Love has no limits

El amor también tiene un poco de Drama

Algo que nunca serían capaces de olvidar, aquel recuerdo de esa mañana, que al parecer, no era tan soleada como antes.. 

Era el último día, un último día el cual tenían que despedirse por primera vez.  

Ya no sería de esos ''Te veo luego..'' o ''No vemos mañana..'' No. Ahora sería demasiado diferente para ellos dos.. 

 

-¿Estas listo? - Preguntó la madre de Luhan a su hijo, con un tono de preocupación. - Nos iremos en casi una hora.. - Finalizó, acariciando con timidez el cabello de este para desordenarlo un poco, Luego de eso se retiró del lugar.  

Minseok había acompañado a Luhan el día anterior, quedándose a dormir en su casa hasta que se fuera en el avión, pero ambos no querían pensar aun en esa parte.  

En esos momentos Minseok se encontraba en la habitación de Luhan, enrollado en las sabanas de este. Aún estaba dormido, y Luhan no quería despertarlo, aunque debía hacerlo, por orden de sus madres.  

Al cabo de unos cuantos minutos tendrían que irse para el aeropuerto, pero Luhan quería observar con más detenimiento la cara de Minseok, para así recordarla siempre que pensara en él mientras estaba en China.  

-Minseokkie~ - Habló con dulzura el mayor, susurrándole al oído a un Minseok dormido. Por supuesto, Minseok murmuró para que lo dejaran dormir, pero como si volviera a la realidad, abrió los ojos de repente, asustando a Luhan enseguida. Minseok había recordado que ese mismo día.. Luhan volvía a China.  

-Luhan..- Dijo entrecortadamente, abalanzándose al cuerpo de este en cuanto pudo levantarse. Luhan solo sonrió con una sonrisa de tristeza, correspondiéndole al abrazo enseguida. 

-Me iré en una hora..- Susurró, cogiendo entre sus manos el rostro de Minseok con delicadeza 

-No quiero que te vayas.. Por favor No lo hagas, no te vayas. - Suplicó. Luhan estaba derrotado, Luhan estaba mal de ver así a la persona que quería. Luhan quería quedarse y estar con Minseok hasta quien sabe cuando, para poder besarlo y mirarlo todas las veces que quisiera. Para decirle cuanto lo ama más de una vez al día, y más de millones de veces en una semana.  

-Lo siento..- Una lágrima recorrió el rostro de Luhan, acompañada con las de Minseok.  

-¡Chicos! Bajen las maletas, tenemos que estar a tiempo en el aeropuerto. - Gritó la madre de Luhan desde las escaleras. 

Minseok se levantó de la cama y secó sus lágrimas rápidamente con la manga de su camisa 

-Voy a cambiarme - Dijo, como si pidiera permiso a que Luhan le dejara a solas un momento. Luhan reaccionó enseguida y nervioso también secó sus lágrimas. Miró unos segundos a Minseok y dio un beso corto en su frente, para luego separarse. 

-Yo bajaré las maletas..- murmuró, esperando a que Minseok no escuchara, no quería hacerle más daño, ni tampoco que llorara más. Cogió las maletas y se dirigió a la puerta, cerrándola por él.  

En cuanto Luhan salió del cuarto, Minseok se sentó en la punta de la cama, esta vez sin retener las lágrimas. Realmente le dolía, Estaba mal. El solo pensamiento de dejar a su mejor amigo y primer amor luego de casi quince años.. Le dolía, y demasiado.  

No sabia como se sentía Luhan respecto a esa situación, pero viéndolo casi igual que él, sabía que también le dolía. Después de todo ambos se querían más que unos simple amigos, y al parecer su amor era más fuerte en esos momentos que en cualquier otro.