Apego || [ʜᴏᴘᴇᴍɪɴ]

03

─JiMin, ¿qué diablos te pasa?

JiMin miró a TaeHyung con una mirada impasible mientras le metía un palito de helado a SunHee en la boquita. La hija de Jin se había enfermado en los últimos días debido a la ola de frío que azotaba la ciudad, y no era la única: ese día, JiMin tenía su agenda llena, por lo menos durante una semana más.

No le importaba demasiado, porque JiMin amaba a los niños.

Siempre había querido un niño dentro de su familia, y el sueño de adoptar uno seguía ahí metido en su cabeza, a pesar de la inestabilidad con HoSeok.

Inestabilidad. Como si fuera eso. Como si estuvieran pasando un mal momento y no le hubiera pedido el divorcio oficialmente tres días atrás.

En esos tres días, JiMin no había tenido noticias de su, todavía marido, pero no lo iba a llamar para presionarlo.

JiMin conocía a HoSeok lo suficiente como para saber qué decisión iba a tomar finalmente.

─Tose, cariño. ─le pidió dulcemente a SunHee, que obedeció.

La hija de SeokJin, que había sido producto de su exnovia Irene, era un encanto con todo el mundo. Era educada, bonita y tierna, criada por sus dos padres, a pesar de que no estuvieran juntos, ya que todavía conservaban una gran amistad aún cuando habían sido novios en el pasado.

Irene no tenía problemas en que SunHee pasara semanas completas con su padre, pues tenía un trabajo pesado como gerente de una empresa de moda y solía viajar durante largos períodos de tiempo. Sin embargo, no era una madre ausente como muchos solían pensar. Llamaba a SunHee cada noche preguntando como le fue en el día, y cuando Irene estaba en casa, le ponía total atención a su hija. Además, conocía a TaeHyung, la actual pareja de SeokJin, y no ponía reparos en que TaeHyung fuera como un segundo padre para SunHee.

─Has estado comiendo helado a escondidas de tu tío Tae, ¿no es así enojona? ─se burló dulcemente de la pequeña, que enrojeció por la culpa y la vergüenza.

─No me cambies el tema. ─reclamó TaeHyung detrás de él ─JiMin, demonios ¿cómo se te ocurre...? ¡HoSeok no se merece ninguna oportunidad! ¡Te engañó con su asistente!

El breve recuerdo de ver a HoSeok tomándole la mano a JungKook en su oficina, hablándole al oído mientras provocaba que se riera, causó una punzada de dolor en su corazón, pero fingió una indiferencia que no sentía para que TaeHyung no siguiera retándolo.

JiMin nunca se había considerado a sí mismo como una persona celosa, no así como HoSeok. Mientras HoSeok era todo posesividad y gruñidos, JiMin era calma y silencio, porque HoSeok nunca le había dado motivos para dudar de él en esos ocho años que estuvieron juntos.

No hasta ahora.

─Bronquitis aguda. ─le dijo a TaeHyung ─, sólo descanso, mucho líquido y acetaminofén para bajar la fiebre.

TaeHyung murmuró por lo bajo mientras comenzaba a abrigar a SunHee.

─Deberías firmar esos tontos papeles. ─le regañó TaeHyung ─, y deshacerte de él. Le pides la casa, dinero y lo mandas al diablo.

─TaeHyung. ─dijo JiMin con la voz seca ─, sigue siendo mi marido y el hombre que amo. Tú no lo entiendes, así que te lo diré de una forma fácil: HoSeok me sigue amando, lo sé, sólo tiene que darse cuenta de eso y lo ayudaré para que luego no se arrepienta por haberse divorciado.

─¿Arrepentirse? ─farfulló TaeHyung con rabia teñiendo su voz ─. ¿Cuándo Jung HoSeok se ha arrepentido de algo?

Nunca. HoSeok era una persona que pensaba bien las cosas antes de hacer algo. Si le estaba pidiendo el divorcio, no era una decisión apresurada, sino porque tuvo que pasar semanas pensando si era lo correcto o no.