CAPITULO 15: ESPEJISMO: CUMPLIENDO CON EL DESTINO EN MI CUELLO

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Miroku miraba extrañado a su mejor amigo, no entendía lo que le acababa de decir...

Miroku: (Seriamente) Como que salvando su vida?

Sesshoumaru: (Decaído) Miroku... yo... (Tomando aire) Sé que me odiaras por lo que te diré pero... Rin y yo... ayer ella durmió conmigo... no necesito explicarte que sucedió... Said esta en Japón y la siguió... sabe que ella y yo...

Miroku: (Molesto y tomándolo del cuello) Porque me mintieron?

Sesshoumaru: Lo se... no debimos hacerlo (Mirándolo a los ojos) Yo te jure protegerla y no la puedo... dejar que... sufra o muera

Miroku comprendió lo difícil que estaba siendo para Sesshoumaru el dejar a su hermana, pudo notar cuán grande es su amor por ella, realmente su mejor amigo había cambiado, no era el mismo ególatra y egoísta del pasado...

Miroku: (Abrazándolo) Sessho... gracias por comprender la situación... será mejor que... vayas a casa

Sesshoumaru: (Abrazándolo) Perdóname amigo

Miroku: (Palmeándole la espalda) Eres muy valiente al dejarla ir... gracias a ti por amar a ese grado a mi hermana

Al separarse Miroku lo acompaño a la puerta para despedirlo, el albino se fue con el corazón destrozado, al subir a su auto lo encendió... en el asiento del copiloto estaban el Corán y el mashbaha...

Sesshoumaru: (Tomando el mashbaha) Te juro... te lo juro por el cielo, que cuando esto termine te buscare

Tomo el volante y comenzó a conducir hacia su mansión, mientras tanto Miroku subió hacia la habitación de su hermana, se sentía pesaroso pues sus padres habían hecho de todo con tal de destrozarle la vida.

En la habitación de la castaña...

Rin: (Llorando) Sango... fui tan estúpida... yo juraba que me estaba mintiendo... pero... me repudio... y lo hizo tres veces!!! Tres malditas veces!!!

Sango: (Abrazándola) Rin... tranquila... estoy sorprendida pues... yo pensé que había cambiado

Rin: (Mirándola) Sango... yo... merezco los azotes... los merezco por odalisca de un idiota que no me ama

Su hermano entra a la habitación y al ver a su hermana juzgar duramente a Sesshoumaru...

Miroku: (Seriamente) No digas eso Rin

Rin: (Mirándolo y lanzándose a sus brazos) Hermano... perdóname... te falté a la promesa... que te hice

Miroku: (Abrazándola y tiernamente) Rin... no importa... tranquila

Rin: (Desesperada) Soy de lo peor... soy una odalisca

Miroku: (Acariciando su cabello) No... no eres eso... tranquila

Sango: (Tiernamente) Rin... no llores

Rin: (Desolada)Déjenme sola por favor

Miroku: (Tristemente) Pero...

Rin: (Llorando) Déjenme sola

Le dieron un beso en la frente y salieron de la habitación, la castaña se dejó caer sobre su cama y comenzó a llorar desolada y desgarradoramente, mientras tanto afuera de su habitación Miroku y Sango la escuchan sollozar tristemente...

Sango: (Enojada) Maldito Sesshoumaru

Miroku: (Pesarosamente) No... no es así

Sango: (Sorprendida) Lo defiendes?

Maktub: Estaba EscritoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora