Introducción

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Lentamente, el rey cerró los ojos mientras echaba hacia atrás la cabeza y la reposaba en el asiento. Permaneció en silencio, concentrado en seguir los pasos de la guardia real que resonaban tras las puertas que conducían al salón del trono. Cuatro pasos a la izquierda mientras, al unísono, otros cuatro pasos se oían hacia la derecha. Y luego lo mismo, pero en sentido opuesto esta vez. Era como si siguiesen el ritmo de la batuta de un director de orquesta, acompasado y disciplinado, sin errores.

Lanzó un suspiro de agotamiento mientras volvía a abrir los ojos. En los ultimos tiempos le era imposible encontrar el sosiego necesario para descansar. No ahora que Ekoda conocía la desesperación y el terror.

Una terrible sequía, mayor que ninguna que se pudiera recordar, asolaba el reino trayendo el hambre y la miseria a muchos. Pero eso no era lo peor. Los pocos campesinos que no les afectaba demasiado la incidente sequía les era dificil conservar sus cosechas mucho tiempo, porque durante las noches de luna llena, éstas eran devoradas por criaturas monstruosas, desconocidas hasta entonces que aparecieron de pronto de la nada como si alguien o algo las hubiese invocado desde las más oscuras pesadillas imaginables.

Levantándose del trono en el que se hallaba sentado, el anciano monarca se acercó al balcón abierto y dejó que el aire cargado y caliente le diese en el rostro como una bofetada desafiante. En su reino siempre había intentado que todo fuera paz y felicidad para sus habitantes, sabiendo gobernarlos con sabiduría y justicia. No es que se considerase mejor que sus antepasados, pero al menos en sus 50 años de gobierno nunca había enfrentado una crisis como aquella. Estaba desorientado. Los días felices parecían cosa del pasado.

Sus ojos se dirigieron hacia el sur, hacia el lugar del que al parecer provenían todas sus desdichas.

En aquel lugar, un valle permanecía inhabitado, los lugareños lo conocían con el nombre de "Valle de la Niebla ", debido a que una niebla como nunca se había visto lo cubría eternamente. Cuando los monstruos y la sequía empezaron a atacar, este valle fue el único que no resulto perjudicado, y la niebla, permanente pero nítida hasta ese momento se volvió cada vez más espesa de modo que era imposible orientarse por aquellos parajes y mucho menos saber qué te rodeaba.

Un campesino, cuyas tierras se habían echado a perder, pasó en una ocasión por aquel lugar sin atreverse a penetrar demasiado, ya que la superstición que lo marcaba era bien conocida por todos. Mientras bordeaba la frontera, con las pocas pertenencias que le quedaban, vio que un grupo de criaturas parecidas a dragones se acercaban a donde él estaba. Rápidamente se ocultó tras unas rocas al otro lado del camino, pudiendo observar que los seres se dirigían hasta el valle, penetrando en el y desapareciendo entre la niebla. Asombrado por su descubrimiento, corrió a transmitírselo al rey.

El rey recordó como se había alegrado al conocer la fuente de origen de todos sus males, pues en los últimos meses había recibido muchas suplicas de su pueblo para que se hiciera algo al respecto, cosa que había sido materialmente imposible ya que al desconocer el origen de tales criaturas, y dónde iban a atacar, dificultaba el plantarles cara directamente.

Pero sabiendo dónde se las podía encontrar, era más fácil presentar batalla. Había enviado a sus más bravos soldados a enfrentarse con los monstruos, pero ninguno los había vencido. Decidió proclamar por todo el reino un bando real en el cual se decía que una magnifica recompensa esperaba al valiente que se adentrara en el valle y descubriera sus secretos. Muchos animados por el premio lo intentaron, pero no se volvió a saber de ellos. Se temía que malignos hechizos los hubiesen hecho desaparecer para siempre de este mundo.

Así, el misterio que rodeaba al valle siguió sin ser desvelado, pues cada vez menos aventureros se animaban a intentarlo, y el rey dudaba ya que nadie quisiera realizar tamaña hazaña... ¿o sí habría alguien?

La Leyenda Del Monte Del Guerrero(en reedición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora