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Capítulo 9: A salvo

Sentía un sudor frío Por mi espalda y frente.

Me acomodé como pude en la cama pero fue en vano, no podía dormir pero tampoco Queria despertar, me acurruque en la cama me desenvolví entera pero nada,el sudor frío seguía allí.

Me levanté tocando mi frente y caminé al baño sin abrir los ojos, me dolía la cabeza.

Encendí la luz, mojé mi cara y me vi al espejo. Tenia ojeras, y me costaba ver.

«Sammy» se oyeron como niños corriendo por la casa

Voltee pero nada, todo estaba a oscuras, ahora no me importaba nada mas que el molesto dolor de cabeza.

Observe por la ventana. Había parado de llover.

La cabeza me comenzó a palpitar, como si fuera a explotar.

Me aferré a la pared helada y recosté el cuerpo en ella. Era calmante, pero de un momento a otro esta también se volvió cálida y terminó su utilidad.

«Sammy»

Las voces me agobiaron, apretándome el pecho.

Esta bien, igual me importan poco...

Una risa seca  me consumió por completo. Dejé de sentir mi cuerpo.

... Emm, creo que igual me importa.

Salí del baño como pude sujetándome de todo lo que tenía a mi paso.

Todo se volvió oscuro y borroso. Ahora tenia que bajar las escaleras y me siento terriblemente mareada. Apoyé el pie en el primer escalón, el siguiente se veía distante.

Paré cuando vi un rostro. Pero no estaba allí... Era... Yo, de niña, estaba aterrada a punto de llorar. Pestañee borrando la imagen de mi cabeza.

La oscuridad me abrazaba y las risas me hicieron entrar en pánico, corrí escaleras abajo, sin dudarlo-Ni pensarlo- abrí la puerta de entrada.

Tenia un revoltijo en mi cabeza, palabras mezcladas, risas, la muñeca... Todo acumulado aunque algunas no tenían sentido.

Caminé hacia la puerta, al tomarla del pomo sentí vértigo, cosa que hizo que la soltara de inmediato.

Respiré hondo y lo volví a intentar sin tomar en cuenta el mareo que me produjo. La noche era brillante y el suelo estaba perlado con las ultimas gotas de lluvia.

Corrí, como pude, hacia cualquier dirección, me apoye en varios arboles Hasta llegar a algún lugar que tuviera luz.

Me percaté que tenia el cabello empapado, estaba lloviendo!

El agua era helada y me calmó por unos segundos...

«Sammy»

Un grito se escapó de mis labios. No supe donde apoye el pie, estaba helado y mojado, resfalé y por poco la cabeza se me va contra el suelo si no es por mis manos.

Con el rabilo del ojo pude ver dos luces acercándose apresuradamente hacia mi.

Traté de ver que era pero con solo mirarlas directamente me encandilaron...

¿Qué es eso?

Las luces se desviaron violentamente, tanto que llegó a chirriar...

Un leve sonido llamo mi atención... Como si cerraran algo.

Alze la vista y vi una silueta negra. La miré, su boca-o lo que parecía boca- se movía, escuchaba murmuros y ¿La silueta estaba alterada?

-Ven-Fue lo único que pude comprender... Esa voz, yo la conozco.¿Quien es?

Sentí mis pies en el suelo. Le tomé la mano a la silueta y traté de descifrar quien era. Pero todo se desvaneció.

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Abrí los ojos lentamente, vi luces blancas, como de hospi...tal...

Pestañee un par de veces tratando de despejarme y ordenar lo sucedido.

Traté de moverme, todo en orden, podía sentir todo mi cuerpo, mire a mi alrededor. Aún no entiendo como llegue aquí.

Sentí una presión y movimiento en mi mano derecha, asiendo que me volteara a ver.

Primero observe mi mano, luego al sujeto que la sostenía y nuevamente a mi mano.

-¿Andrew?-Lo miré con los ojos abiertos como platos

Andrew estaba sentado y apoyaba su cabeza en la cama y sujetaba mi mano mientras dormía... Se veía tan... Tierno.

Se movió lentamente, se acomodó en la silla, frotó sus ojos y los abrió pesadamente.

-¡Sam!,¡Dios santo, Sam!-Me abrazó-¡Casi me matas de un susto!

Me soltó con cuidado

-¿Qué?,¿Qué sucedió?

En ése preciso momento entró un doctor observando unos papeles que llevaba en las manos.

Me observo de reojo y volvió su mirada a los papeles.

-Tiene suerte de estar viva-Soltó el doctor en un suspiro- ingresó al hospital con 41º de fiebre...-hizo una pausa para observarme-al borde de entrar en estado de coma,¿ ha tenido alucinaciones?

Asenti lentamente.

-Ok. Vendré en unos minutos más.

Voltee la cabeza hacia Andrew

-¿Debo suponer que eres mi héroe?

Alzó los hombros despreocupado y los dos nos largamos a reír.

-Emm... ¿Y exactamente que sucedió?

-¿Qué?

-¿Cómo me encontraste?

-Oh-Desordenó su cabello, su rostro se volvió serio- me tarde más de lo esperado en lo que hacia, y no sé, se me dio por tomar otra ruta, te vi-en ese instante Andrew miraba al vacío recordando- estabas... Tan pálida, te reconocí enseguida,bajé del auto, me acerqué, tomaste mi mano, como si supieras que era yo y te desmayaste... Y bueno-Vió a su alrededor- aquí estamos

-Si, eres mi héroe Andrew Reed.

La puerta volvió a abrirse y el mismo doctor entró ahora solo mirándome

Andrew se levantó de la silla, permaneciendo parado al lado de la puerta.

-Es una gripe que te pilló desprevenida

«¿Gripe?»

Examinó mis ojos y anotó algo en los papeles que aún llevaba en las manos.

-Te encuentras bastante mejor, tú temperatura se encuentra normal, te recetaré unos  medicamentos para aliviar un poco los síntomas.

-¿Las alucinaciones tienen que ver con la gripe?-Pregunté

-Con 41ºC  si, y también mareos o vértigo, muy bien, está todo listo para darte de alta-Miró a Andrew-Vamos a llenar los papeles.

Este asintió, me dedicó una sonrisa afectuosa y siguió al doctor.

No me había preguntado que hora era.

Mire a mi derecha, había un reloj de plástico colgado en la pared

Las 5 de la mañana... Ahora entiendo por qué Andrew dormía.

Una enfermera entró a la habitación con mi ropa.

Me vestí y Andrew me ofreció su chaqueta.

Subí a su auto y partimos hacia mi casa.

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Disculpen la demora, he estado  muy ocupada últimamente y no encontraba el momento para escribir.

Gracias a todos los lectores :D

Besos. Cata