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El Alfa gruño y todos los lobos se fueron. Incluso el soldado se fue. Me quede sola con un asesino, fantástico. Despegue mi mirada del Alfa y voltee a ver el cuerpo de esa persona despedazado. ¿Cómo son capaces de hacer esto? Si no fuera su alma gemela, podría ser ese mi destino. Mierda, tal vez y ese es mi destino, aunque sea su alma gemela. Mi padre tenia razón. Los Alfas son despiadados. Nadie se salva de la furia de un Alfa. Todo lo que sentí en la celda desapareció. Toda mi vida he estado sin un alma gemela, mas tiempo no me hará daño.

"Alma mía, déjame explicarte" dijo el Alfa ya des transformado y en shorts. Trato de tocarme, pero simplemente me moví.

"¿Que me vas a explicar? ¿Qué excusa me vas a decir? No eres nada más que un asesino" estoy lo que sigue de enojada. No puedo creer que haya hecho eso. Me pare y le empecé a pegar y empujar "Dime Señor Alfa, eso es lo que planeas hacer conmigo cuando no te de las respuestas que necesites. Piensas matarme verdad. No se por que deje mis emociones tomaran la decisión de confiarte, pero ya nunca más"

El sujeto mis brazos y me abrazo fuertemente para contenerme "Yo nunca te hare daño, te lo prometo." Al escuchar esas palabras no pude evitar llorar en su pecho mientras trataba de pegarle.

"Eres un asesino" dije entre sollozos. El solo me sujeto más fuerte.

"Déjame explicarte" dijo mientras movía un mechón de pelo de mi cara y lo ponía tras mi oreja.

"Solo déjame volver a la celda" dije cansada. Mis pensamientos estaban en conflicto. El solo gruño.

"Como es que prefieres estar en una maldita celda que estar conmigo"

"Quiero estar sola, lejos de ti" dije caminando lejos de él. Solo sentí mis pies despegar el suelo y sabía que me había cargado. "¡Bájame maldita sea!" dije mientras golpeaba su espalda. El solo reía.

"Amor, me haces cosquillas" dijo mientras nos llevaba lejos de el lugar del incidente.

Me bajo para abrir la puerta de una mansión. Una maldita mansión. Este hombre tiene todo. Aunque era una mansión, se seguía viendo hogareña. Arboles la rodeaban. Sentí como mi boca se partía.

"¿Te gusta?" dijo riendo mientras ponía su mano en mi cintura, a lo que yo solo asentí. "Te quitare las cadenas, ¿esta bien?" dijo mientras tomaba mis muñecas. Yo solo asentí. En un segundo las rompió. Sobe mis muñecas y el solo sujeto mis manos y beso mis muñecas. "¿Estas bien?" pregunto.

"Si, no te preocupes, entremos" dije mientras me paraba detrás de él.

"Espera, quiero que sepas que no te forzare a nada. Si despues de que hablemos te quieres ir, te podras ir." pauso "obviamente no quiero que te vayas. Quiero conocerte y poder enamorarme de ti, pero si para ti no soy nada mas que un asesino despues de hablemos, lo entendere" 

"Gracias"

Entramos y había muchas personas ahí. Se veían tan felices, como si una muerte no acabara de pasar.

"Tigre, ¿acoso eres tú?" dios mío no puede ser. De todas las personas tenia que encontrarme con él. El Alfa solo me abrazo cerca de mi cuerpo y lo ve con una mirada desafiante. "Tranquilo Alfa, somos amigos." Dijo riendo como si no le importara que el Alfa estuviera enojado

"Creo que tenemos definición diferente de amigos" murmure.

"Wow tigre, me dueles" dijo riendo, luego noto el brazo del Alfa y levanto una ceja, "Veo que en el interrogatorio les fue bien, picarones" jugando golpeo el hombro del Alfa.

"De hecho, no la he interrogado" dijo el Alfa guiñándome el ojo. Esto causo que el lobo negro se sorprendiera.

"Entonces, ¿que hace la pequeña tigresa aquí?" dijo, pero no dio tiempo para contestar. Al parecer entendió lo que estaba pasando y se tapo la boca para parar su grito. "No lo puedo creer" corrió y nos abrazó. "Vez tigre, te hice un favor. No sabes cuanto estoy feliz de ser el que los unió. Como tu Segundo en mando, ósea Beta, te hice un favor. Esto hay que celebrar" dijo mientras corría hacia otro cuarto.

Voltee a ver al Alfa y el solo tenia una sonrisa en su rostro, lo que causo que sonriera.

El lobo negro regreso con una botella en mano. "Un shot por ustedes." Dijo mientras servia ese liquido en unos recipientes pequeños. Le dio uno al Alfa, uno a mi y otro a él. "Un brindis por Alexander y hmmm... tigre, ¿cómo te llamas?"

"Carola" dije sonriendo, "Así que te llamas Alexander" dije viéndolo y extendiendo mi mano. "Un placer conocerte"  dije con una sonrisa. Alexander tomo mi mano y la beso.

"Asco con ustedes. Vayan a derramar miel a otra parte" dijo el lobo negro.

"Tú, ¿Cómo te llamas?" le pregunte. Es tan tonto que en mi mente me sigo refiriendo a el como lobo negro.

"Yo, el hombre más guapo del mundo, me llamo Marcus" dijo haciendo una reverencia. "Bueno, ahora que ya todos nos conocemos, eres hora de tomar" dijo para después tomarse su trago. Alexander también lo tomo. Acerque el recipiente a mi nariz y olía demasiado fuerte. Lo tomé y no pude evitar hacer caras de asco. Mi garganta quema horrible.

"¿Qué diablos era eso?" dije sujetando mi garganta mientras tocia.

"Eso era tequila amor" dijo Alexander mientras reía de mi dolor. "Marcus, Carola y yo iremos a mi oficina, si necesitas algo me avisas" dijo mientras me agarraba la mano y guiaba hacia unas escaleras.

"¡No se preocupen por mí, yo ya quiero ser tío!" grito el estúpido de Marcus mientras nos alejábamos. Trágame tierra. Sentí como me volvía roja como tomate. Llegamos al segundo piso y entramos a la ultima puerta. Su oficina era grande. Tenia una ventana con vista al bosque. La abrí y respiré el aire fresco.

"Creo que te gusta mas mi casa a ti, que a mi" dijo riendo

"Nunca había estado en una" comente apenada. Que estúpida soy. ¿Qué tal si esto hace que me vea raro? Qué vergüenza. Alexander asintió con la cabeza mientras se paraba atrás de mi para mirar la vista. Su cabeza descansando en mi hombro y sus brazos rodeando mi cintura. Si no digo nada, no hablaremos de nada de lo que ha pasado. Necesita darme una buena explicación, si no me iré, y el lo sabe. "Alexander" dije en un tono de advertencia. Me soltó y se sentó en un sillón. Palmeo el lugar a lado de el y me acerqué y me senté.

"Creo que tenemos mucho de que hablar" dijo suspirando. 

MíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora