Capítulo 3

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Salí de mi casa para ir a darle la carta a Clara. Valencia había oscurecido totalmente. Eran las 10 y media. La lluvia caía con fuerza y chocaba contra el asfalto de las calles. Me acerqué a casa de Clara y llamé a la puerta. Esperé unos segundos. Volví a llamar. No había nadie.

-Se habrá ido a algún sitió-murmuré.

Di la vuelta y me dirigí a mi casa. Antes de entrar, miré la casa de enfrente. Nada nuevo. Todo quieto y sin movimiento alguno. Me adentré en mi casa y fui a la cocina.

-Ya se la has dado?-preguntó

-No. No estaba en casa.-respondí-Probaré mañana.

Mi madre asintió y continuó haciendo la cena. Yo subí a mi nueva habita-ción y me senté a leer un libro que estaba entre el polvo. Trataba sobre la ciudad de Valencia. Lo abrí. Estaba escrito en Valenciano. Lo cerré y pen-sé en la calle de enfrente. Quería volver a visitarla. Quizá el día siguiente.

Quería volver a investigar aquella misteriosa mansión, a aquella extraña voz que susurraba mi nombre.

Era la voz de quién Clara dice, la espíritu? O sólo son imaginaciones mías?

Lo que más extraño me resultó, era el contraste de luces. Para qué tanta luz y luego tanta oscuridad? Supongo que la luz que vi era para atraer mi atención. Pero... Para qué?

-Mañana volveré-susurré.

-Carlos, baja a cenar-exclamó.

El misterio de la casa de enfrenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora