Capítulo 11

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Narra Celia

Lo que menos me imaginé en cuanto salí al recreo es que tendría que ver/oír estupideces de alguien para quien "supuestamente" fui lo mejor que le había pasado en años y que había pasado los mejores momentos en todo el verano.

Os resumo lo que ha pasado en estos meses.

Flashback

Era una tarde calurosa de verano en Barcelona, en el Monte Tibidabo. Me encontraba en un banco descansando después de la paliza que me había metido. Si lo llego a saber vengo en bici.

Carlota: no ha sido para tanto

Lydia: lo dirás por ti

Celia: eso digo yo

Maca: la que quiso venir a Barcelona de vacaciones fuiste tú-refiriéndose a mí

Celia: lo sé. Yo quería venir a ver la cuidad e ir a la playa no a hacer una caminata que te lleva todo el día

Carlota: paparruchas

Maca: cambia de camello

Carlota: no me drogo

Lydia: ¿Estás segura? Nos lo puedes contar

Carlota: más que segura. Además, aquí la que tiene más que contar es Celi

Maca: eso, eso

Celia: ¿Qué queréis que os cuente?

Lydia: ¡Venga ya! Has estado es un internado todo un curso entero

Celia: porque para la carrera necesito el bachiller

Maca: eso es lo que tampoco entendemos

Celia: ¿El qué?

Carlota: antes siempre decías que no harías el bachiller, que preferías hacer un ciclo, y de repente vas y nos dices que vas a hacer el bachiller

Celia: ya...

Lydia: siempre has sido una chica de ideas fijas, ¿qué ha pasado?

Celia: todo empezó cuando unos vecinos se mudaron. Eran una familia, padre, madre e hijos. Unos de los hijos (el mayor) es de mi edad. Hasta ahí bien, el problema llegó después. Como bien sabéis mis padres son muy sociables

Maca: en eso no has salido a ellos

Lydia: déjala que acabe

Celia: ¡Gracias! Mi padre les invitó a cenar, todo iba de maravilla hasta que la madre del chico cuyo nombre es Ismael

Maca: menudo nombre para una mujer

Celia: ese es el nombre del chico

Maca: ya decía yo

Celia: su madre me empezó a preguntar cosas sobre mí dado que según ella estaba muy callada. Cuantos años tenía, cuáles eran mis aficiones, que estudiaba, que planes tenía para el futuro, que carrera quería estudiar... todo eso. En cuanto le dije que no quería hacer el bachiller casi le da algo a la mujer. Ismael de la nada empezó a prestarme atención conforme le detallaba a su madre los principales motivos por los cuales preferiría hacer un ciclo.

A día de hoy no sé si la convencí o no, la verdad es que me da igual. Resulta que el chaval venía a mi mismo instituto, me paraba por los pasillos, me saludaba hasta venía conmigo a casa.

Empezamos a vernos más, a llevarnos. Empezamos a salir, sin que la gente lo supiera. Todo iba bien, sin embargo de la noche a la mañana dejó de hablarme. No me cogía las llamadas, no me esperaba para ir al insti, si me veía hacía que no me conocía...fue horrible, lo pasé muy mal esos meses, aún por encima vosotras no estabais. Fue uno de los peores años de mi vida. Coincidió además que fue el mismo año que murió mi prima pequeña por una enfermedad que no la consiguieron coger a tiempo.-Sin darme cuenta estaba llorando

Maca: no lo sabíamos, lo de este chico, impresentable él

Lydia: no lo conozco y ya me cae mal

Carlota: ¡Será cerdo! Dime que lo has olvidado-asentí-menos mal

Celia: como os estaba contando cuando murió mi prima caí en una depresión, tuve que ir al psicólogo y todo. Cuando conseguí recuperarme de todo me di cuenta de que hay gente que de verdad me necesita en este mundo, por eso cambié de idea porque quería y quiero estudiar educación especial

Carlota-emocionada-: ¡Qué bonito!

Lydia: cuenta con nosotras para lo que necesites

Maca: vamos a un tema más alegre. Cuenta como te fue en el internado

Les conté como me fue el curso.

Maca: ¿Quién es el galán?-subiendo y bajando las cejas

Celia: no me hace ni caso, así que nada

Lydia: pobrecita

Bajábamos por el Tibidabo dando un paseo. Hablando de temas triviales y riéndonos.

XXX: ¿Celia?- preguntó alguien detrás de mí, me di la vuelta y ahí estaba él.

Celia: ¿Álex?

Álex M: ¡Cuánto tiempo!-me dio un abrazo

Como buenas amigas cotillas que tengo tienen que hacerse notar.

Maca: ¿No nos presentas?

Celia: ¡Claro! Chicas este es Álex, un amigo. Álex estás son Carlota, Lydia y Maca, unas amigas

Álex M: encantado chicas

Maca: ¿De qué me suenas?

Celia: de verlo en la tele

Álex M: soy piloto

Carlota: ya decía yo que me sonaba

Álex M: ¿Qué haces/hacéis por tierras catalanas?

Celia: de vacaciones, hemos venido una semana

Álex M: ¿Cuándo marchas? Si puedo saber

Celia: dentro de 3 días

Álex M: espero poder robarte un día

Carlota: ¿Acaso te mola nuestra amiga?

Álex M: lo tuyo sí que es ir directo al grano

Carlota: entiéndeme, es mi amiga y tú sigues siendo un tío bueno

Álex M: eres muy directa

Carlota: ¡Para nada! Me ganan

Celia: perdónala, y claro que quedaré un día contigo

Nos despedimos diciendo que quedaríamos al día siguiente. Así hicimos, quedamos esos tres días que faltaban antes de irme.

En esos 3 días pasaron cosas que ya os iré contando.

Fin del flasback

Ana: ¿Te has encontrado en las vacaciones al pistolas?

Celia: sí y no una vez sino dos

XXX: Estabais aquí, no os encontraba

Celia: hola, Itziar

Itziar: hola

Ana: chicas, ella es Itziar, nuestra compañera de habitación

Lore: encantada, yo soy Lore y ellas son María y ____, y la chica que está con los chicos es Marta

Itziar: encantada, tengo 18 años y soy de Barcelona

Nos fuimos presentando mejor y hablando con ella. Teníamos un tema pendiente pero ya hablaríamos de ello otro día.

Persiguiendo sueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora