ─ Pero ya, estamos casados, amor y por dos días.

─ ¿Qué? ¿Dos días? Pero si ayer todavía estaba celebrando en el bar y...

─ Si, ya vi que la resaca te vuelve flojo. No despertaste para nada el día de ayer. Pero olvidando eso, ¿acaso no estas feliz?

─ ¿Qué dices? ¡No! Yo-yo nada más me acuerdo que me desperté, con alguien que no conozco y con un acta de matrimonio.

─ Jong Dae, esto es serio. No estés jugando.

─ ¡Pero quién dijo que estoy jugando! No sé quién eres y...

─ ¿Qué? ─Su cara paso de estar feliz a molesto

─ Mira... eh... eh... ─Chasqueé los dedos tratando de recordar su nombre pero mi cerebro no funcionaba bien en ese momento.

─ ¡Min Seok! ─Me informó gritando y con los puños cerrados tratando de no golpearme.

─ Min Seok, pues. ─Alcé las manos como señal de estar en paz. ─ No sé cómo paso esto pero es una equivocación.

─ ¿Equivocación? ─sus ojos se llenaron de lágrimas ─ ¿Una equivocación? ¡Pero si me rogaste para que me casara contigo! Me dijiste que creyera en el amor a primera vista.

─ ¡Eso les digo a todos! ─Grité ya sin tratar de ocultar mi enojo.

─ ¡Desgraciado! Y ahora, ¿qué quieres que haga? ─Me dijo llorando mientras azotaba la puerta del cuarto de baño.
Podría ser un imbécil, pero no me gustaba ver a las personas llorar. Solo suspiré, conté hasta diez y lo seguí, golpeé la puerta y no me respondía, volvía a golpear pero tampoco me volvió a responder. Quise abrir la puerta pero el maldito le había puesto seguro.

─ Eh... tú, no llores ¿sí? ─Me puse nervioso solo escuchaba sollozos ─ Lo-lo siento mucho, obviamente es un error, pero... podríamos anularlo.

Recien Cazado (ChenMin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora