Capítulo 4 (bien se contar hasta 4) (editado)

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-¡Por fin! - exclamó Ron hambriento

La cena comenzó, los adultos estaban hablando hasta que escucharon el tema de conversación de los menores y prestaron atención.

-Vamos Albus quién es la chica -dijo Rose-

-Sí, dinos quien es ella - le ayudó Scorpius-

-Dinos su nombre, a lo mejor la conocemos - siguió James

-Sí, dínoslo, que queremos saber quien es ella, dinos su casa al menos -dijo Fred II

-¡Ya vale! ¡No es una chica! ¡Soy gay! - exclamó Albus, cuando se dio cuenta, todos estaban mirándolo, algunos con la boca abierta, otros muy sorprendidos y el resto exclamó al unísono un "que".

Cuando Albus se dio cuenta de lo que dijo, se le empezaron a cristalizar los ojos. Se levantó rápido de la silla y se fue escaleras arriba en dirección a su habitación, puso el pestillo y se tiró a su cama y comenzó a llorar.

No se podía creer que había dicho eso delante de todos, estaba hundido en sus pensamientos, buscando alguna excusa para decirle a todos, tal vez podía decir que era mentira o que era una broma pensó, aunque sabía perfectamente que eso nadie se lo creería. Iba a pensar otra excusa mejor, cuando escuchó unos golpes en su puerta, no contestó, pensando que sería su madre o su padre.

- Albus, abre, soy James - contestó detrás de la puerta su hermano mayor

No contestó, le pareció oír el pestillo de la puerta abrirse, para luego cerrarse. James entró y volvió a cerrar la puerta. Se acercó a su hermano, se sentó a su lado en la cama y le abrazó. Albus se sorprendió ante el gesto de su hermano, pero le devolvió el abrazo y siguió llorando en su hombro. Pasaron los minutos y se calmó, siguieron abrazados un momento más en silencio hasta que Albus lo rompió diciendo:

-Creo que deberíamos bajar-

¿Estás seguro?

-Creo que sí

-Sabes que puedes contar conmigo siempre, ¿verdad?

-Lo sé, solo que tenía miedo de lo que pensaras y por eso no te dije nada, no quería que me juzgaras

-Sería muy hipócrita de mi parte si te juzgara, después de que tu me apoyaras con lo mío

Ambos hermanos volvieron a abrazarse y luego bajaron las escaleras, al hacerlo la sala se quedó en silencio. Todos dejaron de hablar para dirigir sus miradas al mediano de los Potter.

-¿Ahora ya podemos abrir los regalos? - preguntó Lily rompiendo el incómodo silencio

-Siento mucho haber estropeado la cena - dijo Albus cabizbajo

-Entonces ... ¿Es verdad? ¿De verdad eres gay? -le preguntó Rose

-Eh... Sí - contestó aún cabizbajo, para luego alzar la mirada y dirigirla a sus padres

-¿Albus... Por qué no nos lo habías dicho? - le preguntó su padre

-No quería decepcionaros ... Tenía miedo

-No tienes por qué tener miedo de mostrar como eres, nosotros te apoyaremos, siempre - dijo su madre

En cuanto terminó, Albus, fue hacia sus padres, fundiéndose los tres en un abrazo al que no tardaron en unirse a los demás presentes.

-¿¡Ahora ya podemos abrir los regalos!? - volvió a preguntar Lily. De fondo se escucharon algunas risas

- Claro que sí Lily - le contestó amablemente su abuela Molly

Todos los Weasley y Potter se fueron a buscar sus regalos bajo el árbol. Albus había encontrado uno con el nombre de su amigo y se lo entregó junto con el que él le había hecho.

-Estos son para ti Scorp-¡¿Para mí?! ¿¡Yo tengo regalos!?

Albus asintió, mientras que el rubio abría sus regalos él se puso el jersey que le había regalado su abuela Molly, como al resto de la familia, el jersey era verde con una A dorada.

Luego se fijó en que Scorp se estaba poniendo un jersey igual al suyo, solo que con una S

-Draco - le llamó Harry - este es para ti - le dijo extendiéndole un regalo

Draco, bajo la atenta mirada de algunos Weasley lo abrió, encontrándose con un jersey verde con una D que no dudó en ponerse, luego abrazó a Molly, quien le devolvió el abrazo.

-Gracias

Cuando los regalos se acabaron todos tenían puesto el jersey que Molly les había hecho a cada uno, así que decidieron tomarse una foto para inmortalizar el momento.




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