My life is a problem [Sebastian Villalobos]

Cap.1

Mi nombre es Chloe Houtzen, actualmente vivo en Colombia, y la verdad, mi vida ha sido rara y mala desde hace ya mucho.

Todo empezó cuando vivía en México, en diciembre del 2007, cuando apenas tenía 7 años. Esa noche mis padres me dijeron que iríamos a "visitar a una tía" lo cual me emocionó mucho, ya que casi nunca salía del apartamento donde vivíamos, únicamente salía de vez en cuando con mi madre a hacer las compras, también la acompañaba a dejar la ropa que planchaba y a la escuela, acababa de iniciar mi segundo año de primaria. Por su lado mi papá casi no estaba en el departamento, se la pasaba trabajando de cocinero en un pequeño restaurant.

Esa noche fría de diciembre, mi mamá me puso un abrigo rojo y un gorro y guantes a juego, puso algunas cosas en mi mochila y salimos los tres a tomar un taxi para llegara casa de mi tía. Debo admitir que cuando llegamos me asombré pues era una casa bastante grande, pero pensé que tal vez mi tía tenía mucho dinero.

Después de llamar a la puerta varias veces, abrió una señora algo grande de edad, un poco rellenita, tenía su cabello pelirrojo recogido en un chongo y unos ojos grandes color miel llenos de dulzura. Ella nos dio un saludo de buenas noches y nos invitó a pasar, pude escuchar algunos ruidos provenientes del fondo de la casa, pero no le di importancia.

Seguimos a "mi tía" a una especie de oficina, mis padres comenzaron a hablar con ella, pero en susurros, por lo tanto, no entendí bien aquella conversación. Además de que estaba muy distraída viendo las decoraciones de aquel cuarto.

- ¿Están seguros de esta decisión? - preguntó aquella mujer

- Es lo mejor para ella, si no, solo estaremos retrasando lo inevitable- Contestó mi madre con apenas un hilo de voz

-Lamento mucho esta situación, pero si no hay más que hacer, llenen estos papeles- Dijo mi tía y les extendió unas hojas.

Mi papá tomó los papeles y sus manos temblaban, la tristeza invadía el rostro de ambos y en ese entonces una gran angustia invadió todo mi pequeño ser, tenía ganas de llorar y salir corriendo de ahí sin saber por qué. Todo el ambiente se sentía frío y triste, no tenía idea de que estaba ante el comienzo de todos mis problemas.

Al terminar de llenar los papeles la señora que hasta ese momento creí era mi tía, los tomó y salió de la habitación diciendo -Les daré privacidad, lo lamento mucho.

Mi mamá me dio un gran abrazo y estalló en lágrimas. Yo no entendía que estaba sucediendo, pero también me eché a llorar.

-Mi pequeña- habló mi papa con un mundo en la garganta- Tenemos que pedirte que te quedes en este lugar por un tiempo

-Pero ¿Y ustedes?, ¿En dónde estarán? – Dije con una voz apenas entendible

- Cariño, a donde vamos, no podemos llevarte- Contestó mi madre con la voz entrecortada

-Les prometo que me portaré mejor y haré todas mis tareas, pero por favor, no me dejen – Me abracé a mi papá mientras lloriqueaba

-Preciosa, te prometo que, si mamá y yo logramos salir de esta, volveremos y todo será muy bonito, pero por ahora debes aguardar aquí- Dijo mi papá acariciando mi cabeza

- ¿Mi tía cuidará de mi mientras vuelven? – Miré a mi mamá a sus preciosos ojos verdes que se encontraban llenos de lágrimas

- Así es mi niña, ella cuidará de ti, no es tu tía, pero estoy segura de que te dará muchos cariños y te tratara bien- Me sonrió dulcemente

- Por favor, vuelvan pronto por mí, no me olviden, seré buena niña- Dije llorando

- Jamás te olvidaremos pequeñita, ya veras como estaremos juntos muy pronto, te amamos- Dijo mi papá mientras se arrodillaba a mi altura y me daba un beso en la frente