el amor de una asesina (NS) +16

cap 4

- esto no puede ser mejor ! - grito una pelirosa frustrada y molesta mientras leía detallamente los documentos recién recibidos lamentablemente no eran buenas noticias.

- no puede ser ! - golpeando la mesa - nos fuimos lejos de japon para evitar esto ! No puede ser coincidencia ! - exclamó, estaba enserrada en su consultorio sola y le alegraba eso un poco.
Ante ella estaba escrito lo que más temia en el fondo.
TODA LA FAMILIA NAMIKAZE ESTABA EN INGLATERRA.
Tenía que pensar con la cabeza fria, pero no podía concentrarse en absoluto.

- sakura, te trajeron nuevamente algo - escucho decir la pelirosa sacandola de sus pensamientos para observar quien era, era ten-ten nuevamente que le traía un arreglo de flores muy hermoso lo primero que se le vino a su mente fue esconder los documentos que hizo en un movimiento rápido guardando los en una gabeta de su escritorio y lo segundo que el hermoso arreglo se lo había comprado su esposo, eso segundo hizo que todo el malestar de la pelirosa se esfumará completamente.

- Naruto sabe cómo ser oportuno a veces - dijo esta sonrojada y con una sonrisa formándose en sus labios.

- no creo que sea de Naruto haruno-san - comento la castaña mientras le pasaba una nota a la Haruno.

Su cara se tornó sería y su asco fue notorio tanto que eso asustó a ten-ten que nunca había visto a la pelirosa asi.

- estás flores me recordaron a ti . Atte: menma Namikaze-

- haruno-san está bien ?- pregunto la enfermera para solo tener una pequeña respuesta de la haruno mientras hacía pedazos la nota.

- no quiero que esto lo sepa mi esposo y deseo que botes esto, solo es basura - dijo fríamente

- pero son hermosas y se ven caras - comento ten-ten pero luego se arrepintió de sus palabras.

- te dije que las botes - su tono de voz haría que cualquiera tuviera miedo y eso fue lo que hizo la castaña al salir de la habitación rápidamente.

- con quien cree que se está metiendo ese imbécil - exclamó nuevamente molesta.

Su hogar era su única salvación, ver a sus dos hijos jugando con su padre cuando ella llegaba era lo único que le traía paz a su existencia.

- como te fue en el trabajo amor ? - pregunto el rubio mientras recogía la mesa, sabía que la pelirosa traía algo estaba seria y demasiado pensativa.

- no es nada cariño, solo cosas del trabajo - la respuesta no convenció mucho al Haruno así que se acercó a su mujer y la abrazo por detras.

- sabes que es raro que me ocultes cosas, así que comienza a hablar -

Sakura se sentía derrotada, había cambiado demasiado por este hombre así que le comento la situación bueno una cuarta parte de la situación para ser exactos.

Naruto termino de escuchar a Sakura en sobre cómo le llegaban regalos desde hace un mes y que ella los ha estado tirando, aunque nadie lo notará en el fondo el Haruno era posesivo y saber que alguien estaba intentando cortejar a su esposo lo estaba haciendo enfurecer sea quien sea.

Sakura solo veía como sus pequeños se había quedado dormidos en el mueble nuevamente vio como Naruto cargo a Miu y a Ren para llevarlos a su habitación. Se sentía mejor por comentarle lo que estaba pasando aunque no fuera toda la verdad de su preocupación.

- sabes deberías estar tranquila, confío en ti Sakura - escucho decir al rubio que regreso nuevamente a la sala - sé que todo esto es molesto, pero si estás preocupada por algo así creo que debo recalcarte lo mucho que te amo.- Sakura sabía que esas eran las palabras que quería escuchar, para ella Naruto era el esposo perfecto ciertamente tenía fallas que ella corregía como su obsesión por el ramen o que a veces era un flojo , confiansudo, distraído lo cual nunca se hubiera imaginado el día que lo conocio.

- siempre me amaras , sin importar que ? - dijo con un poco de temor en el fondo.

- oye - hizo que la rubia lo mirara- te lo dije el día en que nos casamos - tomando a pelirrosa de la cintura- te amare en la salud y enfermedad hasta que la muerte nos separe - sonrió el Uzumaki .

Lo beso, lo amaba locamente, un amor que nunca pensó llegar a obtener .

- yo también siempre te amare hasta que la muerte nos separe aunque creo que eso será imposible porque no te libraras de mi aún después de esta - dijo dirigiéndose con el pelirubio a la habitación.

- esas eran mis líneas sakura-chan!

Sakura estaba ya segura Naruto la amaba y eso era lo único para olvidar sus problemas por un tiempo, después de todo eso creía hasta apenas hace unos momentos.

- es imposible...- dijo un pelinegro, su cara pálida se notaba ante el estaba un fantasma o eso creía pues había entrado a él consultorio de la pelirosa sin avisar y para su sorpresa encontro a la pelirosa besándose con ....

- tu... Tu estás muerto ! - exclamó asustado el Namikaze, mientras Naruto lo veía con ingenuidad

- disculpe, pero creo que me está confundiendo - dijo el pelirubio mientras Sakura no sabía que hacer estaba en shock , lo que más deseaba que nunca pasará acababa de suceder y no sabía que hacer.

- si tienes razón , es imposible - recobrando la compostura - permítame presentarme soy menma Namikaze - dijo estirando la mano para estrecharla con el rubio.

- que hace en el consultorio de mi esposa - reclamo - se supone que no está en horas de ver a sus pacientes- su tono era molesto algo le decía que esta persona se tenía que ir rápidamente.

- disculpe por el atrevimiento pero soy un viejo amigo de Sakura así que vine a verla directamente - mintió y el rubio lo noto muy bien sentir como su esposa le agarraba la mano fuertemente.

- no lo es , es la persona que te he estado comentando - dijo la pelirrosa firmemente.

- sakura-san ?- dijo confundido el Namikaze

- no quiero ser grosero, pero a mí  ESPOSA le molesta sus regalo y su acoso a ella- soltando a la haruno y acercandose al pelinegro - así que - ya en su oreja susurro- alejese de ella - exclamó el rubio haciendo que el pelinegro saliera rápidamente de la habitación, Sakura sonrió sabía que su esposo podía ser intimidante cuando se lo proponía pero al menos se había quitado una rata encima , aunque era muy temprano para cantar victoria.

- es imposible !! - exclamó el Namikaze dentro de la limosina, habían pasado años, no podía ser que su hermano estuviera vivo pero el hombre que acaba de ver era su viva imagen. Tenía que ser una broma de mal gusto y para acabar estaba casado con la mujer que le había interesado por no haberlo tratado como una pieza de juego por su dinero y poder.

- no puedo dejar ir tan fácilmente a Sakura - se dijo a si mismo antes de comenzar a hacer unas llamadas, tenía que asegurarse quien era ese hombre y si sería una molestia para sus planes de quedarse con la pelirosa.