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Algún día voy a escribir mejor lo prometo.

El rubio terminó de subir las últimas escaleras intentando huir de los gritos del primer piso.

La alarma empezó a sonar aún más fuerte mientras una voz dirigía a todos los estudiantes para lograr salir de la escuela. A todos menos él.

Releyó el mensaje mientras sentía su cuerpo temblar ante el frío de la azotea.

000-000

Sube a la azotea cuando la alarma suene.

Tienes tres minutos.

Pudo sentir su celular vibrar y camino hacia la esquina.

000-000

Una vida por otra ¿eh?

Salta para que uno de ellos vivan.

Felix no quería saltar y nadie lo obligaría. Porque era un juego absurdo.

No porque los rumores decían que otros hayan desaparecido en otra versión significaba que ellos correrían el mismo destino.

—Si no saltó nada pasara.

—Si no saltas Seungmin tendrá que apretar el gatillo con sus lindos deditos.

El susto lo hizo acercarse sin querer a la esquina. Giro su cuerpo dándole la espalda al final del edificio y observó con sorpresa como Seungmin se acercaba temblando con una pistola en su cabeza.

El arma rosa destacaba en su cabello castaño. Y su mano se veía enfermizamente pálida.

El chico que había hablado estaba afirmando a Seungmin con una mano en su cintura. Sintió el vomito subir por su garganta y tragó sin dejar que este saliera de su boca.

—Es tu decisión.— El chico ahora movía su mano suavemente por la mejilla de Seungmin. Y este parecía acostumbrarse a su tacto.— Pero no creo que quieras ver la sangre de tu hermoso amigo derramada.

—Y claro.— en ningún momento dejó de acariciar al contrario y quizo correr y separarlo.—Si Seungmin decidiera tirar del gatillo primero, el siguiente con una bala serías tú.

La risa y el grito que soltó el de máscara lo asustó y miro con lágrimas en los ojos a Seungmin.

Su cabello estaba desordenado y una tela en su boca le prohibía hablar. Se preguntó qué había pasado cuando dejó corriendo la sala.

Miro como los ojos le rogaban que saltara y subió con miedo al borde del edificio.

Intento sonreírle para calmarlo.

Su celular empezó una cuenta regresiva y quizo llorar del susto.

Estaba parado y sin saber que hacer.

Si saltaba lo más probable era que muriera pero si no lo hacía su Minnie moriría. Uno de sus más preciados amigos moriría por su culpa.

Panic roomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora