Una pequeña serie de One Shots dedicados a esta hermosa pareja.
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「 TEMAS 」
One day: Baile/Trajes/Música
Day two: AU Vigilantes/Cicatrices/Niños
Day three: Mascotas/Montañismo/Fresas
Day four: Bakusquad/Apoyo/Festival Cultural
Day five: Secundaria...
El pequeño grupo de amigos conformado por Kaminari, Mina, Sero, Kirishima y Bakugo, se encontraban jugando el juego de verdad o reto, el cual como muchos saben, consiste en que los participantes deben de responder a una pregunta (principalmente personal) con total sinceridad o cumplir un reto/desafío estipulado en ese momento.
¿Cómo habían llegado a jugar ese juego? Mina propuso hacer una pijamada en su hogar invitando a todos ellos, Bakugo, como siempre, se negaba a ir, pero el pelirrojo le convenció logrando que el rubio sea participante de aquella ‘divertida’ pijamada. Y ahora, se encontraban en el piso formando un círculo y adelante de ellos se encontraba una pequeña botella de refresco vacía la cual daba vueltas hasta detenerse para elegir a una persona que ponga el reto o plantee una pregunta y la otra que obedezca el reto o responda a la pregunta.
El encargado de hacer girar la botella era Kaminari, tomó la botella con su mano derecha y le dió un pequeño empujón para hacer que empezara a girar con rapidez pero con el pasar de los segundos los giros eran cada vez más lentos mostrando a Mina como la que mande y a Bakugo como la persona que obedezca, el rubio explosivo chasqueó su lengua con clara molestia mientras que la rosada mostraba su felicidad con una grande y malévola sonrisa.
--¡Bien, Bakugo! ¿Verdad o reto? -dijo con un tono animado observando a su compañero y amigo el cual le veía con indiferencia.
--Joder... Reto.
--¡Uhm! -Sonrió con malicia, en todo el tiempo que llevaban jugando el rubio cenizo siempre escogía verdad y ahora era turno de un picante reto para él- Mañana, cuando vayamos a los entrenamientos con Aizawa, quiero que tú y Kirishima cambien de trajes.-
--¿¡Qué!? ¡Espera! Mina, ¿por qué tengo que estar yo en ese reto? ¡A mí no me tocó!.
--Es por no hacer el reto de besar a Denki... Te dije que tendrías pronto un castigo por eso, ahora ahí lo tienes.
--¡Eso es injus-. -Fue interrumpido por una pequeña explosión de Bakugo el cual ya estaba bastante enojado con la rosada. -
--Mira, maldita mapache, ¡nunca voy a hacer es-. -Ahora Mina fue la encargada de interrumpir al del Quirk explosivo el cual le dirigió una mirada cargada de ganas de matarla en ese mismo lugar.
--¡Calla, Bakugo! ¿¡Acaso tienes miedo!? Es ridículo, solamente es por una clase, no es para tanto. --Un pequeño bufido salió de los labios del rubio cenizo el cual asintió levemente aceptando así el reto. -
--Solamente lo haré para que te comas tus malditas palabras, estúpida mapache.
Y así, terminaron aquel juego dirigiéndose a sus respectivos sacos de dormir para no quedarse dormidos en las clases.
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Al día siguiente todos se fueron a sus respectivas habitaciones para arreglarse e irse a su salón de clases, Kirishima y Bakugo -como era costumbre- se fueron juntos mientras hablaban de cosas triviales. Mientras que los otros tres integrantes del grupo ya se encontraban en la aula.
Las clases dieron inicio un corto tiempo después de que aquellos dos amigos llegaron al salón. Todas las clases pasaron como ya era costumbre, explicaciones, algún que otro tema nuevo y trabajos. El toque del timbre para gimnasia sonó, como Aizawa informó ayer, hoy tendrían que suspender el uniforme de gimnasia y tomarían el de héroe.
Kirishima se encontraba aún colocándose el raro y complejo -según él- traje del rubio, parecía que el traje era fácil de poner, pero no, habían muchas cosas que no entendía como se colocaban. Por otro lado, el rubio se separó de los demás vistiéndose en un lugar donde nadie lograra verlo. El traje de Kirishima era lindo, el Rubio lo sabía, hacía al pelirrojo verse aún más sexy de lo que ya era, pero, el rubio nunca pensó que estar de esa forma sería tan vergonzoso, Kirishima se veía feliz portando aquél traje, por otro lado, el rubio no se veía feliz se cruzó de brazos tapando así parte de su cuerpo descubierto. No tenía intensiones de salir en un buen rato.
Denki, al estar cansado de esperar, se dirigió al lugar en donde el del Quirk explosivo debería de estar.
--Bakugo... Ya es hora de salir, Aizawa Sensei ya quiere que salgamos.-
--Cállate, maldita basura. Ya voy. -demandó saliendo de aquella puerta que pertenecía al baño. -Me veo ridículo, todo esto es ridículo, maldito rayo.-
--N-No te ves ridículo... -Kaminari se estaba aguantando la risa, realmente no deseaba que el rubio explosivo lo matara ahora, pero era extraño ver a Bakugo con esa ropa, además de que ahora se encontraba portando un adorable tono rojizo en sus mejillas.-
--Cállate y camina. --gruñó empezando a caminar hacia la salida de los vestidores, cabe recalcar que en ningún momento apartó sus brazos cruzados de su pecho. -
Kirishima, Sero y Mina ya se encontraban en la cancha de gimnasia esperando a aquellos dos chicos que ahora se dirigían hacia ellos mientras hablaban de cosas inaudibles para aquellos tres. Mina fue la primera en ver al rubio cenizo, soltó una sonora carcajada de llamó la atención de los otros dos chicos, Sero fue el siguiente en reaccionar el cual acompañó la exagerada risa de su compañera y Kirishima por otro lado al verlo no pudo hacer más que quedarse en shock mientras sus mejillas tomaban un fuerte color rojizo.
--¡Dejen de reírse, malditas mierdas! -De su palma salió una pequeña explosión de amenaza la cual hizo callar a aquél par de amigos risueños.
--T-Te ves muy bien, B-Bakugo- Kirishima quería golpearse en ese momento por haber tartamudeado demasiado en esa pequeña frase.-
--Como sea... Tú tampoco te ves tan mal, pelos de mierda. -sonrió levemente mientras observaba a su compañero con su traje, no había duda alguna que Kirishima podría usar cualquier cosa y aún así se vería endemoniadamente sexy.
--¿uh? ¡Gracias! -sonrió de igual manera mientras que ambos empezaban a caminar integrándose al círculo de alumnos los cuales no sabían si poner atención a lo que el maestro decía o mirar a aquél dúo de amigos con trajes diferentes.
No había duda alguna de que este día fue uno de los más extraños y uno de los más lindos para esos dos chicos.