Enemigas Intimas

Capitulo 18

LECTORAS, ESTA HISTORIA ESTA POR LLEGAR A SU FIN, ACEPTO SUGERENCIAS SOBRE LO QUE LES GUSTARIA QUE SUCEDIERA EN LOS ULTIMOS CAPITULOS. LAS AMO, SIGAN LEYENDO Y DEJENME MUCHOS COMENTARIOS, SUGERENCIAS, QUE PARTE LES GUSTO MAS. ETC.

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"¿Cuándo fue la ultima vez que te sentiste así? La pregunta de Meryl saco a Susan del trance en el que estaba mientras ambas yacían en el sofá mas grande de la sala de la rubia; desnudas, con las piernas entrelazadas y solo con la manta que cubría algunas partes de sus bellos y femeninos cuerpos.

"¿Uh?" Susan exclamó muy suavemente, estaba tan relajada que parecía que estaba en algún tipo de calmante.

"¿Cuándo fue la ultima vez que te sentiste de esta manera?" Meryl repitió la pregunta mientras se acurrucaba contra el cuerpo de Susan quien estaba acomodada contra su regazo, sus bellos rizos rojizos contra el pecho de Meryl, su rostro recostado sobre el lado izquierdo de Meryl y su brazo izquierdo rodeando el torso de la rubia. Meryl sostenía la espalda de Susan y hundía su rostro en su cabellera de vez en vez para reconocer el aroma que tanto necesitaba.

"No lo sé, nunca me lo había preguntado" Susan respondió ya que no quería expresar demasiada emoción, temía no ser correspondida como tantas veces antes. Meryl suspiro y no dijo nada, presiono sus labios contra la cabeza de Susan y le tomo un rato el poder hablar.

"Susan..."

"¿uhum?"

"No quiero que te vayas"

"No me estoy yendo aun, acaso me ves con ganas de manejar de regreso a New York a esta hora de la madrugada?" Susan hizo una mueca y levanto el rostro para ver a Meryl, la rubia miro hacia abajo al hermoso rostro de su amiga y sonrió.

"no hablo de eso..."

"¿entonces?"

"Lo que quiero decir es que no quiero que te vayas, no quiero que me dejes, no quiero que termine"

Susan dejo de acariciar las costillas de Meryl con la yema de los dedos, dejo incluso de respirar, por un segundo creyó congelarse y le era complicado articular palabra, Susan miro hacia arriba una vez mas, sus hermosos ojos color café intensificaron su brillo mientras que sus labios rojizos dibujaron una sutil sonrisa que resalto sus hermosos pómulos rozagantes.

"Podrías repetirlo y explicarme a que exactamente te refieres?" su voz suave parecía de terciopelo como una suplica hacia su amante de no ser tomada como una tonta, ¿se estaría burlando de ella? ¿estaba entendiendo mal? Demasiadas interrogantes que quería asegurarse de que estaban en el mismo canal, hacia la misma dirección. Meryl resoplo y torció los ojos ligeramente pretendiendo estar disgustada por la cantidad de preguntas.

"Dime que sientes lo mismo" fue lo que respondió Meryl. Susan, no dijo nada, se incorporo sentándose en el el mismo lugar y mirando a Meryl ahora hacia abajo desde donde estaba sentada con su rodilla contra su pecho, pecho que aun estaba desnudo y resultaba un distractor para la actriz mas joven. Meryl arqueo la ceja y suspiro, estiro su mano y acaricio el brazo de Susan suavemente. "Sue, por favor" Meryl dijo suplicante y la actriz de enormes ojos cafés se encogió de hombros "no se que es lo que quieres que diga, Meryl, quizás si lo dijeras tu primero me seria mas fácil entender y quizás pueda decir o no decir lo que sea que quieres que diga" Susan dijo como si de un trabalenguas se tratase, Meryl levantó los hombros y los bajo rendida, sacudió la cabeza y se cruzo de brazos.

Susan ya sabia lo que Meryl quería, deseaba que Susan diera el primer paso pero si era sincera, estaba atemorizada de equivocarse, de ser como siempre la que sentía mas, la que entregaba mas, y no quería repetir sus mismos errores, y menos esta vez que era con alguien totalmente diferente a sus anteriores amores.