Capítulo 1

8 1 0
                                    



- ¿Qué? ¿Qué estais mirando? Todo el mundo a lo suyo, ¡Largaos!- Gritó a la multitud que les rodeaba. Miró esos preciosos ojos azules que un día reflectían confianza y amor, ahora, solamente eran unos ojos azules más.

Recordó aquella madrugada en la que llovía a cantaros bajo su portal. Reclamandole esa parte de corazón que se había llevado y no había querido devolver. La llamó con numero oculto, sabía que si veía su número en la pantalla del iphone no cogería la llamada, y volvería a saltar el jodido buzon de voz otra vez. -¿Si? ¿Quién es?- Al escuchar su voz aterciopelada se le paró el corazon. Tenía tantas cosas que decirle, que no dijo nada. Quería contestarle pero el nudo que tenia en la garganta impedia que las cuerdas vocales desempeñasen su función vital. Al no obtener respuesta, ella colgó. El sabía que era esa noche, que no iba a tener mas oportunidades de explicarse...

Escupió la saliva que se habia acumulado en su boca, y con ella mezclo ese nudo que tenia en la garganta desde el momento en el que la vio irse mientras se limpiaba del ojo cada lagrima para que esta no le recorriese toda la cara. Y volvió a marcar. Unos tonos despues: -Soy yo, por favor no cuelgues.- Esta vez no espero que ella contestase y lo soltó todo del tiron y corriendo con tono carraspeante y entrecortado. Esperó que colgase, mientras ansiaba que respondiese, pero nada. Solo obtuvo un ensordecedor silencio que se entrecortaba con su respiracion. -Baja a tu portal- Dijo por fin. -Necesito... Necesito aclarartelo todo Gisela.- Prosiguió entre suspiros. Ella contestó por fin -Estas loco si piensas que voy a bajar a hablar contigo- -Pues subo yo. Abreme el portal que necesito verte- Replico el. -¡Esto es flipante! No puedes aparecer asi como asi, a las tres de la mañana, haciendo como que no ha sucedido nada entre nosotros, como si todo sigue igual y reclamar que quieres verme- Dijo ella con un tono de dolor acumulado en el pecho. Se produjo un silencio entre ambos, un silencio que duro mas de lo habitual. Penso que colgaria, y en un intento de que no lo hiciese dijo, mas para si mismo que para ella -No podemos seguir asi joder. No te estoy pidiendo que vuelvas conmigo, solo quiero aclarar las cosas.- Tragó saliva y suspiró. Al rato prosiguió: -Solo baja y escuchame, por favor. Luego si quieres no me vuelves a hablar en la vida, pero por favor, baja. Los dos pitiditos indicaban que ella habia colgado. Se sintio satisfecho. Nervioso a mas no poder, se peinaba con los dedos los mechones que le caian del tupe a causa de la lluvia, mientras se miraba en el reflejo que el baho del cristal de la puerta le reflectia. Ella andaba de un lado a otro en el minusculo ascensor. -Dios, esto no me puede estar pasando a mi, otra vez no. ¿Por que he accedido a bajar?- Pasaba por su mente en ese instante. Cuando se abrió la puerta del ascensor y divisó al otro lado de la puerta su rostro empapado, su mente respondio a su pregunta -Ya se porque he accedido a bajar, es mi maldita debilidad.-

CONTINUARÁ...

Una Historia que nunca pudo tener título...Where stories live. Discover now