El sonido lejano de la música predeterminada de la alarma resonó por la habitación de Jimin haciendo que, con dificultad, este abriera sus ojos. La acción provocó que el rubio sintiera finalmente su muy pesada y merecida resaca debido al alcohol que había consumido la noche anterior.
-Ugh... -estiró sus piernas, pero rápidamente se arrepintió de moverse y se envolvió más entre sus sábanas, no soportaba su cabeza y la luz que se colaba por las ventanas no hacía más que fastidiarlo-. Solo... cinco... minutos... más...
Sí, solo cinco minutos. Después de todo seguramente eran las 6 de la mañana y su examen final de cálculo empezaba a las 7, nada de qué preocuparse, nada importante...
-¡No he estudiado para el examen! -Jimin se levantó de golpe al recordar que por estar sumido en sus penas casi toda la semana no había recordado dar un mínimo repaso, pero tampoco tuvo mucho tiempo de pensar en eso pues, las punzadas en su cabeza incrementaron por el brusco movimiento y se apretó la cabeza buscando calmarlo-. ¿Dónde dejé las pastillas?
Jimin se quitó las sábanas y al hacerlo tuvo una vaga sensación de como si estiraran una de sus manos, pero lo ignoró y se colocó sus pantuflas para caminar hasta el interruptor y prepararse para tratar de llegar a tiempo al examen.
Después de tallarse los ojos un par de veces más logró enfocar bien a su alrededor y se percató de dos cosas. La primera era que sus compañeros de habitación ya no estaban y seguramente ambos habían limpiado el desastre que había hecho la noche anterior con las latas de todo tipo de bebidas alcohólicas que consumió y no recogió por dormirse, debía agradecerles el gesto luego.
Lo segundo y más importante, fue que pudo ver una tira de hilo de color rojo que provenía desde abajo de la puerta cerrada de su habitación, atravesaba el piso de esta y, después de seguirlo con la mirada, se dio cuenta de que continuaba hasta llegar a su dedo meñique, donde estaba atado con un perfecto moño, el cual si miraba bien, parecía tener forma de corazón.
-¿Qué es esto? -Jimin se agachó extrañado y tomó en hilo entre sus manos para posteriormente estirarlo viendo que salía sin dificultad alguna por debajo de la puerta, estiró de nuevo y solo aparecía más hilo, Jimin rió-. Entiendo, esta fue la venganza de Sungwoon y Taemin por hacerlos limpiar lo de anoche, muy graciosos.
Se levantó con una sonrisa en el rostro pensando en lo infantil que era la broma de sus amigos y caminó hasta su escritorio sacando unos cuantos ibuprofenos para después tomarlos rápidamente con una botella de agua que estaba a la mano.
-¿En serio pensaron que esto me haría enojar? -se preguntó a sí mismo en voz alta, a la vez que reía y miraba su mano derecha-. Lamento decepcionarlos pero pudieron haberlo hecho mejor -observó de reojo el reloj de su habitación para darse cuenta de que ya eran las 6:10 de la mañana-. Me lo quitaré e iré a ducharme rápido.
Jimin trató de desamarrar el hilo con la mano que seguía desatada, dándose cuenta de que el nudo estaba muy bien hecho y no pudo quitarlo. Probó otra vez lo mismo sin éxito alguno. Después optó por intentar con su boca, pero el hilo no se aflojó ni un poco. Ya comenzando a fastidiarse se acercó a su mochila sacando unas tijeras e intentó cortar el hilo, asustándose mucho al darse cuenta de que era demasiado duro y no podía romperlo.
-No puede ser... -exclamó ya preocupado volviendo otra vez al método de cortarlo con su boca sin ningún resultado-. ¡¿Qué es esto?! -Jimin comenzó a jalar y jalar el hilo que seguía saliendo en grandes cantidades por debajo de la puerta, inclusive logró hacer un pequeño tumulto que era igual de alto que una pelota de fútbol.
Jimin finalmente casi corrió hasta la puerta y la abrió sacando su cabeza, viendo como el resto de camino formado por el hilo se perdía a través del pasillo de los dormitorios. Para el rubio fue muy extraño ver como el resto de alumnos caminaba tranquilamente sin dar una sola mirada al piso para ver la llamativa tira de color rojo. Estuvo a punto de salir para seguir el rastro pero recordó que aún estaba en su pijama sudada y con olor a alcohol, por lo que decidió primero entrar a ponerse al menos un cambio de ropa y ver si conseguía llegar al final del hilo para cortarlo de una vez antes de ir a su examen.
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Fated 赤: 'pjm + jjk'
FantasyPark Jimin no tiene la culpa de ser una persona que se enamora fácilmente. Para su mala suerte, su vida amorosa es básicamente una falla tras otra. Acabando de pasar por una infidelidad y luego de una intensa noche de alcohol mezclado con lágrimas...