capítulo 8

72K 3.3K 481
                                    


Me encuentro preparando un rico desayuno nutritivo para tratar de reponer las energías por no dormir bien la noche anterior. Y pues como dice el dicho "no todo lo que brilla es oro" ya se me hacia rara tanta belleza, todo iba bien desde mi llegada, hasta que aparece éste papi rico en mis sueños y lo revuelve todo!. Tan tranquila que me encontraba y ahora además de estar en mis sueños está en mi mente todo el Santo día.

Después de haberme levantado de la mesa para saludar a algunas personas, pues según sólo eran dos mesas! Ja' pues no, en cuánto se regó la voz me tomé algunas fotos y platique con algunas personas, me sentía toda una celebridad, pero es que no estamos hablando de cualquier restaurante.

Entre las personas que saludé estaba un tal Danilo Vianchi que se encontraba con algunos socios, me pidió una foto con él y para qué negarlo es un mango bien sabroso el condenado. Pero nada que ver con el Papi Rico de Dante... No vayas por ahí mujer!!!. Bueno ése tal Danilo me dio su tarjeta, que le gustaría tomar algo conmigo algún día, bueno en realidad me pidió mi número pero como me negué, éste me obsequio el suyo.

Cuando nos tomaron la foto éste hombre posó su mano casi en mi trasero, y aún qué quería tragárselo tenía que mantener la imagen del " Portofino " no me quedó más que aguantarme disimuladamente quite su agarre y le dije que cuidara sus manos pues las tenía muy largas. Con toda la dignidad y como si no hubiera pasado nada me alejo de esa mesa para saludar a otros y regresar a refugiarme a mi cocina hasta que tocó la hora de marcharnos.

Se que les debo una disculpa a todos por irme así sin más de la mesa, pero es que ese hombre saca todo lo malo, de mí, saben lo que es tener casi un orgasmo entre tanta gente observándote. Pues bien a mí, por poco me pasa y es que está muy bueno el condenado. pero cuándo quiso mandar en mí, mi reacción fue rara pues me molestó pero extrañamente a la vez me éxito.

Al salir del restaurant venía tan concentrada en mis pensamientos y manejaba en modo automático, al detenerme en un alto. Otra vez esos malditos nervios y esa sensación de su mirada, me estaban quemando, no regrese a ver a ningún auto sólo acelere en cuanto la luz cambió. Al llegar a casa y tratar de descansar fue terrible pues por más que intente no pude, cada vez que cerraba mis ojos lo veía a él esa mirada de acero y a la vez azul con sus negras pestañas y ese cuerpo sabroso que... Joder no puede ser posible que me caliente sólo con recordarlo. Por Dios! si él y yo terminamos teniendo sexo estoy mas que segura no podría pararme en días si ése es su cuerpo no me quiero imaginar su.... Oh que calors! Como lo tendrá? O será uno de esos que es puro cuerpo y nada de ..... rio en mi interior el sólo imaginar semejante hombre y con una polla tan chiquita sería un trauma. Creo que los desvelos me están cobrando factura y me hacen delirar.

Dejo mis tontos pensamientos a un lado cuando el timbre suena, lavo mis manos para ir a abrir.

- Hola cariño -- entra una Giulia despampanante como siempre, saludando -- necesitó que me alimentes y que hablemos.

- Hola  nena llegas justo a tiempo -- nos saludamos y la invitó a pasar -- ven pasa a la cocina.

-  Mmm huele delicioso, Bruno moriría  por estar aquí -- ambas sonreímos pues es verdad y desde la llegada de su primo no a podido escaparse para comer o desayunar conmigo -- y siempre saldrás el domingo en la noche con Iam? -- su mirada pícara me hizo negar con la cabeza.

- Si saldremos pero ya te dije que sólo somos amigos, es lindo pero no me interesa de esa forma -- ella hizo un gesto de decepción -- porque no vienen con nosotros, la pasaremos bien ya lo verán, el y sus amigos son muy divertidos.

- Ja' crees que mi madre y tía Alenka lo permitirán?, si ayer que les comente que el domingo no te quedarías hasta la cena, pegaron el grito en el cielo. Que ya sabemos los domingos familiares son exclusivos y que se come y cena juntos, si es posible hasta el desayuno! -- puso una cara de pánico -- pero comprendieron que tienes también que hacer amistades, a! pero te advierto ni se te ocurra salirte luego luego heee por que no te la acabarás con ellas.

Pequeña Gran Debilidad ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora