Celos

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Narradora

Yaritsa: y su alma desaparecerá.

Valerik: .....-mira al piso -vete de aquí, por favor....-la criada obedeció -¡Agh! -se levanto del sillón y se dispuso a mirar por la ventana -...¿por qué? -lágrimas comenzaron a bajar de sus mejillas, se abrazó a si mismo teniendo una mirada fija al horizonte.

Ciel entró en silencio sorprendiéndose un poco viendo la escena, hizo una tos falsa y el ruso trago saliva respirando profundamente.

Valerik: ¿Pasa algo, conde Ciel? -preguntó sin mirarlo.

Ciel: ...La verdad me intrigaba saber el porque el invitado se fue "corriendo"

Valerik: yo que se, tal vez se creé caballo. Jajaja.

Ciel: su respuesta no es muy educada, que digamos, aunque tampoco lo es llorar, llorar es de débiles -el otro cansado de su actitud se dio vuelta dejando ver su rostro lleno de lágrimas.

Valerik: no soy débil, quiere decir que tengo sentimientos vivos... Q-que soy valiente por no perderlos como otra gente, yo si puedo soportar todo y más por las personas que apreció de verdad con mi c-corazón aún latiente....tu no, tu eres un cobarde que se esconde detrás de un demonio como un...niño asustadizo, tu... -se largo a llorar e inmediatamente se marcho dejando a Ciel con la palabra en la boca, este apretó los puños y la mandíbula con fuerza, el ruso tenía razón, pero se sentía frustrado por herirlo peor.

Ciel: yo y mi estúpido ser....

Narra Ciel

Otro nuevo día estaba en mi despacho esperando que el ruso comentara algo pervertido cosa que no paso por alguna razón me sentí mal desde hace mucho tiempo viene tomando distancia conmigo y más amistad con Elizabeth, me enfada y me entristece.

Valerik: ¿qué día es hoy?

Ciel: veintiocho de septiembre.

Valerik: bien, gracias.

Falta poco para que vuelva a su país, tal vez él ya no quiere estar aquí.

Valerik: ¿estas bien?

Ciel: e-eh si, si

Valerik: si tu lo dices

Ciel: deja de ser así conmigo

Valerik: lo lamento, se que te molesto -se levantó y se fue antes de poder detenerlo

Me levanté y lo busque por los pasillos, pero no lo encontraba

Mey-Rimm: joven amo ¿qué le sucede?

Ciel: donde esta el extranjero?

Mey-Rimm: lo siento, no lo vi.

Seguí buscando y nada, no lo encontraba es como si se hubiera esfumado en el aire.

Sebastian: bocchan -cada mayordomo volvió a su posición original como debe ser.

Ciel: ¿donde esta él?

Sebastian: ¿quien es "él"?

Ciel: no te hagas el estúpido.

Sebastian: valla al parecer esta alterado, si se refiere al conde ruso...él se fue con su prometida hace un momento.

Eso me dejo en shok, no sabia que tenía, él me mintió.

Sebastian: podríamos--

Alguien lo interrumpió tocando la puerta, mi demonio abrió y yo comencé a caminar hacia mi habitación.

Sebastian: lady Elizabeth, buenos días.

Ciel: Hay no justo, ahora no -pensé.

Elizabeth: ¡Shieru! -mi prometida corrió en mi dirección para abrazarme, sinceramente no tenía ganas de forcejear para que me soltara, no tenía ganas de hablar, tampoco de moverme -sabes que hoy es la fiesta del conde Trancy -se alejó sosteniendo mis manos.

Ciel: lo sé.

Elizabeth: pensé que podríamos ir a comprar ropa a Londres. Como prometidos -sonrio.

Ciel: Elizabeth...yo...

Sebastian: mi amo esta complacido con su propuesta, por favor espere en el carruaje.

Elizabeth: esta bien -se fue corriendo satisfecha.

Sebastian: joven amo, usted también debería salir. A parte tal vez nos encontremos a su amado.

Ciel: no es - desapareció antes de que pudiera terminar la oración -mi amado...

Narra Valerik

Mari: oh mira esos zapatos, son perfectos para mi.

Valerik: tu eres perfecta, los zapatos son un decoro innecesario.... Pero si los deseas, no me podré negar -sonrió mirándola.

Mari: entremos -nos introducimos al local encontrándome con Ciel, Elizabeth y Sebastian. Los ignore y actúe como si no los hubiera visto, solo me enfoqué en Mari.

Elizabeth: ¡Mari!

Mari: ¡Lizzy! -corrio hasta ella abrazándola -que coincidencia verte aquí -me acerqué en un modo elegante y educado -el es mi prometido, Valerik Monte Blanco.

Elizabeth: Lo se, ya nos conocemos -agarré su mano y la bese.

Valerik: siempre es bueno verlos a todos -sonreí de lado y Ciel me miro más serió de lo normal, diría que hasta enojado, sonríe mostrando mis dientes -Querida, ¿no querías probar un par de zapatos?

Mari: oh, si! -se sentó al lado de su amiga y cuando el vendedor trajo los zapatos los agarré y me arrodille frente a ella -E-eh...Valerik ¿qué haces?

Valerik: ¿Qué más haría, mi dulce dama? -agarré uno de sus pies -permitame -Le puse los zapatos.

Algunos nos miraban, ya se sus pensamientos "que caballero" "quisiera saber quien es" "¿por qué mi esposo no es así?"

Elizabeth: Oh, Ciel ¿por qué tu no haces eso?

Valerik: Porque él no soy yo, señorita -ayude a Mari a pararse.

Mari: me quedan perfectos.

Valerik: es obvio, tu eres la perfección.

Phantomhive trato de hacer lo mismo que yo, pero era obvio que él no podría imitarme, es tan lindo....creo que lo estoy mirando mucho por la mirada de Sebastian.

Sebastian: disculpen ¿podrían ir a comprar todos juntos? -se gano una mirada de odio mía y de su amo.

Valerik: solo si eso las hace felices.

Mari/Lizzy: claro que si.

Estuvimos comprando en pareja toda la tarde, debo admitir que me encanto fastidiar al ingles rozando nuestras manos, dándole halagos a mi prometida o guiñándole el ojo.

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Y? Les gusto?

Kuroshitsuji Yaoi (Amor entre Condes)Where stories live. Discover now