« Opuestos » • Julián Álvarez

t r e s

Ya había pasado una semana desde la fiesta que se hizo en la casa de Pedro. Con Julián no nos volvimos a hablar y no creo que nos volvamos a hablar ya que los dos somos muy pero muy diferentes, aparte por lo que me dijo Belén el anda en algo con una piba o eso entendí.

Hace como 15 minutos aproximadamente, terminamos de entrenar con las chicas, ahora en este momento me encuentro esperando a Belén en el estacionamiento, porque me tenía que devolver un vestido que le había prestado.

Estaba observando cómo atardecía, estuvo hermoso el día hoy, en el cielo se veían unos colores violetas combinado con el azul del cielo y lo amarillo del sol.

Pero de golpe me tocan el hombro haciendo que pegue un saltito del susto. Me di vuelta bruscamente y me lo encuentro a Julián a centímetros de mi.

– Julián – dije cerrando fuerte los ojos y colocando mis manos sobre mi pecho. – ¿Que pasó? – pregunte seca.

– ¿La viste a Belén? – pregunto este.

– Ah para – dije colocando mi mano en mi bolsillo trasero, haciendo como que buscaba algo. – Uyyyy, no la tengo en el bolsillo – agregue para luego sacar mi mano del bolsillo trasero. Este solo me miro serio y luego se rio. Que hermosa sonrisa tiene lpm.

– ¿Estamos de mal humor hoy? – pregunto Julián mientras me miraba a los ojos.

Creo que no hay cosa que me ponga más nerviosa que me miren a los ojos. Empecé a mirar hacia otro lado pero este se acerca hacia mi y me toma de la cara.

– ¿Estas nerviosa? – pregunto a centímetros de mis labios. Me esta volviendo loca.

– ¿Por qué tan cerca mío? – pregunte alejándome de él.

– Porqué se que te pones nerviosa – me contesto y yo solo reí.

– ¿Y vos como sabes? – pregunte.

– Me doy cuenta por como te pones y aparte miras para otro lado envés de mirarme –contesto. Yo solo lo mire y luego me di vuelta para dirigirme hacia mí auto.

Pero Julián me impidió, me tomo del brazo y me llevo hacia el.

– ¿Con todos te haces la difícil? – pregunto mientras me miraba a los ojos y luego bajo su mirada a mis labios.

– No, solo con desconocidos – dije para luego alejarme de él. Aunque me moría por besar sus labios como aquella noche.

– Ahhhh, pero los besas –.

– Que yo recuerde ese era un reto, encima tuyo– conteste. Cuando hablaba lo notaba que me miraba muy atento y cuando terminaba de hablar sonreía. – ¿Por qué me miras así? –.

– ¿Así como? – pregunto haciéndose el boludo.

– Como atento, no se – dije y rio.

Este iba a responder pero justo vino Belén.

– ¿Que onda parejita nueva? – dijo Belén a lo que yo la miré con cara de orto y Julián se reía.

– ¿Traes mi vestido? – pregunte y esta asintió para luego sacarlo de su bolso.

– ¿Quieren venir a casa? – pregunto Belén.

– No puedo yo, me tengo que ir – conteste.

– Entonces no voy yo – dijo Julián mirándome y Belén rio.

– Ah bueno, ¿ya andan en algo? – pregunto mirándonos a los dos.

– No – dijimos los dos al mismo tiempo.

– Pero yo sé que ella quiere estar conmigo–dijo Julián para luego mirarme. Yo solo reí.

– Para mí es al revés pero bueno – dije para luego acercarme a Belén para saludarla con un beso en la mejilla. – Bueno los dejo –.

Luego de terminar de saludar a Belén me acerque hacia Julián para también saludarlo.

– Yo no me canso de insistir – me dijo al oído.

Yo solo me reí y luego me dirigí hacia mi auto.