Contagiados

Capítulo 7. Humanos

Personajes :

Hugo : Alto, pelo corto castaño , 16 años, ojos verdes, jugador de videojuegos.

Aarón : Alto, con gafas, ojos marrones, pelo corto castaño, 16 años, jugador de baseball.

Juan : bajo, pelo corto castaño, ojos marrones, 16 años, estudiaba para ser informático.

Lucía: pelo largo y castaño , ojos marrones, estatura media, 15 años. Estudios desconocidos.

Comienzo capítulo 7.

Pasaron los días y todo era tranquilo, me extrañaba haber pasado tanto en tan poco tiempo y que ahora de golpe todo parezca que no ha pasado nada, eso si contar la soledad en las calles.
El silencio cada vez abundaba más en el campamento, desde la muerte de Dani parecía como si todos quisieramos ignorar lo ocurrido, pero ninguno pudiese. Es lógico hemos perdido ya a bastante gente.
Ya he perdido la cuenta de los días desde la infección y solo me vienen a la cabeza preguntas que posiblemente nunca consiga respuesta "¿Cómo se originó el virus?" "¿Realmente es un virus?" "¿Quién lo habrá provocado?" "¿Será intencionado?" justo en uno de esos momentos mis pensamientos fueron interrumpidos por Juan.

J-Hugo, ¿Qué vamos a hacer ahora? Nos quedamos sin comida y cada vez hay más contagiados por la zona.

Estaba sentado cerca de su tienda de campaña jugando al solitario. Por tercera vez.

A-Yo... Sinceramente, ya me canso de tener que limpiar la zona, los cadáveres cada vez me cansan más.-comentó desde una parte alejada limpiando su bate de sangre con un pañuelo el cual estaba ya oscuro.

Antes de poder pensar algo Lucía irrumpió en la conversación.

L-No podemos dejar que los días nos quemen la poca pólvora que nos queda, no podemos ser el bocado de cualquier perro de presa, si ahí fuera hay alguien su objetivo es que nos rindamos. Si alguien ha liberado esta cosa es por alguna razón.

H-Tienes razón-interrumpí de golpe- pero lo que no podemos pensar en hacer es buscar al responsable de este caos.

L-¿Y por qué no? ¿Acaso no pretendes atrapar al responsable de que tus amigos estén muertos?

H-Claro que quiero, y Lucía, sabes que yo te apoyaré en todo lo que haga falta, pero almenos dame la razón de que es una locura, no tenemos por dónde empezar.

J-Esta vez Hugo tiene razón.

Un ruido se volvió a escuchar fuera, conseguimos varias latas vacías y atadas a unos hilos y cables conseguimos hacer una pequeña alarma que nos alertaba de cuando los contagiados estaban merodeando por la zona.

A-Yo me encargo.

Dijo Aarón mientras agarraba con fuerza el bate.

L-No creo que te dure mucho limpio.-le dijo mientras sonreía.

Aarón en cambio no le devolvió la sonrisa, él decidió agarrar con más fuerza el bate y desaparecer entre los arboles.

L-Creo que aún me culpa de lo de Kath y Dani.

H-Lucía ya lo hablamos anoche, no tienes culpa solo que le cuesta procesar tanto cambio de golpe.

J-A él y a todos Hugo, pero tampoco hay que seguir lamentándolo.

L-Ya les hemos enterrado, ahora solo falta esperar que no salgan de ahí.

H-Empiezo a pensar que lo mejor sería irse de aquí.

L-¿Irse? ¿Dónde? Si no hay nadie.

A-Eso tampoco lo sabemos- dijo Aarón volviendo a sentarse en la misma esquina de antes.