Hoy escape de la rutina y baje a san denis,
un lugar en ruinas donde los amores cuestan cincuenta la hora,
entre tanta pajarona sonriente y cansada de vivir,
vislumbre un par de ojos fieros similares a los tuyos,
camine con prisa ya que el miedo de perder era latente,
sin dudarlo a mi encuentro vino y su fiereza se esparcía por su rostro,
por sus hombros desnudos,
por sus brazos y la punta de sus dedos que impedían mis palabras.
Su sonrisa la ponía a salvo del mundo mientras tomaba mi mano,
entre tanto yo quedaba a su merced,
como un adolescente mirando a los ojos por primera vez lo prohibido,
fue el olvido quien sirviera de justificación para lanzarme al abismo,
-¡no debería hacerlo!-
en el fondo del abismo un cuerpo desnudo esperando a ser tomado,
y las ansias de un hombre abandonado
por sentir una vez mas el cuerpo ardiente de una dama...
¿Que debo hacer?
-No lo pienses, que el tiempo vale oro en este puerto maldito-
#5
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Sequía.
Short Story¿Como empezar cuando algo acaba de llegar a su final? o mejor aun, con que fuerzas retomar el habito de escribir para callar el ruido que volvió tras tu silencio. No es esto un libro de auto ayuda, aunque lo parezca por la mal frase del comienzo, e...
