Paper Hearts [YOONSEOK]

7

Era nuestro tercer y último día que estábamos en esas cabañas, al parecer nada malo está sucediendo así que tal vez escuché mal lo que dijo Kwan.

En la mañana todo estaba tranquilo, Kwan con mi mamá estaban en lo mejor de coquetear, que asco, a su edad deberían de estar viendo en que funeraria sería la mejor elección para que se vea mejor su tumba.

Cuando estaba comenzando a atardecer nos dirigíamos hacia un lago, siempre nos gustaba ver el atardecer porque me parecía algo mágico y único, el lago que habíamos descubierto hace dos días era donde mejor se podía apreciar el atardecer.
Se veía demasiado irreal, todo era demasiado calmado, no había contaminación aniquilando especies de plantas ni nada así.

Todo estaba tan perfecto. Así que nos había gustado ver el atardecer en el lago, por las tonalidades que tomaba el cielo y también que estás se reflejaban en el lago.

Estábamos caminando cerca de nuestra cabaña, ya que, nos dirigíamos al lago que estaba a unos 5 minutos caminando para pasar un momento a solas pero en eso unos gritos nos llamaron la atención, más al escuchar el portazo dentro de la cabaña y la persona que estaba gritando pude identificarla al instante... era Jimin.

- ¡MAMÁ! ¡YOONGI! ¡HOSEOK! ¡AYUDA! ¡ALGUIEN POR FAVOR! ¡AYÚDENME!- comencé a escuchar los gritos junto a los sollozos de Jimin y yo caminé mucho más rápido.

-De nada te servirá gritar cerdo mal agradecido, ahora te preparas para dejar de ser virgen al igual que tu hermano- al escuchar eso y saber que era Kwan el que estaba con Jimin me alertó demasiado.

Camine de puntas para llegar a la puerta y Hoseok venía detrás de mi, vi como se quedo paralizado al escuchar lo último pero a mí no me importó, lo que importa es Jimin.

- ¿Có... Cómo mi hermano?- los sollozos de Jimin aumentaron, al estar frente a la puerta no me importó que Kwan se diera cuenta de nuestra presencia, en ese momento comencé a pegarle con mi cuerpo a la puerta y Hoseok también comenzó a empujar, estábamos tratando de derribar la puerta para poder salvarlo, tratando de evitar que quedara con un trauma gigantesco.

Mientras más empujábamos Jimin comenzaba a gritar más fuerte pidiendo ayuda, hasta que logramos derribar la puerta. Entramos justo a tiempo, Kwan ya le había quitado la camisa a Jimin pero solamente eso y estaba cerca de quitarle el pantalón, solamente que ahora este tenía marcas rojas y algo de sangre, había sido golpeado y aruñado por Kwan, eso era demasiado evidente.

Me fui directo a los golpes no me importa nada ahora, solo defender a Jimin, Kwan trataba de devolvérmelos pero él no sabía que estaba asistiendo a clases de Taekwondo que yo había pagado con mis ahorros, y ya era cinta roja.

-Si tu no aprendiste con palabras, aprenderás con golpes, bastardo- finalmente mi fuerza era mayor que la de él y estuve a punto de dejarlo completamente inconsciente pero mi mamá entró a detenerme.

-¡MIN YOONGI, BASTA! Mira lo que acabas de hacer, esto no es digno de ti y mucho menos de un Min.- ella me dirigió una mirada de odio y ahora se que está enojada conmigo pero no me importa, pude darle lo que se merecía a su novio de mierda.

Kwan salió de la cabaña pero vi que había dejado algo en el suelo, lo recogí y era un sobre blanco con el nombre de Sun Hee, antes de dárselo lo abrí yo y comencé a leerlo.

Cuando terminé fui donde Jimin y lo abracé, pude salvarlo de un problema junto a un trauma que iba a durarle toda su vida, él no sabía lo que me había pasado y no quiero que lo sepa pero sé que iba a enterarse de cualquier forma.

En eso veo que mi mamá solo estaba parada en la puerta, sin saber que decir o hacer, cuando me levanté de la cama instantáneamente me miró con odio y rencor, yo no le hice nada a ella para que me viera de esa forma.

