━ rubbing of (INCONLUSA)

un.

Por los pasillos de la escuela Seungmin y Jisung sin nada que hacer, en un recreo ruidoso y aburrido, caminaban con rumbo a la biblioteca en busca de más tranquilidad, un lugar en donde ambos podrían formular un dialecto más tranquilo.

Ambos chicos, mirándose uno con el otro, mientras caminaban y se hablaban, Seungmin chocó con un chico, cuyo iba de prisa corriendo y de la nada chocó con este, justo en el instante donde Seungmin corrió su vista hacía el frente, así juntando ambos rosados labios torpemente, Hyunjin paró en seco.
No fue un beso a grandes rasgos, uno suave y desprevenido, de la nada se formuló algo extraño y no tardó ni un minuto y los pómulos de Seungmin estaban siendo habitados por un color carmín suave.

Hyunjin miró sus orbes con aspecto a galaxias por un par de instantes y desapareció por los pasillos.
Fueron los segundos suficientes para que Seungmin guardara la imagen del chico por el fondo de su mente, estaba grabado en él y ahora no iba a salir esa escena de su cabeza.

Seungmin estaba petrificado, olvidando la presencia de Jisung el cual, al igual que éste, lo estaba.

— “Eso fue totalmente raro, ignorando el hecho de que se besaron.” dijo Jisung, seguido de unas carcajadas al ver como Seungmin se descongelaba y lo miraba.
— “Es Hyunjin, va en mi salón...”

Ignorando las carcajadas que aún emitían los labios de Jisung, Seungmin aún no sabía qué hacer ni cómo reaccionar. No tenía el pensamientos de haber “gastado” su primer beso con alguien desconocido y es más, por casualidad.
Y ahora estaba Seungmin, luego de tres días pasados sin poder olvidar esa imagen en su mente de aquel chico que besó suavemente por casualidad.

—“Ya deja de pensar en él”. Jisung, ya estaba molesto, el chico parecía no tomar importancia a los mensajes que él pronunciaba.
—“No estoy pensando en él, es sólo, ahg, sí, Hyunjin está en mis pensamientos y no se va.”
—“Lo sabía, oye, maniático por Hyunjin, ahí viene.” Seungmin, antes de escuchar las últimas palabras emitidas por Jisung, le soltó una mirada de molestia, “Maniático” no era una buena palabra para él; miró hacía el frente, allí estaba Hyunjin con la clásica sonrisa poco vista por los ojos de Seungmin. La primera vez que sus ojos lo divisaban normalmente, el cliché de las mariposas en el estómago estaba creciendo.

La sonrisa de Hyunjin predominaba su cara, su pelo era reflejado por la luz del sol y era una vista agradable de apreciar. Seungmin cayó.
Hyunjin tenía su vista en el chico que gritó algo a lo lejos, su risa era sonora y tímida. De pronto, sintió una vista en él, dirigió su vista a el chico que en sus ojos estaba él reflejado y un brillo estaba cubierto en sus orbes.
Hyunjin cambió su expresión por completo y ahora tenía un rosado en sus mejillas habitando en él.