Capítulo I

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Estábamos en el entrenamiento matutino cuando sonó la corneta la cual indicaba que era hora de almorzar.

Mis compañeras de cabaña y yo nos fuimos a por las bandejas para que nos pudieran servir la comida.

Hoy tocaba filete empanado con verduras, pan, agua y una mandarina de postre, esa era el almuerzo preferido por todos y habíamos tenido suerte ya que muchas veces almorzamos sopa con un sabor muy desagradable.

Estábamos comiendo cuando de repente entra nuestro Teniente Raymond pero se le conocía como Teniente  en el comedor y era extraño ya que los altos cargos tenían una zona VIP donde se decía que comían solomillo con patatas bravas, todo un manjar.

Al entrar todo el mundo se callo:

-¿Donde esta Jones? - dije el Teniente mirando a todo el mundo, incluso a los cocineros que se habían asomado haber que pasaba.

-Aquí señor - dije mientras que me levantaba de mi sitio.

-Sígame por favor- dijo mientras que se daba la vuelta.

Mientras iba hacia él todo el mundo me deseaba suerte algunos incluso actuaban como si me fueran a fusilar.

Ya en el despacho el cual tenía una bandera de españa enorme y muchos reconocimientos y fotos de antiguas secciones. Me quedé mirando una en la que la cara de dos personas me sonaban muchísimo pero no se podían distinguir muy bien ya que estaban al final de la fotografía:

-Esos éramos Schleider y yo de jóvenes- dijo con voz depresiva.

-Pero señor ¿Schleider no es un cargo mayor del ejército alemán?. -dije extrañada.

-Sí, él es español lo que pasa esque no estaba de acuerdo con los requisitos para ser Teniente  y se fue con los alemanes nuestros mayores enemigos.

Se quedó un rato mirando la fotografía y se sentó:

-Porfavor Jody tome asiento.

Me pareció muy raro que me llamara por mi nombre y no por mi apellido, me senté de inmediato:

-¿Sabe porque la he llamado?.

-No- dije un poco nerviosa.

-Tranquila no es nada grave.Solamente quería decirte que mañana tu sección y tú haréis un reconocimiento del terreno ya que llevamos sin hacerlo desde hace 3 semanas.Quiero que mañana estéis a las 7:00 am en el comedor desayunando.

-Sí señor.

Salí del despacho un suspiro salió sin darme cuenta. Me fui a la zona donde se encuentran todas las cabaña todos me estaban mirando, algunos murmuraban y otros alucinaban. Entre en mi cabaña nada más que entre todas mis compañeras me abrazaron y me estuvieron preguntando yo no respondí a nada solo les dije que reunieron a toda nuestra sección en el centro de todas cabañas en el cual siempre estaba encendido un fuego ya que  tenía que hacer un comunicado muy importante:

-El Teniente nos quiere a todos mañana a las 7:00 am en el comedor desayunando-dije en voz alta y subida a una caja de madera.

-¿Para qué?.-preguntó un soldado.

-Parecer un reconocimiento del terreno.

-Puff yo me aliste en el ejército para combatir no para hacer reconocimientos de terreno.-dijo otro soldado.

Al escuchar esas palabras hicieron que me bajara de la caja de un salto y que cayera enfrente suya:

-No todo en esta vida es combatir, si no conoces el terreno en el que juegas poco duraras aquí.-dije muy seriamente.

Al terminar esta frase note como si alguien me estuviera observando desde la distancia y efectivamente así era, me estaba observando el Teniente.

Después del discurso todos el mundo siguió haciendo lo que estaban haciendo antes. Yo me fui a ver como estaba Nadir mi mejor amiga la cual observe que estaba sentada con Jason Solow, un chico muy majo de nuestra sección:

-Hola Nadir, hola Jason. -dije amablemente.

-¡Hola Jody!-dijo muy entusiasmada.

Al girarse  me di cuenta que Jason le estaba curando una herida que se había hecho en la mano:

-¿Qué te ha pasado?.-dije preocupada.

-Nada, se a echo un pequeño rasguño al caerse al suelo.-dijo Jason al instante.

-Si pero e tenido suerte de que Jason me pudiera desinfectar la herida.-dijo Nadir mirando a Jason.

Había una servilleta con sangre de Nadir tirada en el suelo:

-¿Puedo tirar esta servilleta?.

-¡No!-dijo Jason-me refiero que yo ahora voy a guardar las cosas en la enfermería deja que la tire yo de camino.

-Vale, Nadir si necesitas algo estoy en la cabaña con las demás.

-Vale nos vemos luego, adios.

-Adios.

Me fui a la cabaña me puse el pijama y me quede dormida.    

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