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la clase de deportes no era específicamente la clase que más le gustaba a yoongi. es más, podía decir que hasta la odiaba, pues él no era precisamente un chico atlético y las calificaciones que solía tener siempre eran bastante bajas en comparación al resto. arruinaban su boleta de calificaciones.

hoseok podía ver la molestia en su rostro incluso de reojo. apostaba a que, como se encontraban en aquella clase, era la razón por la cual yoongi se había marginado en una esquina sin ganas de participar ni de moverse.

a hoseok le gustaba que el muchacho se viera como si fuera a explotar de la felicidad, pero yoongi no solía mostrarse así muchas veces. eran contadas con los dedos las oportunidades que hoseok le había visto de aquella manera. yoongi siempre se mantenía indiferente a todo, como si todo le diera igual.

¿como se había enamorado de él, entonces? hoseok no tenía ni la más mínima idea. quizás, fue cuando le vió sonreír por primera vez; una oportunidad donde seokjin tropezó a mitad del patio mientras perseguía a jungkook que se negaba a entregarle su bolso. quizás fue su voz. quizás fue la elegancia en sus movimientos. quizás fue su inteligencia.

hoseok no lo sabe realmente, y no es como si estuviera desesperado por encontrar una respuesta, él se había enamorado de min yoongi y ya. no había mayor lógica que esa. para él, las cosas simplemente eran de aquella manera y punto, no se debatía más.

bien, él se sentía como si su deber ahora fuera hacerlo reír o al menos sacarle una sonrisa, pero aún era difícil para él acercarse sin alguien trás suyo como un acompañamiento moral, ¿qué pasaría si yoongi no lo quiere allí? lo que menos deseaba era molestarlo.

—hey, hoseok, mira. ¡soy más flexible que antes! —hyerin llegó a su lado, dando suaves golpecitos en su brazo izquierdo y una vez obtuvo su atención separó sus piernas hasta casi tocar el suelo—. la academia de baile realmente sirve.

—por supuesto que sirve, yo también soy más flexible que antes.

—intenta hacerlo tú. a ver si me superas.

—no... ahora no. quizás otro día.

—no te recordaba tan cobarde, hoseok... anda, solo es un intento. —hoseok tragó con dificultad, suspirando pesado. bien, podía intentarlo para satisfacer la curiosidad de su mejor amiga.

—bien, pero solo una vez. —y separó sus piernas, llegando lo más abajo que podía. los pantalones apretaban demasiado sus piernas, no podía bajar de todo, pero intentándolo, ocurrió lo inevitable; sus pantalones sucumbieron a la presión y se rompieron por debajo, provocando que el chico se levantara en un abrir y cerrar de ojos con las carcajadas de la chica en el ambiente—. ¡se rompió mi pantalón!

y la mayoría volteó a ver con el escándalo. hyerin no dejaba de reír y él solo se sonrojaba aún más. incluso yoongi, ahora, con su desgracia reía.

su sonrisa se robó otro pedacito de su agitado corazón.









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❝ gummy smile. ❞ « hopega» [mini fic] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora