Amor, amor, amor, amor y más amor. Desde que Shawn y Adelaide fueron una pareja de promoción hasta una pareja formal, un par de padres y un par de esposos se han dado cuenta de los tipos de amor que existen.
Si le preguntas a ellos por separado qué...
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¿Han pasado por esa situación donde no saben que hacer? Yo sí, Adelaide se fue a cambiar, las chicas insistieron en que debería de ensayar en lencería, esa idea no me desagrada del todo, pero ¡Vamos! No sé cuantas personas vayan a ver a esa hermosura que tengo de esposa con poca ropa.
Recuerdo que dejo las pasarelas porque quería ser una madre de tiempo completo, no me opuse, pero tampoco estaba muy feliz con su decisión. Me daba la impresión de que no se sentía del todo segura con eso de dejarlas; era como yo con la música, por más que lo intente siempre vuelvo a lo que me apasiona y mi hermosa chica de ojos marinos no pudo resistirse y volvió a eso que ama hacer.
—Shawn.— alguien habla a mis espaldas, tengo a Jade en brazos y a Jasper tomado de mi mano, están aprendiedo a caminar.
Me giro para ver de quién se trata; es Hailey. Creo que mis cejas alcanzaron casi a mi cabello de tanto que las encaré.
—Hailey.— digo aún asombrado.
Si, ya lo sé, ella es modelo, pero ni Bella, ni Gigi y muchisímo menos Kendall la mencionaron.
—¿Cómo has estado?— me cuestiona.
—De maravilla.— respondo—. ¿Y tú? ¿Cómo va la vida de casada?
—Lo mismo podría preguntar yo. — acotó ella y ambos reímos—. Va bien, a pesar de las peleas Justin trata de ser buen esposo, ¿la vida de papá, cantante y esposo? ¿Cómo va para ti?
Sonreí, solo recordar como todo lo que pase con Adelaide me llevó a este punto me da nostalgía, es algo que no puedo describir muy a fondo, porque no sé de que manera hacerlo.
—De maravilla.— respondí mirando a Jade—. Cuando me entere que Adelaide estaba embarazada fui el chico más feliz sobre la tierra, sentí que era la forma del mundo de decirme que ella era mi presente y mi futuro; cuando vi a mis hijos por primera vez fue hermoso, conocí algo que Ad y yo hicimos con amor, una parte de ambos.
Hailey me sonrió, le sonreí de vuelta.
—Y ellos son los mellizos más conocidos de todo el espectaculo.— dijo intercalando su mirada entre mis lucesitas.
—Se puede decir que sí.
—Los mellizos Mendes.— aclaró ella.
—Los mismos.— respondí—. Bueno, Mendes Gray, tienen los dos apellidos pero por lo general solo usan el Mendes.
—¿Puedo cargarlo?— cuestiono Hailey señalando a Jasper.
Yo asentí, no haría ningún mal, ella era una buena persona.
Tomó en sus brazos a Jasper y lo miró detenidamente para luego verme a mi y vovler a mirar a mi pequeño.
—Se parece mucho a ti.— dijo por fin—. Tiene los ojos de tu esposa, pero es casi igual a ti.
