Making you better || Spongebob x Plankton【Plankbob】

【𝕊𝕖𝕔𝕣𝕖𝕥】

El conocido y tacaño jefe del popular restaurante se encontraba impaciente caminando rápidamente de un lado a otro. Ya hace más de veinte minutos que había mandado a sus empleados a buscar el mandado que les había dejado.

Para Don Cangrejo, esto era una tardanza terrible teniendo en cuenta lo importante que el decía que era dicho recado.

De pronto pudo oír como la campanilla de la puerta hacía su icónico sonido, al voltearse y ver a Bob Esponja y Calamardo entrar caminando de forma rápida con un paquete en los brazos del peliverde, por un lado su corazón se calmo bastante, pero por el otro frunció el ceño, preparándose para recibir malhumorado como siempre a los que él muchas veces veía como "sirvientes legales" por simplemente haberse tardado un poco.

- Donde rayos estaban! Les dije que fueran rápido! - regañaba con los puños en alto mientras se les acercaba - Qué no les dije que era importante!? -

- Eh! Si era tan importante porque no fue usted por el? - El peliverde le recriminó indignado y malhumorado por la mala forma en la que su jefe los recibió.

- Sí Don Cangrejo, Fuimos tan rápido como pudimos. - Agregó el rubio pero de una forma mucho más amigable.

- Bueno ya! Está bien! - Les dijo ya hastiado y ansioso el jefe de ambos mientras le quitaba el paquete al peliverde y lo abría con prisa.

- Ah! Aquí esta! - Don cangrejo sacó y alzó una gran botella con un líquido cristalino en su interior.

- Nos hizo tanto escándalo por una estúpida botella!? - le gritó molesto Calamardo al ver que era lo que el pelirrojo deseaba tanto que él y Bob le trajeran.

- Estupida? Para tu información, mi estimado calamar, esta es la especia principal de nada más y nada menos que la fórmula secreta de las cangreburgers! Y esta es una nueva y mejorada versión! - Le respondió con seguridad el pelirrojo.

- Ohh... - Al igual que con casi todo lo que relacionaba la susodicha hamburguesa, Bob veía con magia y gran valor lo que decía Don cangrejo, mientras que Calamardo se limitaba a refunfuñar y dejar su discusión hasta ahí.

- Bueno, debo guardar bien esto. Eso sería todo por hoy muchachos. - Dijo campante el jefe del restaurante a sus empleados mientras se daba la vuelta hacia su oficina.

- Al fin! - Decía el peliverde ansioso por irse a casa retirándose al lado de el rubio.

- Esperen chicos! Antes de que se me olvide. - Dijo rápido con una mano el la perilla de su oficina.

Bob lo miró curioso mientras que Calamardo volteó a verlo hastiado con el ceño fruncido.

 - Verán, se han fijado que ya no se ha visto a Plankton intentar alguno de sus planes ridículos para robar la fórmula? -

- Cómo si me importara eso... - Le respondió el peliverde con su tono desinteresado. Bob en cambio se encontraba en silencio algo cabizbajo.

- Pues eso es porque de seguro trama algo! Mantengan un ojo bien abierto entendido? - Dijo el pelirrojo apuntando a su ojo.

- S-Sí señor! - De repente Bob le respondió poniendo su mano en su frente como señal de haber entendido. 

- Muy bien, nos vemos mañana! - Dijo el jefe entrando y cerrando la puerta detrás suyo, mientras los empleados por fin salían del local.

...

- Oye, Esponja... va todo bien? Te veo menos fastidioso de lo normal. - Le preguntó Calamardo en las afueras de el local respecto a su actitud menos alegre.

- Oh! No es nada, solo ando un poco más cansado de lo normal, gracias por preocuparte Calamardo! - Dijo este alzando sus ánimos para que el peliverde le creyera.

Por el "mnn" que este soltó supo que lo había convencido sin problemas.

- Bueno, debo ir a sacar la basura rapido, nos vemos mañana Calamardo! - Le dijo para irse rápido a la parte trasera del restaurante mientras el peliverde se iba a su casa.

- ... Últimamente está más raro de lo normal... -.

...

Ya iba a pasar más de una semana desde que empezó con esto, y aunque no quería que "él" lo tomará por idiota, ahora que se le acercaba deseaba ayudarlo.

- Psss, Plankton! Estás ahí? - Llamaba susurrando a su "amigo".

- A la misma hora, en el mismo lugar! - Dijo el ya mencionado para salir de detrás de el contenedor de basura apoyando un codo sobre este con una actitud jovial.

- Fiu! Escucha, debemos hablar, Don cangrejo ya empieza a sospechar. - Decía el rubio con notoria seriedad.

- Ah, ya me lo esperaba. - Cruzó los brazos y cambió su actitud alegre a una amarga - Y solo de mi o de ti también? -.

- Por ahora sólo te mencionó, y no me ha visto mal ni nada. -

- Oh bueno, entonces aun no tenemos moros en la costa! - Le respondió despreocupado.

- Seguro que- -.

- Claro que si! Tu descuida y sigue feliz. - Le dijo al rubio interrumpiendolo con una mano en el pecho a modo de juramento.

- Bueno, pero es que... no puedo evitarlo, no me gustaría que ahora que estamos juntos pase algo malo de nuevo, o incluso grave... no quiero que estes solo otra vez. - Le decía Bob apoyándose en el muro y poniéndose triste a causa de todas las malas posibilidades de que pasaría si los descubren. 

Plankton ni bien notó eso se le acercó con una expresión de preocupación y pena.

- ... Oh vamos, sabes que odio verte triste, no se ve bien en una cara tan linda como la tuya. - Le dijo acariciando su rostro con una mano y limpiando una pequeña lágrima que le salía con el pulgar de la otra. - Y... verte a si me pone mal a mi también -.

Con ambas manos en su rostro, el parcheado se puso de puntillas y empezó a besarlo, el rubio se sobresaltó un segundo para después poner sus manos en su cintura y empezar a seguirle la corriente, aunque él sentía bonito ese momento, pudo sentir como algo mojado y movidizo empezaba a intentar meterse en su boca.

Por más que Plankton lo intentara, el rubio se aseguraba de mantener los labios bien cerrados y pegados a los de su "pareja" para que esta no intentase introducirle la lengua en la boca y así volver obsceno el corto momento que ambos se permitían diariamente

Más que desagradarle, Bob soltaba risitas a causa de las cosquillas que le causaba en sus labios las lámidas del más bajo.

- Oh por favor! Nisiquiera puedo tener un poco de "afecto sucio"? - Decía frustrado el pequeño hombre con parche.

- Buajaja! Lo siento mucho - Decía Bob mirándolo con ternura - Pero siempre te me haces muy lindo sin importar que -.

Plankton decidió de mala gana resignarse de una vez a los tontos mimos de Esponja, aunque claro, como simplemente no se desprendía de sus abrazos y por sus sonrojos quien niega que en el fondo le gustarán, aun a pesar de lo que tramaba.

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Qué les puedo decir? Los shipps feos entre protas y antagonistas son mi especialidad(? Jsjsjs.