M-I-O

fin de semana

Narra yo
Al día siguiente el primero en despertar fue Minos quien se quedo mirando a su rosa y las marcas que había dejado en su cuerpo, lo miraba como si fuera la mas grande obra creada por los dioses aunque para el si lo era.
Minos se levanto dejando a su rosa descansar mientras se iba a preparar el desayuno para ambos, algo simple una taza de café y unas tostadas de manteca con miel, mientras terminaba de preparar el desayuno decidió buscar en internet las rutas más cortas para nos tardar en llegar aún que necesitaría la ayuda de Albafica  para llegar a la  casa se padre, ver a su suegro el cual apenas conocía y el cual al enterarse de la relación que tenia con su "pececito" como le había apodado su padre lo amenazo de todas la formas habidas y por haber por el teléfono cada vez que hablaban, ya estaba pensando que su suegro lo odiaba y nisiquiera lo había visto en persona,  si que se tendría que esforzar mucho por ganarse su confianza y su aprobación, al fin y al cabo era el padre de su hermosa rosa.
Dejando los pensamientos de lado tomo la bandeja y la llevo a la habitación dejándola cuidadosamente en la mesita de luz que estaba en la esquina de la cama para despertar al bello durmiente con unos besos en la boca quien correspondía gustosamente disfrutando el trato que le daba su pareja
Minos: arriba el desayuno ya está - colocando la bandeja sobre su regazo y sentarse en el borde de la cama así podrían desayunar juntos
Alba: buenos días Minos gracias por el desayuno - dándole un beso en la mejilla para luego parte una mordida a la tostada-
Minos: buenos días ya estuve averiguando los caminos más cortos que podríamos tomar tardaríamos como 3 horas llegar más o menos creo
Alba: de acuerdo. Que hora es?
Minos: las 10 de la mañana
Alba: salimos a las 11 o al medio día
Minos: al mediodía
Alba: comemos algo antes de partir ?
Minos: yo solo te quiero comerte
Alba:- se atraganta con el café - cof cof MINOS  - le pega con la almuhada-
Minos: jaja ya no es para tanto -dijo entre risas-
Alba: idiota -sonrojado mientras come una tostada-
Minos: -le roba la tostada y el se la come-
Alba:- hey eso era mio
Minos: era -dijo remarcando sus palabras-
Alba:  hum - terminaron de comer-
Minos: deberiamos bañarnos -lo mira con una sonrisa lobuna-
Alba: no me bañare contigo -dijo mientras se levantava pero cayo de nuevi en la cama- esto es culpa tuya
Minos: mia y quien fue el que tenia puesto un traje rebelador y pedia por mas?
Alba: callate y ayudame
Minos:  -se hacerco y lo levanto llevando al baño- sigues dicuendo que no nos bañaremos juntos?
Alba: -sonrojado- callate
Al final si se bañaron juntos y  Minos tubo que ayudar a Albafica, asi que decidio a provechar eso
Alba: que demonios crees que haces -dijo cuando su novio los invobilizo contra la pared, mordiendo su hombro y abriendo sus piernas-
Minos: jaja eres hermoso- dijo para callarlo con un beso-
Albafica solto un gemido ahogado, sintió que su corazón latía más rápido, el calor de Minos pasó por sus manos y penetró el alma.
Con los dedos de su mano derecha, Minos comenzó a jugar con su pelo , y luego puso la otra mano detrás de la espalda, inclinando la cabeza hacia la oreja.
-Albafica ...-
Besó su cuello y Albafica se estremeció al sentir sus labios en su piel.
Minos lo dejó poco después y se miraron intensamente en silencio y luego volvieron a besarse con gran pasión.
Lo empujó contra la pared y lentamente  los labios de Minos comenzaron a sondear la piel desnuda de su compañero con besos, mientras Albafica gimió por el placer que esos besos le causaron y este se mordió los labios, entusiasmado por el placer del contacto con la piel.
Cada gesto de Minos logró volverlo loco.
Sus lenguas entrelazadas hicieron que el Albafica se sintiera único, una sensación que nunca había sentido antes de ese momento mágico.
Minos agarró las piernas del menor y su miembro estaba derecho entre sus piernas, pero solo cuando sus ojos se encontraron, comenzó su embestida.
Albafica gritó de placer y ahora era prisionero del mayor, y mientras continuaba penetrando, sus labios se cruzaron en un beso largo y apasionado.
Ambos se complacieron
Los dos miraron sin aliento, luego se abrazaron.
Minos: creo que debemos bañarnos de nuevo -menviono separandose un poco- no crees
Alba: s-si pero sin juego esta vez - dijo para besarlo y luego bañarse-
Ya una vez bañados, vestidos y listo todo Minos comoco las cosas en el auto para su viaje y tal vez su centencia de muerte