-¿Qué deseas, mamá?- entonces ella dijo lo que nunca me esperé que saliera de su boca.

-Siempre arruinas todo, eres un malagradecido Min Yoongi, nunca podemos hacer algo bien por tu culpa, ¿tanta era la necesidad que tenías que venirlo a arruinar de nuevo? Desde que naciste me arruinaste la vida y vuelves a hacerlo, tú nunca supiste comportarte y por eso tu papá nos dejó- apreté mis puños, no quería pegarle pero estaba empezando a provocarme y eso era una advertencia.

- ¿De verdad te jodí tu puto viaje que yo ni lo pedí? Entonces toma esta carta de mierda porque ni te importará lo que te cuenta este maldito hijo de puta en eso.- eso no era todo lo que iba a decir.

- Y SI TANTO TE JODI TU PUTA VIDA ME HUBIERAS DEJADO EN LA CALLE, NO DEBERÍAS DE HABERME CRIADO BAJO UN TECHO EN EL QUE NO ME QUERÍAN Y TODO LO QUE ME DECÍAN ERA UNA PUTA MENTIRA -le tiré la carta en la cara, me fui de ahí enojado y decepcionado, no me importó nadie ni nada en ese momento, solo necesitaba alejarme de ese lugar ahora mismo.

Hoseok estaba con los ojos abiertos al tope y no trató de tocarme ni seguirme porque sabe que es mejor esperar a que yo me calme para evitar decir o hacer cosas que no debo. Cuando iba caminando, escuché que alguien iba a salir de la cabaña de mi mamá así que me escondí por cualquier cosa y veo salir a Kwan preocupado. Vi que Kwan salió con el teléfono en mano y decidí grabar en audio.

-¿Hola?... Kang Dae, soy Min Ki, el plan no salió como queríamos.- entonces este pedazo de basura no se llama Kwan y ha tenido engañada a mi mamá por tantos años. Pendejo. - El plan de violar a los dos hijos de Sun hee salió mal, el hijo mayor de la perra esa me descubrió porque el escuincle menos no se callaba, solo pude violar al mayor... Si, lo sé, se que fue hace 5 años pero nuestro plan ya estaba en marcha... - estuvo un tiempo escuchando para volver a abrir la boca.

-Intentaré hacerlo cuando nadie más esté en su casa, así después cobrarle a esa una buena cantidad de dinero para desaparecer... Está bien, mañana volvemos a Corea, así que para el sábado ya podremos cobrar... Adiós - terminó la llamada y yo terminé de grabar, ahora sí, este maldito hijo de puta no saldrá de esta.

Vi que se dirigía nuevamente a la cabaña pero fui más rápido, lo agarré de la camisa y lo lancé lejos para después cerrar con seguro la única puerta que da al exterior con el interior de la cabaña.

Mi mamá estaba en la cabaña pero yo no le hablé, ella no debe de sentirse obligada a cuidar de alguien a quien nunca deseó. Solo fui a sacar una botella con agua para encerrarme en mi cuarto, antes de que me fuera a acostar a la cama alguien tocó la puerta y solo escuché la voz de Jimin.

-¿Yoongi puedes abrir?- yo lo hice rápidamente porque no sabía que quería decirme y se que él todavía tiene miedo de que pueda volver Kwan o mejor dicho Min Ki.

-¿Qué paso pequeñín?- sé que a él le molestaba que lo llamara así pero no puedo evitarlo mientras que Jimin me estaba viendo indignado.-No me mires así, sabes que no puedo evitarlo.- vi que sonrío con ese esplendor tan inocente e infantil.

-Quería agradecerte, gracias por salvarme de Kwan, no sé que hubiera pasado sin ti. Gracias por todo Yoongi, algún día podré devolvértelo. Buenas noches, te quiero- después de eso me abrazó y se fue para su cuarto, apagué las luces, cerré la puerta y me acosté en la cama.

Estaba a punto de dormirme cuando siento un peso a mi lado, cuando volteé a ver estaba Hoseok, solamente sonreí y lo abracé para después quedarme dormido, sin antes escuchar un "te amo" por su parte.