On my way / DekuBowl

Corazón roto / TodoDeku

Disclaimer: Los personajes de Boku No Hero Academia// My Hero Academia no me pertenecen, le pertenecen a Kohei Horikoshi

Advertencia; Posibles faltas ortográficas, posibilidad de que los personajes se salgan de su personalidad, contenido yaoi (chicoxchico)

Shipp; TodoDeku 

Aclaraciones; Narración en primera persona y siguiendo a Izuku.

Tipo; Drabble.

Próxima pareja; (Comenta aquí una pareja del DekuBowl para escribir próximamente)

Desde que decidió estudiar medicina con rama de rehabilitación, con especialidad en los pacientes de la extraña enfermedad del Corazón Roto, supo que iba a tener que acostumbrarse a ver el dolor del ser humano, en uno de sus mayores estados de pureza.

En un mundo donde es extraño enamorarse, y el corazón humano es más débil ante las emociones fuertes, el estar enamorado y ser rechazado de manera cruel, genera en las personas, el Corazón Roto, donde el órgano que es de vital importancia para el cuerpo, se debilita al grado de apenas soportar su única función, bobear sangre. Los síntomas después pueden ir variando, desde presentar fallas a lo largo de los órganos cercanos al corazón, hasta caer en coma por la sobrecarga del cuerpo para sus principales funciones.

Por otro lado, las formas de recuperarse variaban en base a los síntomas. Si entrabas en coma se intentaba operar el corazón para que de esa manera pudieran asegurar que el individuo sobreviviera, y así con las diferentes variantes de la extraña enfermedad.

Su madre había fallecido a causa del Corazón Roto, tras su padre que los abandono por enamorarse de otro hombre. No lo culpa, al menos encontró el amor que tanto buscan muchos.

Aunque acabó en un orfanato con cinco años, siendo adoptado a los nueve por un hombre que en verdad era primerizo en lo que era la paternidad, pero que siempre lo quiso como si fuera propio. Aunque siempre le estaría agradecido a Toshinori, su padre por cuidarlo y amarlo siempre, y claro a su abuelo Sorahiko, quien a pesar de los golpes en la cabeza, siempre busco ayudarlo de todas las maneras posibles.

Y llegamos aquí, con su pequeña tablet con el nombre del paciente que le esperaba, Shouto Todoroki, rechazado por la chica que amaba desde de la infancia. Salido recientemente de una operación de corazón que lo dejo en coma cerca de tres semanas, la falla de su corazón impidió que la sangre llegara de manera correcta a sus brazos y piernas, teniendo que recurrir a rehabilitación para ayudarlo.

Golpeo con suavidad la puerta, recibiendo un quejido desde adentro, tomo aquello como la afirmación para ingresar.

--Buenos días --Saludó con una sonrisa, mientras dejaba la pequeña tablet sobre el mueble donde se encontraba lo que creía que era el celular del chico.

--¿Qué tienen de buenos? --El tono de su voz era amargado y desgastado, cuanta maldad había que tener para saber lo que el rechazo mal-intencionado podía provocar y aun así hacerlo.

--Tienen de buenos que usted se encuentra vivo --Revisó la presión arterial con el Esfigmomanómetro de aire.

--La vida es una mierda.

--¿Por qué es una mierda? --Preguntó divertido mientras anotaba la presión del chico, parándose para tomar revisar las bolsas de vitaminas y sangre.

--Sólo es una mierda...

--¿Tienes hermanos? --Preguntó cambiando el tema de conversación.

--Si.

--¿Cuantos tiene? ¿Son mayores o menores?

--Dos, ambos mayores.

--¿Y hermanas?

--Una e igual es mayor.

--Así que eres el menor de los hermanos --Dijo para sí mismo-- ¿No te habrán tenido de esclavo, verdad? --Aunque hablaba de manera divertida seguía haciendo su trabajo, tenía que revisar bien cada detalle para informar a su familia como iba a proceder en la rehabilitación.

--¿Esclavo?

--Si, ya sabes, te mandan a hacer todo lo que ellos no quieren hacer --Explicó de manera breve, tocando los brazos del chico, intentando prever si requeriría alguna operación futura, o simplemente sería rehabilitación emocional y física.

--No, creo --Murmuró, mirando a un punto fijo, como si intentara recordar.

--¿Seguro?

--No --Negó de inmediato-- Mi hermano Natsuo siempre me tenía yendo de aquí a haya, llevándole cosas, o haciendo algo que pedía. 

--Entonces fuiste otra victima de los hermanos mayores --Colocó su mano derecha sobre donde se encontraba el corazón-- Otro soldado caído --Su rostro parecía poseído por un dolor exagerado, y su voz parecía triste, y apagada. Aunque fueron bien fingidos, porque aquel chico de cabellos bicolores, estaba riéndose. 

Y eso sólo alegraba su corazón, porque había alegrado a un corazón tan inocente, que no fue responsable de enamorarse de una persona equivocada.

--Te tengo buenas noticias --Dijo después de que el chico calmara su risa-- No necesitas que amputen tu extremidades --Le informó con una sonrisa-- Por ahora tendrás que hacer rehabilitación emocional y física en mi área, así que espero que no te caiga mal --Le aviso con diversión impregnada en su tranquila voz-- porque tendrás que verme seguido a partir de ahora.

--¡Genial! --Soltó con sarcasmo claramente fingido-- ¡Me ha tocado un loco para que me ayude a mejorarme! No tengo suerte.

--Nop, no la tienes, así que espero que te acostumbres a verme --Tomó de nueva cuenta la tablet y escribió un par de cosas de manera rápida.

--No creo poder acostumbrarme de usted Doc.

--No se preocupe paciente, se acabara acostumbrando.

Y con una sonrisa y unos adiós, Midoriya acabo por irse a hablar con los familiares de su nuevo paciente.