Profecía ||C.V. Y TU||TERMINADA

Capítulo 12

La puerta fue tocada, Christopher frunció el ceño y nos pusimos de pie, fui a abrir la puerta, Johann y Yoandri estaban ahí, me sonrieron, pero cuando Christopher apareció tras de mí, sus sonrisas se borraron

—Hola ______ ¿Podemos hablar de lo ocurrido? —Dijo Johann, me hice a un lado dejándolos pasar

—Tome asiento, me toca escuchar sus versiones —Dije, los 4 nos dirigimos a la sala, yo me senté en uno de los sillones individuales, Johann y Yoandri en uno largo y Christopher se mantenía de pie tras de mí

—No se ni cómo empezar, es un poco... Complicado —Dijo Johann

—Inicien diciéndome, ¿Que son? —Dije mientras los miraba

—Somos hombre lobo y estamos en la reserva de Hurt, el es el líder de nuestra manada —Dijo está vez Yoandri

—¿Cómo se convirtieron en hombres lobo? —Pregunte curiosa

—No es algo en lo que te conviertas o te conviertan, es algo que se hereda, nuestros padres lo fueron, así que nosotros también lo somos, es algo que solo se da en los hombres, al cumplir los 16 empieza tu primera transformación, una vez al mes nos convertimos sin pedirlo, volviendonos completamente lobos, sin conocer nada humano y atacando sin pensarlo, como una bestia —Dijo Johann un poco avergonzado

—Somos hombres lobo, pero luchamos por proteger a los de la raza humana, de estos chupasangre desalmados—Dijo Yoandri, Christopher al instante se puso frente a él

—Cierra la puta boca o te dejare sangrando, zorrita —Dijo Christopher molesto, al instante Johann se levantó y lo empujó

—No nos das miedo —Dijo Johann, Christopher le devolvió el empujón y los tres estaban a la defensiva

—¡Basta! En mi casa no vendrán a pelear —Dije desde el sofá, pero fui totalmente ignorada

—Perros incompetentes —Dijo Christopher

—Idiota, ni siquiera deberías acercarte a ella, eres tan débil que terminarás matandola —Dijo Yoandri molesto, apretando la mandíbula

—Eres una monstruosidad —Dijo Johann con cara de asco, cuando sentí que Chris lo golpearía, me interpuse

—No, basta Christopher —Dije empujándolo, sin lograr moverlo un poco, Christopher engancho sus brazos en mi cintura y me abrazo

Sentí despegar mi pies levemente y en cuestión de un segundo, estábamos en mi habitación

—Ese par me interrumpieron —Dijo el mientras me miraba a los ojos, sentí como me pegaba nuevamente a él y acercaba su boca a la mía

Con lentitud, posó sus labios sobre los míos, la calidez de sus labios alteró completamente mi sistema nervioso, sentí como un choque eléctrico entraba por mi boca y se expandía por todo mi torrente sanguíneo

Sus labios se movían lento pero seguro, una de sus manos se posó sobre mi mejilla y la otra sobre mi cadera

Nuestras respiraciones eran lentas, sentí su lengua delinear el contorno de mis labios y morder levemente mi labio inferior
Después de unos segundos, el se separó de mi

—En verdad que desde que te ví, tenía ganas de hacerlo —Dijo con una sonrisa, sentí mis mejillas arder y dejé salir una pequeña sonrisa —Se que todavía tendrás dudas, pero con el tiempo trataré de resolverte hasta la más mínima —Dijo, se acercó a la ventana y la abrió —Te veo luego —Dijo antes de saltar, me asome con rapidez y lo ví caer de pie, después sin siquiera verle la sombra, se fue a toda velocidad

Salí de la habitación y caminé a la sala, Johann y Yoandri ya no estaban ahí, pero había una nota

Los chupasangre no son la mejor compañía, eres humana y la sangre corre por todo tu cuerpo, lo que el quiere es saciar su sed de sangre, ¿Acaso estas segura con el?

Tenía dudas, Christopher dijo que no me lastimaría, arriesgo su vida por mi, no creo que quiera alimentarse de mi

Termine de desayunar y toda la mañana me la pasé viendo televisión, no tenía tantas ganas de hacer algo productivo

Ya eran las 4:37 pm, tenía que levantarme a hacer algo de comer, mientras buscaba mis sandalias, la puerta sonó nuevamente

Me dirigí hacia ella y abrí, Christopher tenía una caja de pizza y una sonrisa en su rostro

—¿Tienes hambre? —Dijo mientras me mostraba la pizza

—Adelante, caminante —Dije haciéndome a un lado para dejarlo pasar, el entro y dejó la pizza en la mesa

[>>>]

Ambos estábamos sentados en el sofá, Christopher había traído una pizza de tres quesos, yo estaba viendo la película de La Cenicienta

—¿Y tú brillas en el sol? —Dije haciendo referencia a la películas para adolescentes

—No, no soy un diamante —Dijo el mientras reía —Si el sol me toca, me quemo, literalmente —Dijo mientras tomaba una rebanada de pizza

—¿Y cómo es que andas por la calle? —Dije mientras miraba hacia la ventana, el sol estaba apunto de esconderse

—Por estos —Dijo mientras sacaba una pequeña cadena con una cruz de su camisa y ponía un anillo plateado alado

—¿Que son esos? —Dije mirando ambos objetos

—Estos objetos están hechizados por una bruja, ella les dió un hechizo de protección solar, así podemos andar por el día sin ser incinerados —Dijo el

—¿Existen las brujas? —Dije atónita

—Si, debes creerlo enserio —Dijo mientras me miraba y segundos después ví como...

Y bueno...

¿Que les está pareciendo la novela? ¿Les gusta?

Sinceramente hace unos días traía la imaginación a todo lo que daba, así que empecé a escribir esta historia

¿Les gustaría maratón?

Comenten su opinión y veré si les hago maratón este fin de semana

Las leeré 😉