Intercambio temporal

***Otra vez en 2039***

Serían alrededor de las 8:00 de la mañana cuando a través de las persianas entraba la tenue luz de los principios del amanecer que caminaba poco a poco por el rostro pecoso de Midoriya hasta llegara a los ojos del pequeño, que, molesto por la luz se fue despertando restregando las manos por los ojos quitándose las legañas e intentando enfocar la vista, mientras poco a poco iba incorporando el cuerpo hasta quedar sentado en medio de la enorme cama de matrimonio en la que había pasado la noche. Una vez ubicado miro hacías los lados buscando al mayor sin embargo allí solo se encontraba él. Se puso en pie y se colocó en los pies una grandes pantuflas de All Might, hasta que de buenas a primeras y a través de las rendijas de la puerta llegó a su nariz un gran aroma a pan recién hecho y café, lo que provocó que su barriera rugiera, llevándose la mano al vientre se acercó a la puerta a la vez que con la otra se estiraba.

Siguiendo aquel aroma que abría el apetito llegó a la cocina, allí se encontró a Bakugo, con un delantal amarrada al cuello y cintura de color naranja, caminando de un lado al otro alrededor de un sartén donde freia huevos revueltos, por otro lado la tostadora, el microondas y la cafetera que ya echaba humo desprendiendo un aroma bastante agradable al olfato del menor.

Izuku: buenos días- decía entre bostezos- qui-quieres que te ayude Kaccha?

Katsuki: ah? Deku- se detuvo en medio de la cocina y miró a Midoriya, quien aún bestia con la camiseta que el día anterior le había dejado, le quedaba grande tanto que no le hizo falta ponerse pantalón gracias también a los boxers que llevaba- buenos días, no, no hace falta, seguro que la cagarias, mejor siéntate ahí y espera.

El pequeño asintió con la cabeza y siguió las indicaciones del mayor, una vez sentado pudo ver como Bakugo volvía a caminar de allá para acá.

Desde su perspectiva se veía tan bien, le gustaba como le quedaba el delantal que a su vez le hacía gracia puesto que hacía lucir a Bakugo como un ama de casa. Envuelto en lo más profundo de sus pensamientos y sin tener la remota idea de lo que hacía, las comisuras de sus labios dibujaron en su rostros una dulce sonrisa mientras apoyaba la cabeza en una de sus manos.

Bakugo había terminado de servir el desayuno, cuando con ambos platos en las manos se dio la vuelta para mirar al menor. Se sorprendió al ver la exprecion de felicidad de este-que coño?- se preguntaba. De repente y como si algo se apoderase de su cuerpo, Bakugo se acercó a Midoriya, y sin darle tiempo a reaccionar lo tomó del mentón y lo besó. Los ojos del menor se abrieron de par en par ante la sorpresa, sin embargo sucumbio al beso. Unos segundos más tarde cuando ambos sintieron la falta de oxígeno, separaron sus labios. El joven desvió la mirada hacia abajo, estaba completamente sonrojado mientras que el mayor que aun tenia plato en mano se sentó en la mesa y los dos comenzaron a desayunar, nadie dijo nada durante un buen rato, hasta que Bakugo rompió con la atmósfera silenciosamente incomoda que se había creado en la sala.

Katsuki: Deku-dijo sin levantar la vista del plato.

Midoriya un tanto rosado levantó la vista.

Katsuki: ahora tengo que salir voy hacer la compra, no se cuanto voy a tardar así que quédate aquí- serio levantó la vista mirando directamente a los ojos esmeralda. Quien se mantuvo en silencio y simplemente asintió con la cabeza.

Al pasar unos minutos Bakugo se levantó de la mesa y marchó hasta su alcoba a cambiarse, mientras, Midoriya llevaba los platos, vasos y demás al lavavajillas y luego salió de la cocina al encuentro con Bakugo, el cual ya estaba en la puerta sentado en el pequeño escalón calzándose una zapatillas, iba con vaqueros azul marino, camisa blanca y chaqueta deportiva negra, antes de salir agarro una gorra negra y naranja, y se dirigió al pecoso que lo observaba arriba del escalón no muy lejo de él y se acercó alzando la mano deteniéndose a la altura de las mejillas sonrojadas del menor quien cerró fuerte los ojos, Bakugo miró sorprendido y molesto al joven, y, colocándose la gorra acarició el pelo verde de Midoriya que sorprendido abrió los ojos, cuando Bakugo tenia la mano encima del pomo Midoriya extendió la mano pero la dejó caer de nuevo, quería agarrar el brazo del mayor pero algo lo detuvo, quedó unos segundos en silencio pensando.

Izuku: Ka-Kaccha.

El nombrado se detuvo con la puerta medio abierta.

Katsuki: ahora que qui...- sin embargo no pudo acabar la frase, debido a que Midoriya se le había abalanzado, tomándolo por las mejilla el joven besó al mayor, seguido Bakugo lo agarró por la cintura juntandola con la suya haciendo que el cuerpo del pequeño peliverde se arqueara un poco. No pasó mucho hasta que la falta de oxígeno se hiciese presente, el pequeño inició y finalizó el beso dejando tras sí un largo hilo de saliva, seguido Bakugo dejó de nuevo a Midoriya en el suelo haciendo que este cayera de rodillas al suelo, completamente rojo miraba a suelo.

Izuku: Ka-Kaccha... -decía mientras alzaba la cabeza con los ojos llorosos- como pensaba, que es para ti, que soy para ti-dijo dandole más énfasis a lo último- en el futuro!?