Siempre me he sentido como pez fuera del agua... mi nana dice que es porque estoy muy dividida... entre la conciencia de una musulmana y los deseos de una japonesa liberal, sin embargo no es mi culpa mis padres me impusieron este destino... no obsta...
Una semana pasaron en Marruecos en lo que Rin se recuperó de las heridas de los latigazos, al cumplir ese lapso de tiempo se decidió que regresarían a Japón, Jade, Khadija, Sumaya y su esposo acompañaron a Rin y a los demás ya que pronto seria la boda de su querida amiga.
Al llegar al aeropuerto Sango y Kagome los esperaban con mucha alegría, al ver a sus amores lo abrazaron fuertemente, no obstante al ver a Rin la abrazaron y lloraron ya que también habían sufrido mucho por ella.
Rin les presento a Jade, Khadija, Sumaya y su esposo y después de ese día comenzaron los preparativos para la boda de Rin y Kagome.
Durante un mes se hicieron los preparativos, el salón lujoso del Hotel Royal Tokio, las flores, el banquete. Kagome diseño los vestidos de novia ya que querían que fueran diferentes a lo que se había visto antes y ya que la boda seria japonesa y marroquí ameritaban vestidos de novia únicos. Recordó cuando Rin llego von su velo y como ha visto las vestimentas de los invitados de Marruecos así que sonriendo diseño los dos vestidos.
Al llegar el día de la boda, Jade, Khadija, Sumaya y Sango preparaban a Sin y Kagome, Jade encendió el Bahur y llenaron la gran tina del baño de la mansión Mizuno con pétalos de jazmín y rosas para que las chicas se dieran un baño aromático. Mientras Jade, Khadija y Sumaya cantan, aplauden alegremente mientras Sango les pone agua perfumada a las chicas que están dentro de la tina disfrutando del baño. Les dejan caer pétalos de las flores en ellas.
La sonrisa de ambas es amplia y llena de esperanza hacia el futuro. Al terminar, las depilaron para después entre Khadija y Jade arreglaran sus manos con dibujos hechos de Henna. Rin y Kagome sonríen felizmente mientras Sango y Sumaya les arreglan el cabello. Al terminar les colocaron sus vestidos de novias y el oro que Sesshoumaru e InuYasha les habían comprado. Rin en un principio no había querido esa parte de la costumbre musulmana sin embargo su futuro esposo se impuso ya que quería hacer todo lo que ordenaba el libro sagrado.
Kagome y Rin al verse al espejo se sorprendieron de mirarse como todas unas novias musulmanas...
Vestido de Kagome
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Vestido de Rin
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