Todo saldrá bien... -Deltarune- {ON HOLD}

6

La mañana refulge gloriosa por el horizonte, tan pronto como el primer rayo de luz se cuela en su habitación y da en su cara se levanta de su incómoda cama mientras se frota los ojos con cansancio, se para y se dirige a la ventana para ser la testigo del hermoso amanecer que se presenciaba ante ella, aunque eso no le importaba, más bien, le importaba que los molestos rayos de luz dejaran de dar a sus amarillentos ojos, cuando logró tapar la ventana con la cortina desgastada que ocupaba, volvió a su cama y cayó rendida de nuevo, no pudo dormir la noche anterior ni conciliar el sueño después de "eso", ella esperó y esperó pero todo el tiempo no pudo sacarse algo de su cabeza, parecía un pensamiento blanco que, de algún modo parecía perturbar su mente así que ella al saber que no podría dormir más simplemente esperó a la señal de que sus padres se habían ido para poder salir con seguridad, después de un rato de silencio pudo escuchar la puerta principal abrirse y cerrarse dos veces la monstruo ya se encontraba lista para bajar y mirar que puede hacer antes de partir a la casa del humano.

Mientras tanto al otro lado de la ciudad un joven castaño acababa por levantarse de su cómoda cama, hoy era un día mayormente especial, era el día donde recibiría a Susie para hacer el deseado proyecto de su profesora, el bajó las escaleras y empezó con hacerse un desayuno para el solo puesto que su madre le avisó que saldría por asuntos a los cuales él no podía infiltrarse, eso significaba que tenía la casa para él y así se evitaría la conversación que su madre prometió tener con la reptil morada lo cual daba mala espina, incluso pensando en ello le dió un escalofrío, después de terminar su desayuno el cual fue un simple cereal él se dirigió al baño para poder acabar con sus quehaceres personales, pero al empezar a cepillar sus dientes notó que había una sombra detrás de él la cual parecía... ¿sonriente? Rápidamente gira su cabeza para notar que no hay nada... eso le preocupó, pero solo no le dió importancia y siguió con lo suyo.

Han pasado algunas horas, la reptil morada va por la calle junto a su hermano hasta que se detienen en frente de una... ¿pizzería? Para que el mayor de los dos empiece a hablar.

-entonces ¿vas a la casa de un "amigo" para hacer un estúpido proyecto? Que tonterías- dijo con un tono de molestia evitando mirar a su hermana quien solo ignora el comentario para voltearse e irse sin decir ni una palabra.

-bueno, pero si me entero de que andas de p-

-vas a callarte alguna vez o acaso estas sordo, dije P-R-O-Y-E-C-T-O- había volteado rápidamente para encararlo con molestia y después de sus palabras se retiró de la vista de su hermano quien, con una mueca de disgusto solo se va en la otra dirección adentrándose en el bosque.

Susie llegó tan rápido como pudo puesto que en el camino iba apurada por no saber qué horas eran y por supuesto temía llegar tarde para la señora Toriel, al estar en frente de la puerta intentó tocar lo más suave que pudo mientras cogía aire y trataba de estar lo más presentable posible, Kris, al escuchar el golpe en la puerta va directamente hacia ella y la abre para dejar pasar a la monstruo que se encontraba en frente de él.

-Que casa hombre- fue lo primero que dijo al entrar admirando todo hasta que recordó quien era la dueña de todo eso- Kris... ¿y tu madre?

Kris apuntó a la puerta dando a entender que no se encontraba ahí haciendo que Susie diera un suspiro de alivio mientras seguía admirando partes de la casa, Kris se acercó a ella para agarrar su brazo y dirigirla escaleras arriba, ella obviamente se sobresaltó y al estar en la entrada del que supuso que era el cuarto del joven rápidamente rompe el agarre mientras tapaba su cara con una mano evitando mirar al contrario, Kris se puso nervioso por saber si eso la había molestado, pero al intentar mirar su rostro tenía un ¿sonrojo? O tal vez era la luz de la tarde que se reflejaba un poco en su cara... si, eso debía ser, los dos se quedan quietos y en silencio por un momento hasta que el humano abre la puerta para pasar, al estar ya dentro los dos, el humano se dirige hacia una computadora para encenderla y la monstruo solo observa el cuarto, un lado al menos tenía decoración y cajas tiradas por doquier, pero donde ella estaba, solo había una jaula bastante maltratada junto a una mancha de quien sabe qué.

- ¿Qué i-innovación tecnológica tienes en m-mente? – le preguntó el humano sutilmente mientras ella se sentaba en la cama y dirigía su mirar al techo.

- ¿Arma hidráulica?

-no creo que lo a-acepten.

- ¿robot?

-creo que lo h-harán Noelle y Berdly.

- ¿entonces qué? ¿un maldito volcán bien mierdas? ¿o que más tienes tú? - dijo con agresividad mientras se recostaba en la cama frustrada, el humano solo saca su teléfono y empieza a escribir varias cosas en él, claro que la monstruo lo notó- oye ¿Qué escribes en esa cosa?

-mi hermano tal vez t-tenga algunas ideas, creo que él hizo lo mismo que estamos haciendo- le respondió mientras dejaba su teléfono a un lado-pero también t-tardará en escribir, está en clase.

-bueno, tampoco quería hacer nada- la monstruo se sentó y palmeó el colchón en donde estaba, el humano entendió la señal y se acercó poco a poco para sentarse con ella y mirar el suelo, la habitación había sido consumido por un relajante silencio que perduró por unos pocos minutos antes de que ella lo interrumpiera.

-entonces... ¿y ahora qué? – preguntó mientras ponía una mano en el hombro del humano quien se paró de su lugar para salir de la habitación sin decir nada, la monstruo se extrañó, pero no le dio importancia, al rato Susie ve lo que lleva en sus manos y queda sorprendida por eso, era una tarta completa de... bueno, aun no sabía de qué sabor, pero era una gran tarta- ¿de dónde sacaste eso?

-mi madre lo guardó para ti- respondió mientras se acercaba a un cajón y lo dejaba ahí, Susie solo se burló.

- ¿Ella pensaba que iba a comerte y por eso para intentar satisfacerme la hizo? - se burlaba salvajemente.

-eso creo- dijo el humano antes de sacar dos cucharas y pasarle una a la monstruo quien después de las palabras del joven se quedó callada, pero debía imaginarlo, que alguien pasara un día con la temible Susie era de preocupar para todos.

Los dos comieron en silencio, cada uno tenía su lado del pastel, no hubo casi más palabras desde aquel momento lo único que hicieron fue esperar el mensaje de Asriel el cual nunca llegó, eran las 7:00 p.m. y se encontraban en medio del cuarto tirados como simple basura, o así dijo que se sentía Susie y que eso le agradaba, el silencio era tan confortable que los dos sentían como poco a poco sus parpados se hacían pesados hasta que no resistieron y cayeron profundamente dormidos...

Para que la oscuridad volviera con su inquietante silencio...

Oscuridad...

Y más oscuridad...

Para que un color anaranjado se difundiera en el ambiente...

Para que un color amarrillo empezara a resaltar...

Para que un color rojo casi tragara esa oscuridad...

Para que unos relajantes murmullos se conviertan en gritos de desesperación...

Para oír una voz familiar llamar su nombre ...

Pero cuando todo pareció calmarse...

La nada... Volvió...

...