Por fin el día viernes se hacía presente, lo que Yeosang tanto esperaba finalmente se cumplía. Aquel chico con aroma a coco se encontraba actualmente cursando el último año de secundaria; y a pesar de ser el mejor estudiante de su clase –y tal vez uno de los mejores en toda su escuela–, a él se le hacía muy difícil obtener la calificación perfecta en todas sus asignaturas, sin embargo no podía quejarse. Yeosang estaba totalmente consciente de que tras tantos años dando lo mejor de sí mismo en la escuela, lograría graduarse, y después de eso, por fin podría entrar a su universidad soñada.
No tenía distracciones, solamente intercambiaba algunas palabras con sus compañeros de curso, y jamás había intercambiado palabras con un o una alfa de su edad, eso lo liberaba del riesgo de formar un lazo repentino. Aunque... algo que solía hacer de vez en cuando, era acompañar a algunos de sus compañeros de clase a ver a los alfas que asistían a la escuela que se encontraba al lado del establecimiento al que pertenecían. Le causaba gracia lo nerviosos que se ponían sus compañeros.
Kang asistía a una escuela únicamente para omegas, y al lado yacía una escuela solamente para alfas. También lo entretenía observar cómo sus compañeros omegas se mostraban tan interesados en ver a los alfas. El chico a veces pensaba en que quizás era anormal no tener interés por alfas a la edad de diecisiete –casi dieciocho– años, excepto en su celo de unos quince minutos, ya que por suerte tenía el privilegio de poder usar supresores siempre que se le antojara debido a la situación económica de su familia.
Volviendo al tema central, jamás ha hablado con un alfa, a excepción de su madre. El omega tenía una buena relación con sus padres... más bien, madres. Eran una pequeña familia, solamente las dos mujeres y su hijo, Yeosang no solía ver de forma seguida a sus primos, ni tíos, ni a su hermana. La hermana mayor de Yeosang se había mudado desde hace un considerable tiempo, y ahora vivía lejos, sin embargo eso no impedía que ambos mantuviesen una relación familiar estrecha, se escribían cartas el uno al otro de manera constante.
En resumen, Yeosang era un chico bastante solitario, tanto su madre alfa como su madre omega trabajaban, sin embargo no le afectaba ya que sabía disfrutar de su soledad y transformarlo en algo positivo, como ahora. Camino a su hogar se encontraba un bello parque de cerezos, el omega siempre pasaba por ahí, y que el lugar transmitía serenidad y el lindo paisaje lo relajaba, mientras se acompañaba a sí mismo.
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⩩✦ world of love ♥︎ [pausada]
Fanfiction˖˚ 𖠿 ‣ 𖥻 ִ ۫ ּ 🎀ִ ❚❙❘❙❙❚❙❘❙❘❙❙❚❙❘ 𖧧 ָ࣪ ˖ ָ࣪ 𖤐 🧠 ˖˙yeosang jamás se mostró interesado en hablar con un alfa, pero siempre hay una primera vez para todo, ¿no? ˖˚ 𖠿 ‣ y seonghwa nunca imaginó que sería tan difícil olvidar el ro...