[#1] Ambassador of love • | • NAMJIN

03

Los vehículos avanzaban lentamente y se abrían paso por un camino de tierra, levantando el polvo detrás suyo como si estuvieran haciendo señales de humo.

SeokJin agradecía que la camioneta en la que iban estuviera cerrada y nada de aquello se colara dentro, mientras miraba las ardientes colinas a la lejanía, las cuales en parte se encontraban teñidas de unos hermosos colores rosas y naranjas debido al amanecer que se acercaba.

Nadie sabía de su paradero, su hermana posiblemente se preocuparía por él y de seguro intentaría localizarlo; debía encontrar la manera de hacerle saber que estaría bien o al menos mentirle para que no se preocupara. La extrañaría muchísimo, a ella y a su pequeño sobrino y también estaba seguro de que Yoongi estaría preocupado por su problemático hermano. Él sabía que el pálido a pesar de todo, adoraba a su hermano, ya que era la única familia que le quedaba con vida.

Ahogó un suspiro y trató de distraerse mirando el paisaje exuberante que se les mostraba a su paso, pero sus nervios estaban hasta las nubes debido a la incertidumbre que les rodeaba tanto a Yoongi como a él.

Ni siquiera sabía si su colega había despertado y dudaba que al hacerlo se mantendría calmado.

—No se preocupe joven Kim, Jimin cuidará del joven Min, así como yo prometo cuidarle a usted... —inmediatamente asintió en silencio, sin atreverse a mirar mucho al vampiro.

El semblante del vampiro era amigable, pero temía a que de un momento a otro mostrara su verdadero rostro y le castigara, después de todo él había intentado asesinarle. SeokJin no tenía idea alguna si él Lord era rencoroso y no quería averiguarlo, rogaba que no lo fuera.

Lord RM iba conduciendo la Nissan Titan en la que iban mientras se mantenía en medio de cuatro vehículos de igual porte, dos adelante y dos detrás. En uno de ellos viajaba el líder de los tigres Park Jimin y su desmayado colega, quién fué el más conmocionado de los dos por la decisión que los líderes habían tomado sin su opinión, llevándoles a reducirse a ser... esclavos.

O así es como le veía SeokJin quién se veía resignado a seguir las órdenes del hombre a su lado.

SeokJin había estado preocupado desde que salieron, ya que todo había estado oscuro y ninguna persona sensata manejaría a través de la noche sin los faroles encendidos. Claro que luego cayó en cuenta que aquellos seres, debían de tener una visión nocturna o algo por el estilo, sino no podría explicar como no habían tenido un accidente desde que partieron.

Por otro lado, mientras ellos se dirigían a un lugar que él desconocía; tanto el líder de los lobos Kim, como el líder de los osos Jeon, habían recibido datos del posible paradero de Jung. SeokJin estaba seguro de que Jeon había sido enviado con Kim para evitar que este huyera, ya que se había negado a ir por Jung además había ido para evitar que el cambiaformas lobo matara al humano y quebrantara el acuerdo.

Kim odiaba a los humanos. El se los había dejado en claro más de una vez.

Al menos le quedaba el consuelo de que no tan solo Yoongi y él serían los únicos afectados de manera negativa por el incidente. SeokJin pagaría por ver la expresión de Jung en cuanto Kim le encontrara y sabía que sería pronto, ya que por lo que escuchó, el lobo era un excelente rastreador.

SeokJin volvió a mirar el amanecer y se preguntaba si aquellos mitos de que el sol volvía cenizas a los vampiros era cierto, pero a juzgar por la calma del Lord, probablemente eran mentiras.

SeokJin miró de reojo a Lord RM, no se notaba demasiado afectado como Taehyung por su forzado emparejamiento; había parecido un poco incómodo al principio, pero parecía lidiar muy bien con esto. SeokJin quería creer que se debía a que al parecer esto era algo que pasaba seguido, según lo que oyó decir a uno de los guardias quienes ni bien puso un pié fuera del despacho rumbo a los vehículos, le miraban con burla.