Conversación entre los de Resident Evil.

Un nuevo comienzo. (Final)

Pasaron unos cuantos días y por fin llegó la boda.

Chris y Piers estaban vueltos locos con los últimos preparativos y más porque la boda sería en la playa.

Wesker ayudaba a Chris con su traje y a quitarle los nervios, mientras Jake ayudaba a Piers en lo mismo. Las chicas se arreglaban, mientras Leon, solo veía pasar de un lado a otro a todo mundo.

……….

Chris llamó a Piers.

-Hola, mi amor - dijo Piers aguantando los nervios - ¿Que sucede?

-Solo quería saber si ¿ ya vas para la playa?

-Sí, ya casi. ¿Ya está todo?

-Sí, todo está listo mi amor.

-Entonces nos vemos ahí.

……….

Chris llegó a la playa y verifico que todo estuviera en su lugar antes de irse a su cuarto a cambiar.
Llegó al cuarto, sacó su traje y sonrió. No podía creer que se casaría con la persona más maravillosa en este mundo. Se quitó la ropa y se puso su esmoquin blanco, se colocó la flor rosa en la solapa y sé miró al espejo.

-Que guapo te ves de blanco- dijo Jill entrando.

-Jill me asustaste.

-Lo siento, de verdad me siento feliz por ti.

-Gracias Jill.

La rubia se acercó a él y le acomodó la flor.

-¿Qué harías sin mi?

-Nunca te vayas.

……….

Piers entró al cuarto y contempló el traje que le esperaba colgado. No podía creer que se casaría con la persona que más admiraba, con el gran capitán, con el amor de su vida.
Sonrió y comenzó a colocarse el esmoquin, el símbolo de una nueva etapa en su vida.

Se vio en el espejo.

-Si que te va bien el blanco.

Piers volteó y vio a Jake que entraba al cuarto.

-Gracias.

Jake se acercó a él y le colocó la flor rosa en la solapa.

-Te queda de maravilla.

-Gracias por estar aquí, me muero de los nervios.

-Lo sabía, por eso vine.

-Gracias.

……….

El momento se acercaba y ambos estaban muriendose de los nervios. Los invitados seguían llegando, solo faltaba pocos minutos para que la ceremonia empezará.

Chris fue el primero en salir, después fue turno de Piers.

Ambos al verse sonrieron, tuvieron que contener las insensatas ganas de abrazarse y besarse, ya tendrían tiempo para eso.

Los dos estaban parados frente al otro, en un arco hecho de madera y flores, con una hermosa vista al mar cristalino y con un cielo apunto de atardecer.

Comenzó la ceremonia. El juez habló hasta llegar a las palabras más esperadas por estos dos enamorados.

-Piers Nivans, ¿acepta por esposo a Chris Redfield?

-Aceptó - dijo Piers con una sonrisa de oreja a oreja.

-Chris Redfiel, ¿acepta por esposo a Piers Nivans?